La alerta por el repunte de casos se amplía a la Cataluña vacía
Municipios pequeños y medianos de las provincias de Lleida y Tarragona registran un auge de contagiados que preocupa al Govern
La situación epidemiológica en Cataluña está entrando en una fase que empieza a preocupar al gobierno de la Generalitat. Todavía con un riesgo alto de rebrote que ha empeorado en los últimos días, la transmisión del virus está creciendo especialmente en zonas que hasta ahora prácticamente se habían librado de la pandemia. Poblaciones pequeñas y medianas de las provincias de Tarragona y Lleida, en parte por la movilidad que corres...
La situación epidemiológica en Cataluña está entrando en una fase que empieza a preocupar al gobierno de la Generalitat. Todavía con un riesgo alto de rebrote que ha empeorado en los últimos días, la transmisión del virus está creciendo especialmente en zonas que hasta ahora prácticamente se habían librado de la pandemia. Poblaciones pequeñas y medianas de las provincias de Tarragona y Lleida, en parte por la movilidad que corresponde al periodo de vacaciones, han registrado en los últimos días un repunte de casos que han obligado al departamento de Salud a intensificar los cribajes masivos con pruebas diagnósticas PCR para controlar el avance del virus.
El indicador EPG, que determina el riesgo de rebrote de coronavirus, muestra este jueves un empeoramiento con respecto a las últimas 24 horas, y rompe la tendencia a la baja que se había detectado en los últimos días. Según los datos del departamento de Salud, el índice EPG —que no utiliza los datos de los últimos tres días para no desvirtuar el histórico— ha pasado de 148,09 a 157,88 puntos (se considera que existe un riesgo alto de rebrote a partir de los 100 puntos). El índice muestra una situación peor que en la primera semana de agosto.
En el conjunto de Cataluña se han notificado este jueves 1.274 casos nuevos, 484 más que el día anterior, y se han notificado nueve muertes por coronavirus. El número de hospitalizados, 671, se mantiene sin embargo estable, mientras que el de ingresados en la UCI fue 125 siete menos que el día anterior. La notificación de más casos nuevos de contagiados por coronavirus se debe sobre todo a los resultados de los cribajes masivos que está realizando el Govern por todo el territorio para identificar a positivos asintomáticos y cortar la cadena de transmisión del virus.
La particularidad de este nuevo repunte de casos en Cataluña es que, mientras los primeros rebrotes tuvieron lugar en las ciudades de Lleida y Barcelona, ahora es en las poblaciones pequeñas o medianas donde, a causa de la movilidad por las vacaciones, se están registrando nuevos positivos.
El mapa por comarcas y municipios del avance de la pandemia muestra que solo siete de las 42 comarcas catalanas tienen un índice EPG de riesgo de rebrote bajo. Alta Ribagorça, Cerdanya, Solsonès, Moianès, Ripollès, Priorat y Pallars Sobirà tienen un índice inferior a 30. Otras cuatro comarcas tienen un índice moderado-bajo y siete lo tienen moderado-alto. De las que están con riesgo alto, por encima de 100, la comarca que tiene la peor situación es el Alt Urgell, con un índice de 668,63, seguido de la Noguera (509,86), Baix Ebre (300,86), Urgell (272,89), Baix Camp (232,64) y Segrià (223,99).
Un ejemplo de cómo zonas de baja población están ahora recibiendo el impacto de la pandemia es la localidad de Benifallet (Baix Ebre), un pequeño pueblo a orillas del río Ebro que, con 739 habitantes, registró 14 casos de coronavirus. El departamento que dirige la consejera Alba Vergés realizó, entre el martes y este viernes, un cribado a la población mediante pruebas PCR.
El Servei d’Emergències Mèdiques (SEM) también ha llevado a cabo este viernes un centenar de pruebas PCR en Albesa, una localidad de 1.500 habitantes en Lleida. Este pueblo de la comarca de la Noguera es un ejemplo de la Cataluña donde la pandemia pasó de puntillas en los primeros meses, y ahora muestra un repunte: desde el inicio de la pandemia, Albesa ha registrado 49 casos de coronavirus, pero, de ellos, 15 se han notificado en los últimos días. A causa de la propagación del virus por estas zonas, el departamento de Salud ha intensificado los cribados, que se están realizando, además de en Albesa y Benifallet, en Balaguer, La Seu d’Urgell, Granollers, Canovelles y Les Franqueses.
El jefe de epidemiología del Hospital Clínic, Antoni Trilla, ha calificado la situación de “inestable”, y ha alertado de que si el virus avanza habrá que seguir “estrategias defensivas”. Trilla, en declaraciones a Catalunya Ràdio, ha avisado sobre el riesgo en las reuniones familiares que son multitudinarias y en espacios cerrados, y ha alertado a la población joven: “La probabilidad de que a una persona joven le toque es más baja, eso es absolutamente cierto, pero no es cero, y estamos viendo casos. Eso debería añadir un punto más de prudencia a toda la sociedad, pero especialmente a la gente más joven, que es la que está transmitiendo ahora o recibiendo más casos de la enfermedad”, ha dicho.
Salud pide “un esfuerzo” y reducir la interacción
La alerta por el repunte de casos ha llevado al secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, a pedir a la ciudadanía que reduzca los encuentros con otras personas y la interacción social en general. Argimon, que ha atendido a los medios de comunicación en el inicio de un cribaje masivo en Les Franqueses, ha avisado que reducir los encuentros es “imprescindible” para doblegar la curva: “Tenemos que hacer un esfuerzo” para no volver a tensionar a hospitales y centros de atención primaria.