La reforma de La Rambla de Barcelona comenzará en septiembre aunque solo se intervendrá en 200 metros
El Consistorio mantiene que la obra debe realizarse por plazos sin marcar un calendario pese a que debía haberse comenzado en 2019
La esperada reforma de La Rambla de Barcelona comenzará justo después de las fiestas de la Mercè, en septiembre, por el tramo, que cubre no más de 200 metros, entre el monumento a Colón y Santa Madrona. Este tramo costará 10 millones de euros y se prevé que finalice en 18 meses. ...
La esperada reforma de La Rambla de Barcelona comenzará justo después de las fiestas de la Mercè, en septiembre, por el tramo, que cubre no más de 200 metros, entre el monumento a Colón y Santa Madrona. Este tramo costará 10 millones de euros y se prevé que finalice en 18 meses. Aún así, todavía no hay calendario para la reforma de la totalidad del paseo barcelonés, que se alargará en el tiempo ya que el Ayuntamiento mantiene que la reforma se hará en cinco tramos y con un coste total es de 44,56 millones de euros.
La teniente de alcalde de urbanismo, Janet Sanz, alertó este martes que las obras se mantienen en cinco tramos y hasta que no acabe uno no comenzará el siguiente (no tiene por qué comenzar inmediatamente después de que concluya uno de ellos). “Será así y no una obra de todo el paseo a la vez para no comprometer las finanzas del Ayuntamiento ni las obras en el resto de la ciudad”, ha mantenido Sanz.
El espacio donde comenzarán a finales de septiembre las obras será de 23.000 metros cuadrados y en el se modificará el trazado de la avenida de las Drassanes, se creará una nueva plaza en el encuentro de esta calle con Colón y se alargará la Rambla hasta el mar. Una de las principales novedades será el nuevo pavimento. Después de décadas con el pavimento con forma de olas marinas, a partir de septiembre comenzará a colocarse en este primer tramo el futuro suelo del paseo más icónico de la ciudad. El nuevo pavimento será de piezas de diferentes formatos de piedra natural, granito y pórfido que cubrirá todo el espacio del eje haciendo desaparecer el asfalto de los laterales y unificando el suelo de fachada a fachada. Sanz ha mantenido que es una apuesta del Consistorio por los “materiales sostenibles”.
El Ayuntamiento colocará cerca de un centenar de árboles, 21 de los cuales serán nuevos y los alcorques serán más amplios y se mejorará el subsuelo. Se instalarán un centenar de bancos y se unificará el iluminado público en esta zona. Para no ocupar simultáneamente los dos lados de la Rambla se harán las obras por fases. Además cuando se actúe en los viales de subida o bajada se hará por mitades de forma que siempre se garanticen los accesos y el paso de los vecinos.
El Ayuntamiento tiene previstas varias campañas para informar a los vecinos del comienzo de las obras. Cuando se acabe el primer tramo de obras comenzará (no se ha fijado ningún tipo de calendario) el que va de Santa Madrona a Arc del Teatre, después de Arc del Teatre a Liceu, de Liceu a Portaferrissa y, por último, de Portaferrissa a Canaletes.
El peno del Ayuntamiento de Barcelona aprobó, en primavera de 2016, la reforma del paseo. En noviembre de 2018 el equipo de Km-Zero ganó el concurso para rediseñar el paseo. El proyecto eliminaba un carril de circulación de bajada, ampliaba el tronco central y las aceras del paseo, reubicaba los quioscos, eliminaba los puestos de los antiguos pajareros y preveía habilitar plazas a lo largo del paseo. Las obras debían comenzar en 2019 se harían por tramos y se alargarían durante 5 años. Este septiembre comenzará con más de tres años de retraso el primer tramo.
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