Hausson se despide de La Seca con magia a la carta

Jesús Julve (Hausson) ha estrenado esta semana un espectáculo de magia a la carta en el que los espectadores escogen los números que realizará el ilusionista en función de unos títulos más o menos sugerentes. Este espectáculo —Una hora amb Hausson— será el último que presente en el local de La Seca como gestor del mismo. En julio se terminará la concesión municipal que durante 10 años ha permitido a la sociedad limitada fundada por Julve y ...

Jesús Julve (Hausson) ha estrenado esta semana un espectáculo de magia a la carta en el que los espectadores escogen los números que realizará el ilusionista en función de unos títulos más o menos sugerentes. Este espectáculo —Una hora amb Hausson— será el último que presente en el local de La Seca como gestor del mismo. En julio se terminará la concesión municipal que durante 10 años ha permitido a la sociedad limitada fundada por Julve y Hermann Bonnín (fallecido el pasado mes de setiembre) llevar la agenda de esta fábrica de creación dedicada a las artes escénicas y, en particular, al legado del poeta Joan Brossa.

El Ayuntamiento podía renovar la concesión durante cinco años más o cancelarla. Ha optado por esto último y cedido las instalaciones a la Fundació Joan Brossa, que durante varios años de esta última etapa ha tenido su residencia en el edificio de las salas de teatro. La actual concesión termina en mayo y se ha prorrogado hasta agosto, el final de la temporada. El presidente de la Fundació Joan Brossa es Vicenç Altaió que ya en 2019 manifestaba su deseo de unir las instalaciones que ahora ocupa la fundación en la calle La Seca 2 con el espacio escénico.

Hausson no mencionó durante el espectáculo estas circunstancias. Con la elegancia habitual, desplegó una serie de efectos que transitaron distintas disciplinas del ilusionismo. Desde el mentalismo a una predicción de la carta que propondrán los espectadores cuyo adjetivo más suave es el de “increíble”. Hausson, al margen de las elecciones hechas por los espectadores, no abandonó la manipulación de cartas, fichas y bolas que practica desde siempre. Otro momento siempre simpático es cuando se demuestra, con unas cartas en manos de los espectadores, que el público también es capaz de hacer magia si obedece los designios del ilusionista. En definitiva, una hora que se hizo muy corta.

En un intervalo se proyectaron algunas secuencias de un film con efectos mágicos de Segundo de Chomón, de quien este año se cumple el 150 aniversario de su nacimiento. Pionero del trucaje y del cine coloreado, la Filmoteca de Catalunya prepara una serie de actos conmemorativos y Hausson participará con un espectáculo inspirado en los filmes mágicos del cineasta. Hausson no abandona los escenarios.