La adjudicación de las obras desbloquea el nuevo acceso en tren al aeropuerto de Barcelona

Adif invierte 64 millones de euros, ajena al choque entre Generalitat y Renfe por la conexión Sants-El Prat

Obras del tren lanzadera del aeropuerto de El Prat en una imagen de archivo.Carles Ribas

Paso adelante para conectar en tren el centro de Barcelona con la terminal T1 del aeropuerto. Adif ha autorizado la adjudicación de las obras para terminar el ramal del nuevo acceso ferroviario, paralizado desde hace más de dos años. Una inversión de 64,6 millones de euros va a permitir desbloquear un proyecto que posibilitará conectar la estación de Sants y la terminal T1 en aproximadamente 19 minutos. Las previsiones e...

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Paso adelante para conectar en tren el centro de Barcelona con la terminal T1 del aeropuerto. Adif ha autorizado la adjudicación de las obras para terminar el ramal del nuevo acceso ferroviario, paralizado desde hace más de dos años. Una inversión de 64,6 millones de euros va a permitir desbloquear un proyecto que posibilitará conectar la estación de Sants y la terminal T1 en aproximadamente 19 minutos. Las previsiones estiman que entre 7 y 9 millones de viajeros anuales se beneficiarán de la nueva infraestructura ferroviaria.

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Adif ha anunciado este miércoles la adjudicación de las obras, ajena al pulso que mantienen Renfe y la Generalitat por ver quien opera la línea. La compañía ferroviaria mantiene que la conexión con el aeropuerto debe ser una extensión de la red de Rodalies pero, en cambio, la Generalitat defiende que el servicio lo gestione Ferrocarrils (FGC) en modo tren lanzadera. Pese a los informes técnicos que apuntan a una mayor saturación de la trama ferroviaria si se operase una línea específica al aeropuerto, Damià Calvet, ya exconsejero de Territorio y Sostenibilidad, ha hecho del tema casi una lucha personal. Aludiendo a que FGC ofrece un mejor servicio que Renfe, ha defendido reiteradamente que la Generalitat debe ejercer plenas competencias en este servicio y en la fijación de los horarios y las frecuencias de paso. Con los cambios en el ejecutivo tras la toma de posesión de Pere Aragonès, el tema pasa a ser competencia directa del vicepresidente Jordi Puigneró.

Adif se limita a sostener que la obra “da un impulso definitivo para la puesta en servicio de una infraestructura que será estratégica” porque permitirá establecer servicios directos de cercanías a las dos terminales aeroportuarias desde Manresa y Maçanet vía Barcelona mediante las actuales líneas R2 y R4, permitiendo, a través de ellas, acceder a las restantes líneas de cercanías y a la red de metro de Barcelona. Además, apunta Adif, también podrá albergar servicios lanzadera entre las terminales del aeropuerto con la Línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona-frontera francesa.

Los trabajos tienen un plazo de ejecución de 24 meses. Terminar el ramal supone darle continuidad a la primera fase de este proyecto que, con una inversión estimada de 305 millones de euros, consistió en la perforación con tuneladora del tramo principal del nuevo acceso. En el primer trimestre del 2018 la tuneladora se detuvo, con un kilómetro de túnel aún pendiente. Adif alegó entonces que la pausa respondía a una “parada técnica”.

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