Marlaska, sobre la llegada de coca al Guadalquivir: “Si se incauta droga es porque hay medios y operaciones”

Cádiz siempre ha sido un nodo de interconexión marítimo. Para lo bueno, con el comercio y las ideas, y para lo malo, como el mayor punto de entrada del hachís en Europa. Esa dualidad, especialmente la segunda, y la lucha policial que genera ha sido el leitmotiv para que la capital acoja este viernes a representantes de los siete países que integran la Coalición de Países Europeos contra el Crimen Organizado en su cuarta reunión de los ministerios de Interior y Justicia. El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y ...

Cádiz siempre ha sido un nodo de interconexión marítimo. Para lo bueno, con el comercio y las ideas, y para lo malo, como el mayor punto de entrada del hachís en Europa. Esa dualidad, especialmente la segunda, y la lucha policial que genera ha sido el leitmotiv para que la capital acoja este viernes a representantes de los siete países que integran la Coalición de Países Europeos contra el Crimen Organizado en su cuarta reunión de los ministerios de Interior y Justicia. El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, han querido mostrar “el compromiso” del Gobierno en la lucha contra el narco del Estrecho, pese al importante incremento de decomisos de cocaína que se ha producido en los últimos dos meses en el río Guadalquivir.

“Si se incauta droga es porque hay medios personales, medios materiales y operaciones”, ha sostenido el titular de Interior a preguntas de EL PAÍS, poco antes de comenzar la reunión. Es la justificación de Marlaska a la voz de alarma dada por agentes y fiscales de la zona que han alertado de cómo solo entre los meses de diciembre y enero se han decomisado hasta 19 toneladas de cocaína en tres operaciones, entre alta mar y Sevilla. El fuerte y sorpresivo incremento —en la zona ya se habían registrados alijos con cocaína, pero no con sumas tan abultadas— ha llenado de preocupación a las instituciones policiales y judiciales que luchan contra el narco que exhiben justo el argumento contrario al esgrimido hoy por Marlaska y temen que si han descubierto eso, ¿cuánto no habrá entrado?”, según ya manifestó una fuente judicial.

El ministro del Interior ha explicado también por qué, a su juicio, se han podido ver, a plena luz del día, narcolanchas río Guadalquivir arriba, a la altura de la ciudad de Sevilla. Marlaska asegura que esos avistamientos “muy puntuales” están contextualizados en el acorralamiento realizado por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y en que ya “no tienen lugares de tranquilidad” en los que guarecerse de los días de temporal en el mar. Según el ministro, ese cerco sigue funcionando gracias también a la declaración de estas embarcaciones como género prohibido en 2018, lo que ha llevado a decomisar en estos años más de 1.700 semirrígidas. Para completar la efectividad de esta medida, el Gobierno español ha solicitado al portugués que las declare también ilegales en su territorio y aguas. “[El Gobierno portugués] ya ha llevado un anteproyecto a su Parlamento”, ha puntualizado Marlaska, que ha mostrado su confianza porque la medida acabe aprobada “próximamente”.

No es la única cooperación a la que se ha referido el ministro de Interior, justo en un encuentro concebido en 2021 para estrechar lazos en materia de crimen organizado y narcotráfico. Poco antes de comenzase el encuentro con los gabinetes de Interior y Justicia de Alemania, Bélgica, España, Francia, Italia, Países Bajos y Suecia, Marlaska ha apelado a la necesidad de “colaborar con los países de origen y tránsito”. Esa exhortación al trabajo codo con codo también ha estado presente en las palabras de Bolaños y Marlaska en el saludo de bienvenida a los equipos de trabajo, en una reunión a la que han asistido en torno a 30 miembros y que se ha celebrado en el interior del Parador de Cádiz. Al encuentro han asistido los titulares de Justicia y Seguridad de los Países Bajos, David Van Weel; de Justicia de Suecia, Gunnar Strömmer; y el ministro adjunto al ministro del Interior de Francia, François-Noël Buffet.

Pero con la cita y el lugar escogido, la primera de esta coalición que se celebra en España, el Gobierno de España ha querido lanzar el mensaje de “Cádiz como símbolo de su compromiso” en la lucha contra el narco, ha asegurado Bolaños. Desde que se puso en marcha el Plan Especial de Seguridad del Campo de Gibraltar —ya presente en seis provincias andaluzas—, Justicia ha creado 15 nuevas plazas de jueces y magistrados y, de las 79 fiscales de la última promoción, “el 10% ha ido a la provincia de Cádiz”. Todo en una ofensiva en la que el Gobierno lleva invertidos ya 900 millones de euros en Justicia y 156 millones en medios tecnológicos, según han estimado desde el Gobierno.

Este esfuerzo realizado por el actual Ejecutivo de PSOE y Sumar es, para Marlaska, ha hecho que durante los últimos seis años se hayan puesto a disposición de la Policía Nacional y Guardia Civil más medios que han provocado “mayores incautaciones de droga”. “Cuando no había medios personales y materiales durante los gobiernos del Partido Popular, los narcos campaban a sus anchas”, ha explicado Fernando Grande Marlaska, lo que a su juicio era “un problema real y un problema social”.

El edificio del Parador ha amanecido blindado para la ocasión por tierra, mar y aire —con despliegue de embarcaciones, helicópteros, drones y policías de la UIP— para asegurar las ponencias y deliberaciones que los gabinetes de los siete países han realizando, a puerta cerrada, hasta primera hora de la tarde. Es entonces cuando la Coalición ha emitido una declaración conjunta en el que los siete países instan a la Comisión Europea a mejorar e intensificar la cooperación en seguridad con América Latina, el Caribe, los Balcanes Occidentales y África “como importantes centros de tránsito del narcotráfico hacia Europa Occidental”. Para ello, el texto pide a la UE que reserve “fondos suficientes” para ellos.

Además, la declaración expone recomendaciones para incluir en la futura Estrategia de Seguridad Interior de la UE, en los ámbitos de la prevención, blanqueo de capitales, intercambio de información y centros logísticos, “desde un enfoque integral” para “detener, condenar y confiscar” bienes ilícitos a las redes criminales a los autores y confiscar sus activos ilícitos”. Los ministros también han pedido aunar esfuerzos para bloquear que los delincuentes consigan contratos gubernamentales, subvenciones o permisos para participar en actividades comerciales “que puedan encubrir o blanquear beneficios ilícitos” o facilitar su infiltración en estructuras empresariales legales.

El despliegue policial que ha tomado el Parador y sus alrededores no ha evitado la presencia de unos diez miembros de la asociación policial Jusapol que, megáfono y pancarta en manos, han clamado por la equiparación salarial con policías autonómicas y locales. “Los que luchan contra el crimen organizado estamos fuera y estamos olvidados”, ha exclamado desde el altavoz uno de los integrantes de la manifestación.