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El coste del trabajo: cada empleado pierde 200 horas al año en el trayecto, valoradas en 5.000 euros

Un informe de UGT de Catalunya alerta de que un tercio de las muertes laborales se producen durante los desplazamientos  

Trabajar, y en concreto el trayecto hasta el puesto de empleo, es un agujero negro que se lleva por delante una parte amplia del sueldo y, peor, vidas de personas. Un estudio de UGT presentado este martes denuncia que en 2023 fallecieron 33 personas en Cataluña en desplazamientos laborales, 226 resultaron heridos graves y 13.802 heridos leves en accidentes de tráfico vinculados al trabajo. “Más de un tercio de las muertes relacionadas con la actividad laboral se producen en los trayectos de ida o vuelta, o en desplazamientos viarios durante la jornada”, ha alertado el secretario de movilidad de UGT Cataluña, Jordi Muñoz.

El desgaste de trabajar no solo es físico. El sindicato ha calculado que si se suma el gasto económico que desembolsan los trabajadores para dirigirse a su lugar de trabajo, junto con las horas perdidas en vehículos o transportes públicos, cada empleado gasta cerca de 100 euros a la semana en ir a su empleo, 5.000 euros cada año. Un funcionamiento social que acaba generando un impacto en la salud y el bolsillo de la ciudadanía, según el sindicato. Estos datos no registran la crisis de Rodalies de los últimos meses, pero Muñoz admite: “La gente ya no se fía de Renfe y eso ha provocado que muchos recurran al vehículo privado para ir a trabajar. Barcelona está colapsada, los autobuses con tanto coche no pueden cumplir la velocidad comercial, la gente se va al Metro y también lo colapsa”, lamenta.

El informe se titula El coste de ir a trabajar, y lo ha presentado Muñoz, junto con el técnico de movilidad, José Rodríguez. El técnico del sindicato ha adelantado que estos cálculos se han efectuado siguiendo las encuestas de la Autoridad del Transporte Metropolitano de Barcelona donde los trayectos en Cercanías son muy minoritarios, ya que la “movilidad intercomarcal” es escasa. Rodríguez mantiene que la movilidad que se realiza a pie, en bicicleta, en transporte privado o en Metro y autobús es mucho mayor. Por ese motivo, Muñoz admite que la crisis de Renfe no afectará “demasiado” al incremento de horas de los informes de los próximos años, pese a que centenares de viajeros han pasado jornadas y jornadas en vagones y estaciones debido al colapso ferroviario.

5.000 euros anuales en trayectos

Asimismo, el tiempo invertido en el transporte supone un alargamiento silencioso de la jornada laboral. Según el informe, los trabajadores catalanes dedican 4,3 horas semanales a desplazarse, lo que supone 200 horas al año. Las personas que viven más lejos de sus puestos de trabajo utilizan hasta 12 horas semanales en desplazamientos. Entre los más afectados destacan los trabajadores que utilizan el transporte público para ir a su trabajo desde la comarca del Bages. Estos pueden llegar a utilizar 13,2 horas semanales en ir y volver de sus empleos.

Según UGT, entre costes directos e indirectos los trabajadores destinan 100 euros semanales a ir y volver del trabajo, lo que equivale a 5.000 euros anuales. La horquilla es muy desigual y un empleado que trabaja cerca de casa y se desplaza a pie asume cerca de 20 euros semanales, mientras que otro que dependa del coche puede llegar a invertir, entre tiempo y dinero, cerca de 300 euros.

Los perjuicios de los desplazamientos laborales no solo afectan el bolsillo de los trabajadores, sino que genera externalidades negativas como contaminación, ocupación del espacio público, accidentes, efecto barrera… Por todo ello, UGT reclama medidas urgentes, entre las que se encuentran la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, la ampliación del teletrabajo o la reorganización de la jornada laboral, compactándola.

El secretario de movilidad concluye que es necesario reforzar la línea ferroviaria de Barcelona, mejorar las frecuencias de los autobuses interurbanos, especialmente los que conectan a polígonos industriales y municipios de una misma comarca. También apuesta por fomentar la movilidad en bicicleta o a pie y facilitar el acceso al vehículo eléctrico mediante la instalación de más puntos de recarga.

UGT subraya la necesidad de convertir la T-Mobilitat en una herramienta de integración tarifaria que incorpore criterios sociales y supere el sistema de zonas. El sindicato pretende combinar todos los modos de transportes, incluidos la bicicleta pública, los aparcamientos, peajes… El sindicato concluye que la movilidad laboral lleva asociada un coste oculto que no aparece en las nóminas y condiciona no solo la salud sino el bolsillo de miles de ciudadanos y sus familias en Cataluña.

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