Feijóo corteja a los socialistas desengañados y pide una ola de votos como la que obtuvo Felipe González en 1982

El líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha hecho un guiño este sábado a los socialistas desencantados con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, llegando a establecer un paralelismo entre el momento político actual y aquel que en 1982 dio una histórica victoria al PSOE de Felipe González. Tras afirmar que España “mayoritariamente acertó” entonces, Feijoo ha afirmado: “Ahora se necesit...

El líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha hecho un guiño este sábado a los socialistas desencantados con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, llegando a establecer un paralelismo entre el momento político actual y aquel que en 1982 dio una histórica victoria al PSOE de Felipe González. Tras afirmar que España “mayoritariamente acertó” entonces, Feijoo ha afirmado: “Ahora se necesita con mayor urgencia el cambio del 82, producirlo en el 23, para iniciar una nueva etapa de la España constitucional que iniciamos primero con la victoria de la UCD y después del Partido Socialista”. El líder popular ha compartido mitin en Granada con el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, y ambos se han esforzado por aludir exclusivamente al sanchismo o a Pedro Sánchez como foco de sus críticas, evitando señalar al PSOE en un territorio que hasta hace un año fue un feudo electoral de los socialistas.

En las elecciones autonómicas andaluzas del pasado junio, el PP de Moreno Bonilla arrasó en toda la región, incluso en municipios donde los populares no tenían ni siquiera concejales. En el PP tienen claro ahora, ante las municipales del 28-M, que su objetivo es reproducir esa histórica victoria, ganar el voto rural y atraer, jugando la baza de la moderación, a los votantes socialistas de la Andalucía interior que, según sus encuestas internas, no se sienten identificados con Pedro Sánchez. “Hay muchos que no es que lo rechacen, es que lo odian”, aseguran fuentes cercanas a la cúpula popular. A ellos parecía dirigirse Feijóo esta mañana en Granada, con alusiones que ya deslizó la víspera en otro acto en Málaga.

Tras poner al Gobierno de Moreno como ejemplo del cambio que suponen las políticas del PP en Andalucía, el líder de los populares ha puntualizado: “Cuando hablamos de cambio me recuerda a aquel cambio del 82 de Felipe González. España por primera vez votó de manera mayoritaria al Partido Socialista para consolidar aquella democracia que iniciamos en el año 78. Y viendo aquel Partido Socialista con este partido sanchista, es evidente que España mayoritariamente acertó en el año 82″. Feijóo ha recurrido a esa sensación de optimismo generalizado de hace 40 años para añadir que ese cambio al que apela no es un eslogan sino la vía para “devolver la credibilidad en las instituciones”.

También Moreno ha sido muy beligerante con Pedro Sánchez y, consciente del poder que el PSOE sigue manteniendo en los Ayuntamientos en Andalucía —los socialistas gobiernan en más del 57% de los municipios de la comunidad―, ha sido muy directo a la hora de pedir el apoyo a sus votantes: “A los socialistas que no coinciden con el sanchismo les digo que este es el momento de coger otra papeleta y mandar a Sánchez a la oposición”, ha dicho. Moreno ha equiparado directamente el voto a los candidatos socialistas con el voto al presidente del Gobierno, siguiendo la estrategia de su partido de poner en el debate municipal la política nacional.

Un día después de que los sindicatos y la patronal alcanzaran un preacuerdo para subir los salarios hasta 2025, Feijóo ha asegurado que él logrará que se firme el pacto de rentas que Sánchez planteó en 2022. “El pacto de rentas que él no consiguió lo conseguiremos nosotros”, ha sostenido, tras señalar que “Sánchez ha recibido una gran lección de los trabajadores y los empresarios, que se están poniendo de acuerdo pese a los insultos y el intento del Gobierno por dividirles”. Además, en plena ofensiva del PP andaluz por la falta de inversiones hidrícas en la comunidad por parte del Gobierno central —con la que los populares tratan de contrarrestar la polémica por la ley autonómica que ampliará regadíos en el entorno de Doñana—, Feijóo se ha comprometido a acometer esas obras si llega a La Moncloa. “Es mi compromiso personal, mi compromiso político y mi compromiso institucional poner el agua en Andalucía”, ha dicho, para añadir: “Traer el agua adonde no la hay bien vale ganar unas elecciones generales”.