La recogida selectiva de basura desata protestas vecinales

Decenas de barceloneses del barrio de Sant Andreu salen a la calle para manifestarse contra el sistema de puerta a puerta

Una vecina coloca bolsas de basura en la puerta de la sede del distrito de Sant AndreuCarles Ribas (EL PAÍS)

El sistema de recogida de residuos puerta a puerta implementado el pasado lunes en el barrio barcelonés de Sant Andreu llevó ayer —cinco días más tarde— a que decenas de vecinos salieran a manifestarse ante la sede del distrito. Aseguran que el sistema es “muy mejorable” y denuncian que desde que se implementó en el barrio, las calles se han convertido en una carrera de ...

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El sistema de recogida de residuos puerta a puerta implementado el pasado lunes en el barrio barcelonés de Sant Andreu llevó ayer —cinco días más tarde— a que decenas de vecinos salieran a manifestarse ante la sede del distrito. Aseguran que el sistema es “muy mejorable” y denuncian que desde que se implementó en el barrio, las calles se han convertido en una carrera de obstáculos ya que los operarios de la limpieza no se llevan todas las bolsas.

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Días antes de que comenzara el sistema de recogida de basura un equipo de informadores del Ayuntamiento de Barcelona entregó a los vecinos instrucciones, bolsas de basuras con chips y cubos individuales para el deshecho orgánico. Los vecinos bajan a la calle las diferentes bolsas entre las ocho y las diez de la noche, y por días, ya que no todos los días se recoge toda la basura, sino que hay días para la orgánica, para el papel, plástico y el resto. Justo en esta división por días es donde se ha originado el conflicto.

Ariadna Zorrilla es una de las vecinas del barrio de Sant Andreu que ayer salió a manifestarse: “Vamos a presentar alegaciones porque este sistema es insalubre. Por un lado te obliga a mantener durante días la basura en casa. Por otro, bajas los cubos a la calle y luego tienes que subirlos. Ya hay algunos con orines de perro y otras manchas justo en época de pandemia. Si los vecinos bajan bolsas y no toca ese residuo el operario las deja en la calle con una pegatina. Nuestras calles ahora están llenas de basura”, dice Zorrilla. Algunos vecinos advierten de que no se oponen al sistema de recogida pero denuncian deficiencias. “No puede ser que tengas que mantener pañales sucios en casa porque no es el día de recogida”, explica uno.

El Consistorio advierte de que no ha pasado ni cinco días de la implantación del sistema. “Se ajustarán cosas”, explica una portavoz municipal.

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