Dos detenidos en una fiesta de un ‘esplai’ de Barcelona
El centro lúdico infantil y juvenil denuncia que la Guardia Urbana actuó con brutalidad y el Ayuntamiento sostiene que intervino para garantizar la seguridad
Una celebración de un centro lúdico con actividades y música -los denominados esplais- desembocó en la madrugada del sábado en cargas policiales, varios heridos y dos detenidos cuando la Guardia Urbana desalojaba la fiesta, en la plaza Sant Josep Oriol, en el barrio Gótico de Barcelona. Fuentes del Ayuntamiento de Barcelona aseguran que los agentes se vieron obligados a utilizar sus defensas para garantizar la seguridad de la plaza y de los propios urbanos, después de que los asistentes a la celebración del ...
Una celebración de un centro lúdico con actividades y música -los denominados esplais- desembocó en la madrugada del sábado en cargas policiales, varios heridos y dos detenidos cuando la Guardia Urbana desalojaba la fiesta, en la plaza Sant Josep Oriol, en el barrio Gótico de Barcelona. Fuentes del Ayuntamiento de Barcelona aseguran que los agentes se vieron obligados a utilizar sus defensas para garantizar la seguridad de la plaza y de los propios urbanos, después de que los asistentes a la celebración del esplai se enfrentaran a los policías, insultándoles y arrojándoles latas de cerveza. Una versión que difiere de la del Esplai del Pi, que en un comunicado mantiene que los incidentes comenzaron cuando la Guardia Urbana trató de identificar a dos organizadoras del evento y otros asistentes empezaron a “grabar” la escena, lo que motivó que los agentes emplearan “violencia” para apartarlos. El Consistorio ha abierto una investigación para esclarecer lo ocurrido, según ha anunciado este lunes en redes sociales el concejal del distrito de Ciutat Vella Jordi Rabassa.
El comunicado mantiene que, en la actuación, los agentes fracturaron los dedos de la mano a uno de los miembros del esplai y cargaron “contra todo el mundo, 15 personas de menos de 22 años”, mientras les amenazaban con “porras extensibles” y proferían “comentarios despectivos”. El Esplai del Pi denuncia que la intervención policial derivó en numerosos abusos para practicar las identificaciones: los agentes tiraron del cabello y trataron de “asfixiar” a una de las organizadoras, además de propinar puñetazos en el estómago a quienes se acercaban y rociarles con gas pimienta. Finalmente, añade el comunicado, los agentes redujeron en el suelo a uno de los asistentes -que fue conducido a comisaría- “mientras uno de los policías le asfixiaba con una rodilla en el cuello”, lo que provocó un ataque de ansiedad a otra de las concentradas.
Tanto el Ayuntamiento como el esplai sitúan los incidentes hacia las 02.00 horas del sábado al domingo en la plaza Sant Josep Oriol, donde se celebraba la fiesta del 49ª aniversario del centro, que organiza actividades lúdicas para niños y adolescentes, en colaboración con otras entidades del barrio Gótico. Según el Esplai del Pi, la Guardia Urbana inició su actuación cuando los organizadores tenían recogido casi todo el material de la fiesta -que contaba con permiso hasta las 02.00 horas-, pero el Ayuntamiento asegura que el evento debía finalizar a las 01.30 horas y que los agentes acudieron a la plaza a raíz de las quejas de los vecinos porque la celebración no terminaba.
Una vez en la plaza, añade el Ayuntamiento, los agentes acordaron con una de las organizadoras del evento que les permitirían una última canción antes de dar por terminada la fiesta, pero, según fuentes municipales, los responsables del esplai desoyeron a la Guardia Urbana sin poner fin a la celebración. De acuerdo con la versión municipal, la Urbana volvió a emplazar a una de las organizadoras a acabar la fiesta, pero en vez de hacerlo los miembros del esplai empezaron a insultar a los agentes y a tirarles latas de cerveza.
Los policías, añade el Consistorio, trataron de “interactuar” con otra organizadora, pero una tercera persona les dio un empujón para impedir las identificaciones. Los agentes trataron de llevárselas entonces a las dos a una zona más tranquila de la plaza para explicarles que el motivo de la identificaciones era únicamente levantar acta de inspección, momento en que uno de los asistentes golpeó por la espalda a un policía, según la misma versión.
Una patrulla de la Guardia Urbana, añade el Ayuntamiento, detuvo al presunto agresor, tras lo que empezaron a ser golpeados por otras personas por la espalda, lo que les obligó a “utilizar las defensas para dar seguridad al entorno”, sin que cesara el lanzamiento de latas de cerveza. La Guardia Urbana detuvo a dos personas por un delito de atentado contra agentes de la autoridad, en una intervención que, según el Ayuntamiento de Barcelona, se saldó con dos agentes asistidos por heridas leves y arañazos.
En su comunicado, el Esplai del Pi, que pertenece al Movimiento de Esplais de la Fundació Pere Tarrés, denuncia que han sufrido una “situación de violencia y abuso policial que no cesó hasta que acudieron a la plaza “el doble” de policías que de asistentes a la fiesta. En un mensaje en su cuenta de Twitter, el Movimiento de Centros de Esplais Cristianos de Cataluña ha indicado que “condena la actuación policial de la Guardia Urbana” y ha apoyado al “Esplai del Pi”. También ha asegurado que “el ocio educativo trabaja por una sociedad pacífica basada en la cultura de la no-violencia”. La fiesta había sido organizada para celebrar el 49 aniversario del centro y el otorgamiento de la medalla de honor del distrito, con la colaboración de otras entidades del barrio.
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