Mazón pide a la izquierda “que se calle” mientras se negocia la vuelta de la Copa del América a Valencia

El presidente de la Generalitat pregunta a la oposición si aprueba que el Gobierno dedique casi 20 millones para las regatas en Barcelona, que ha rechazado albergar otra edición, y no para Valencia

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, junto a la oncóloga, Ana LLuch, durante su visita este lunes al centro de día de personas mayores 'Ana Lluch', del Instituto Valenciano de Servicios Sociales.Manuel Bruque (EFE)

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, del PP ha reclamado este lunes al PSPV-PSOE y a Compromís “que se callen” y que “no molesten” mientras se está negociando el regreso de la Copa del América de vela a Valencia para que la ciudad tenga “el relumbrón que se merece”. Mazón ha acusado a la izquierda valenciana de aplaudir los casi 20 millones de euros que el Gobierno de España ha destinado como subvención a esta competición celebrada recientemente en Barcelona, y se ha preguntado si es que la ministra valenciana -en alusión a la socialista Diana Morant- aprueba esa cifra para Barcelona y no la quiere para su tierra.

“¿Pero qué broma es esta? ¿Ahora resulta que no podemos tener la Copa América como sí que la han tenido los catalanes?”, ha cuestionado el presidente, quien, en declaraciones a los medios en Meliana (Valencia), ha aseverado que ha visto cambios de posición “chocantes” en el socialismo valenciano, como con el fondo de nivelación, pero este “se lleva la palma”.

Ha reprochado al PSPV que diga que no a la posibilidad de la Copa América en este momento en que “nos lo estamos jugando todo, en el momento más delicado de nuestras negociaciones, en el momento que necesitamos el apoyo de toda la sociedad valenciana para traer riqueza, para traer promoción, para traer brillo” a la ciudad de València.

El presidente ha criticado que tenga que aparecer la ministra valenciana del Gobierno a “intentar meter un palo en la rueda” y además decir que no van a dar “ningún apoyo cuando no hace ni tres días se lo acaban de dar a la celebración en Cataluña”, y ha considerado “muy grave” esa postura de “en Barcelona sí y en València no”.

Mazón ha exigido una rectificación y una explicación a la izquierda valenciana de por qué están “a favor de 20 millones para Barcelona y cero para València” con el mismo evento y de las mismas características, y si no “por lo menos que se callen” y dejen trabajar.

La ministra de Ciencia y secretaria general del PSPV-PSOE, Diana Morant, afirmó la pasada semana sobre el posible retorno de la Copa del América: “No es la prioridad de la Comunidad Valenciana a día de hoy. La prioridad debe ser que Mazón pague, porque es la comunidad con más morosidad y que más tarde paga a sus proveedores. Que arregle lo que está destrozando y luego ya hablaremos de la Copa del América y otras cosas”, aseguró.

La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, la también socialista Pilar Bernabé, criticó las intenciones expresadas también por la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, de albergar de nueva la competición. Fijo de los gobernantes del PP ha sido contundente: “Se fueron haciendo un simpa de una fiesta que hemos pagado todos los españoles y todas las españolas y que costó exactamente 400 millones de euros. Lo digo porque yo también vengo escuchando algo así como ponemos en cuestión cuando el gobierno ha puesto 18 millones de euros en la Copa América de Cataluña. De momento le llevamos 380 de ventaja a esa edición”.

La mayor parte de esos 400 millones se destinaron a la construcción de la nueva Marina de Valencia para las regatas de 2007. Para ello se constituyó un consorcio entre el Gobierno, el Ayuntamiento y la Generalitat (el primero, gobernado por el PSOE y las otras dos instituciones por el PP). El Gobierno asumió finalmente el pago del crédito solicitado al ICO.

El Ayuntamiento de Barcelona contestó la pasada semana por boca del teniente de alcalde de Economía y responsable de Promoción Económica, Jordi Valls, al anuncio del día anterior del equipo ganador, Teams New Zeland, de que no iba a repetir la sede. El relato de Valls es que Barcelona apostó por la Copa del América de vela en 2021 en un contexto de salida de la pandemia, resaca del procés y “cierto desánimo de la ciudad”, se marcó unos objetivos, invirtió en ellos y se han cumplido. Pero una vez ha sido suficiente, dijo: “Hay un legado y no aportaría nada alargar hasta 2026″. También dejó claro que el Ayuntamiento, “el sector público” no está dispuesto a volver a poner dinero para una eventual segunda edición de la competición. Entre los partidos de la oposición en el Ayuntamiento, Junts, los comunes y ERC exigieron cifras claras sobre el gasto y retorno del evento. Solo el PP y Vox lamentaron que las regatas no repitan en la ciudad.

La Generalitat y el Ayuntamiento cifraron en 70 millones el coste total del evento, aportado entre administraciones (en dinero finalista) y privados (en avales para garantizar el retorno). Entre las diversas administraciones, se destinaron 54 millones de euros, 10 millones de los cuales provinieron del Consistorio.

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