Eixample, el distrito de las supermanzanas que ha castigado a Colau

Manuel Cardete lleva 43 años trabajando en el mítico bar Funicular –el establecimiento donde se produjo la detención del anarquista Puig Antich- de Barcelona en la confluencia de la calle Girona con Consell de Cent. Justo en este punto se encuentra el epicentro de uno de los últimos proyectos de Ada Colau al frente del Consistorio: la Superilla del Eixample, que comporta peatonalizar calles y llenarlas de vegetación. En pleno cor...

Manuel Cardete lleva 43 años trabajando en el mítico bar Funicular –el establecimiento donde se produjo la detención del anarquista Puig Antich- de Barcelona en la confluencia de la calle Girona con Consell de Cent. Justo en este punto se encuentra el epicentro de uno de los últimos proyectos de Ada Colau al frente del Consistorio: la Superilla del Eixample, que comporta peatonalizar calles y llenarlas de vegetación. En pleno corazón del plan de Idefons Cerdà, y en uno de los lugares donde más inversión urbanística ha destinado el gobierno de Colau, este domingo ganó Trias por goleada. “No me extraña. Pasamos una pandemia fatal. Luego hemos estado nueve meses de obras de los que siete he tenido la valla delante de la puerta. Ha sido un desastre para el negocio. Ahora, en lugar de asfaltar nos han puesto arena en el suelo. Tierra que se mete dentro de los negocios y las casas. Es un desastre”, lamenta Cardete.

El comerciante asegura que los vecinos y comerciantes están hartos de las obras y por eso han castigado a Colau.”Han hecho un gasto descomunal y Barcelona está llena de necesidades. Esta ciudad necesita que los políticos den soluciones y no se dediquen a dar más problemas a la gente”, argumenta Cardete. El Eixample ha sido uno de los distritos con mayor participación: el 64,44% (113.772 votantes) de los que el 28,31% han votado a Trias (31.914), el 22,07% lo ha hecho por Colau (24.880) y el 15,71% por Collboni (17.713).

Ana Faustino vive en Consell de Cent y asegura que, tras las obras, su vivienda se ha revalorizado. “Mi piso vale mucho más ahora que antes. También tengo un negocio de atelier en la calle Diputació que es de alquiler. Ahora con las obras no sé si querrán subirme la mensualidad”, lamenta. Faustino sabe que tanto los comerciantes como los vecinos querían “echar” a Colau de la alcaldía independientemente de la superilla: “No la quieren y por eso han votado a Trias”.

En la otra punta de la ciudad, en el distrito de Nou Barris, quien ha ganado ha sido el PSC de Jaume Collboni. Los socialistas sabían que esta zona vota históricamente a la izquierda. Los sabían tanto que incluso llevaron a pasear –sin agendas ni medios de comunicación- al presidente del gobierno, Pedro Sánchez, por las calles del distrito en precampaña. El resultado ha sido claro. Con una participación del 51,73% (60.714), el ganador ha sido el PSC con el 31,03% de los votos (18.668) y en segunda posición ha quedado BComú con el 17,54% (10.554). En este barrio no acaban de funcionar los partidos nacionalistas, por lo que la tercera fuerza ha sido el PP 10,79% (6.491), la cuarta ERC 10,20% (6.138). Trias, que ha ganado en Barcelona, ha sido el quinto en Nou Barris con el 9,71% (5.840 votos) muy cerca de la ultraderecha de Vox que saca sus mejores resultados en este distrito con el 8,73% de los votos (5.254).

En Nou Barris está la plaza de la República, frontera entre los barrios de La Guineueta, La Prosperitat, Porta y Verdún. Allí, en los Jardines de Llucmajor, los jubilados conversan –siempre castellano, en esta zona de Barcelona es excepcional oír hablar en catalán- sentados en los bancos. El primero que pasa por una salida de metro se agencia de varios diarios gratuitos y luego hace el reparto entre los ancianos que este lunes tomaban el sol. Gracias a los diarios consiguen temas de conversación. “Trias es el que menos me ha camelado a mí. No entiendo cómo ha convencido a tanta gente”, asegura Daniel de 81 años. “Y mira como ha bajado Izquierda Republicana (en realidad se refiere a ERC pero lo dice en castellano)”, le destaca otro anciano mostrando un gráfico del diario gratuito. “Aquí no es noticia que gane el PSC, es lo normal y que Vox haya subido tanto también entra dentro de lo previsible. ¿No ves que es un partido nuevo y a la gente le gusta la novedad?”, concluye Javier Esteban de 77 años. “A mí me sigue sorprendiendo lo de Trias. Estaba cantado que aquí tenía que ser entre Collboni y Colau”, insiste Daniel.

A la sombra, y apartado del resto de jubilados, está Jose Luis López de 73 años. También lee el mismo diario gratuito pero le interesa mucho más los resultados de fuera de Barcelona. “Esto se veía venir. El PSOE ha hecho mucho daño”, mantiene López. Después comienza a utilizar muletillas que son una copia del discurso de Vox. Repite lo de “gobierno golpista” carga contra los independentistas pero defiende la victoria de Trias por encima de la del PSC de Collboni. “Yo siempre hago un voto de castigo. Voté muchos años socialista pero ahora he votado a Vox porque aquí en Cataluña somos más los que nos sentimos españoles”, concluye.

El PSC ganó en 35 barrios, Trias en 21 y los comunes en 17

Bajando a los 73 barrios de la ciudad, el PSC se impuso en 35, Trias en 21 y los comunes en 17. Y si en primer lugar Colau quedó primera en solo 17 barrios, en otros 46 los comunes fueron la segunda fuerza más votada. Datos del dossier electoral que en cada cita con las urnas publica la Oficina Municipal de Datos. El ex alcalde y ganador de las elecciones, Xavier Trias, se impuso en dos distritos completos (Sarrià-Sant Gervasi y Les Corts). Y el socialista Jaume Collboni lo hizo en los 13 barrios del distrito de Nou Barris. ERC, que había ganado en 30 barrios en 2019, en esta cita electoral ni gana ni obtiene el segundo puesto en ninguno. Entre los segundos puestos también destaca el de Vox en dos barrios (Torre Baró y Baró de Viver) y el PP en cinco: Pedralbes, Sant Ramon - Maternitat, Sarrià, Tres Torres, Sant Gervasi-Bonanova y Sant Gervasi-Galvany.

Con el zoom todavía más cercano, de las 1.068 secciones censales, Trias se impuso en 406, el PSC en 355, los comunes en 297 y ERC y PP en dos cada uno. Las dos de los republicanos están ubicadas en el barrio de La Barceloneta. Y las dos de los populares son la manzana de la calle de Guipúscoa donde habían vivido familiares de agentes de la Policía Nacional y otra en el barrio del Bon Pastor. Las secciones censales también permiten ver que en 11 el segundo partido más votado fue VOX y en uno (próximo al Camp Nou, en Les Corts), Ciutadans, un partido que no consigue representación en el próximo mandato.

Otra tabla interesante es la de los saldos positivos y negativos de votos. Solo tres partidos ganan apoyo: Junts (casi 70.000), Vox (29.000) y el PP (23.500). El resto pierde votos, sobre todo ERC, que cae 86.500 votos. Los comunes, 25.000, y el PSC 7.000 papeletas.

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