Los museos también sucumben a lo viral
Los centros catalanes lanzan retos en las redes para difundir sus colecciones, ahora cerradas
El 21 de marzo el Museu de Guissona inició un reto sin saber las consecuencias a las que daría lugar. A través de Twitter, el museo subió a la red una fotografía del que fue su primer espacio expositivo y nombró a tres museos más invitándoles a sumarse a esta iniciativa de mostrar una foto del primer espacio visitable de la historia de su museo y a etiquetar a tres museos más bajo los hashtags #firstmusem y ...
El 21 de marzo el Museu de Guissona inició un reto sin saber las consecuencias a las que daría lugar. A través de Twitter, el museo subió a la red una fotografía del que fue su primer espacio expositivo y nombró a tres museos más invitándoles a sumarse a esta iniciativa de mostrar una foto del primer espacio visitable de la historia de su museo y a etiquetar a tres museos más bajo los hashtags #firstmusem y #museusacasa.
En menos de una semana, unos sesenta museos, catalanes y del resto de España, secundaron esta propuesta, hasta el punto de que entidades como el Thyssen de Madrid, el MNAC, los museos Picasso de Barcelona y Málaga, el CCCB, el Macba, el Teatre Museu Dalí y el Museo de Bellas Artes de Sevilla, entre otros muchos, han aceptado el reto, siguiendo el efecto challenge (no querer ser menos que los de tu misma condición), y el fear of missing out (temor a perderse algo), pero, sobre todo, ante la necesidad constante de visibilización e interacción con los amantes del arte y los potenciales visitantes en días de confinamiento. Todo, ha conseguido que, lo que tenía que ser una iniciativa de alcance local, ha terminado con la puesta en escena de muchos museos estatales.
Otro reto que ha tenido gran repercusión entre los centros catalanes es el concurso impulsado por museos como el Picasso, el Museo del Disseny, el Marítim y el Museu Arqueològic de Tarragona, #MuseumQuizACasa, consistente en un concurso online que incluye una versión para adultos y otra para familias en formato quiz que pondrá a prueba durante el confinamiento cual es el conocimiento de todos sobre el patrimonio cultural de los museos participantes. Por su parte, el MNAC ha invitado a sus seguidores virtuales a que imiten las obras de su colección y las compartan en sus redes bajo la etiqueta #RepteArtACasa, con resultado sorprendentes.
La viralidad de estos movimientos ha recordado a otras acciones como las que hace menos de un año protagonizaron numerosos museos catalanes en respuesta a la sentencia del Tribunal Supremo del 1 de octubre cubriendo con velos negros algunas de sus obras más emblemáticas en señal de rechazo y protesta.
En este caso, la iniciativa impulsada a través de Instagram por los museos de Olot, empleando el hashtag #velsperlallibertat (velos para la libertad), también acabó siendo tendencia, consiguiendo que un gran número de museos catalanes se uniesen a la acción y compartiesen en sus redes sociales imágenes en las que se podía ver el mismo gesto de tapar algunas de sus esculturas con un velo negro, algo que, en otros canales, hubiera sido difícil de visibilizar.
El fenómeno no es local, sino global. Son muchos los museos que han propuesto a sus seguidores en las redes sociales retos a sus visitantes virtuales, emulando algunas de sus obras, bajo la etiqueta #tussenkunstenquarantaine, como es el caso del Getty Museum de Los Angeles. El museo estadounidense ha pedido en Instagram y Twitter que imiten sus obras usando solo tres objetos. También, la Tate y la National Gallery de Londres, se han unido a esta nueva ola y han propuesto mediante Instagram a todos los apasionados de las artes visuales que creen esculturas en menos de un minuto y lo cuelguen en la misma red, a lo que muchos han respondido con originales esculturas a partir de objetos domésticos y sus propios cuerpos.