Ford rebaja la edad de prejubilación del ERE a los 55 años
La multinacional, que prescindirá de 1.144 empleos, ha reducido en un año el umbral pero los sindicatos lo consideran insuficiente
Ford España ha rebajado a 55 años la edad de prejubilación en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado en marzo con el que pretende la reducción de 1.144 empleos de sus centros de Almussafes y Madrid, según el documento al que ha accedido el diario. La propuesta de la multinacional es...
Ford España ha rebajado a 55 años la edad de prejubilación en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado en marzo con el que pretende la reducción de 1.144 empleos de sus centros de Almussafes y Madrid, según el documento al que ha accedido el diario. La propuesta de la multinacional es abonar el 80% del salario neto a los empleados de entre 55 y 56 años, y del 85% a los mayores de 57, con cotizaciones a la Seguridad Social hasta los 63 o 65 años.
A la propuesta de acuerdo, presentada por la compañía automovilística a los sindicatos este viernes, se podrán adherir los trabajadores hasta el 30 de junio, de modo que las salidas se producirán hasta el 31 de diciembre.
El programa de indemnizaciones por despido se aplicará a todos los empleados de Ford nacidos desde el 1 de enero de 1960, con excepción de aquellos vinculados con un contrato temporal, de relevo o de acceso a la jubilación parcial. También a los empleados que tengan hasta 54 años en el momento de la baja, a quienes se ofrece una indemnización de 45 días por año con un máximo de 42 mensualidades de salario bruto anual, más el complemento de antigüedad y una gratificación especial.
Los sindicatos valoran la propuesta de la empresa. El mayoritario, UGT, reclamaba el pasado martes una rebaja en la edad para poder acogerse a los planes de acompañamiento hacia la jubilación, a los 54 y 53 años, así como ampliar la vigencia de ese plan hasta el 31 de diciembre, una cuestión que sí se ha contemplado. Además, pedía “ofertar unas cantidades de indemnización lo suficientemente atractivas”, así como “posibilidades reales de recolocación laboral”, para que se acogiera personal más joven.
“No existe en la fábrica el volumen necesario de empleados mayores de 55 años que puedan garantizar un porcentaje suficiente de las bajas voluntarias dentro del plan. En consecuencia, dejaría demasiado margen para cubrirse únicamente con los trabajadores más jóvenes”, ha reaccionado UGT en un comunicado.
El sindicato STM ha reconocido que la propuesta “mejora sensiblemente” las anteriores con la rebaja de la prejubilación de 56 a 55 años, lo que permitirá que el número de empleados que pueden acogerse de forma voluntaria aumente. También ha destacado la ampliación del periodo de salida hasta el 31 diciembre, ya que inicialmente se había previsto que fuera hasta el 30 de junio.
No obstante, añade que no se contemplan otras propuestas planteadas por STM como “respetar la antigüedad”, recuperar trabajos subcontratados o reducir el número de puestos afectados, así como que se refleje expresamente por escrito que las salidas sean voluntarias. Las partes volverán a reunirse el próximo lunes.
Ford anunció el pasado 3 de marzo el plan de despidos, que concretó poco después en un 19% de la plantilla actual e inició el proceso de consultas para la aprobación del ERE. La cifra cayó como una losa sobre sindicatos y administraciones públicas, autonómicas y nacionales, por elevada.
La factoría valenciana, fabrica en la actualidad unos 1.100 vehículos diarios: unos 600 del modelo Kuga, otros 300 de la furgoneta Transit y el resto se distribuye entre los modelos S-Max y Galaxy. Precisamente Almussafes dejará de fabricar estos dos últimos en abril.
Ford España anunció este jueves que trasladará su sede social de Alcobendas (Madrid) al municipio valenciano de Almussafes, donde tiene desde 1973 su factoría, ha confirmado la propia multinacional. La fábrica valenciana ya era el centro principal de sus operaciones en España, a la que a partir de 2024 se unirá también el domicilio social. El anuncio se produce en plena negociación del ERE.
Este cambio de domicilio no implicará ningún movimiento de personal o instalaciones, ni tendrá impacto fiscal en la compañía, dado que el domicilio fiscal ha estado siempre ubicado en Valencia, precisó la multinacional.