Dos personas, una de ellas menor de edad, continúan en la UCI en Navarra tras una explosión de gas
Una fuga de gas en la tarde de este lunes provocó dos explosiones, con más de dos horas de diferencia, en un bloque de viviendas adosadas en el municipio de Noáin
La primera alarma saltó a las 15.35 horas de la tarde de este lunes con la explosión de una caldera en la calle Concejo de Zabalegui, en el municipio navarro de Noáin, pero la mayor deflagración se produjo unas horas después, sobre las seis de la tarde. Como consecuencia, siete personas fueron trasladadas al Hospital Universitario de Navarra y, de ellas, dos ―un varón de 22 años y una menor de 13― continúan ingresados en la UCI con pronóstico grave. Además, 250 personas, residentes en 120 viviendas dúplex de 30 portales, han tenido que ser desalojadas y no han podido todavía regresar a sus casas. Por ahora se están alojando en hoteles próximos al núcleo urbano. Las causas aún se investigan y “no se puede dar más información” por el momento, ha insistido la consejera de Interior, Amparo López. Un día después, las consecuencias son evidentes, dos inmuebles han quedado muy destruidos y los servicios de arquitectura, tanto del Ejecutivo foral como del Ayuntamiento de la localidad, deben ahora diagnosticar su situación y determinar los pasos a seguir.
Tras la primera explosión, se ordenó el desalojo de algunas viviendas y sobre las seis de la tarde se permitió a los residentes que volvieran a recoger sus cosas durante unos minutos. Fue en ese momento cuando se produjo la segunda deflagración “en una vivienda concreta” que está totalmente destruida, ha explicado el alcalde de la localidad, Sebastián Marco. Esta segunda explosión fue “totalmente inesperada”. De hecho, ha asegurado: “Varios de los afectados fueron los propios trabajadores de la compañía del gas que yo creo que son entendidos en la materia y la sorpresa que se llevaron tuvo que ser mayúscula. Es un suceso extraño, es que no podemos decir otra cosa, y se está trabajando en determinar las causas para saberlas a ciencia cierta”.
En este sentido, la consejera ha apuntado que se sabe que “hubo una intervención, se derivaron recursos y la empresa de gas hizo las acciones que tenía que hacer”. Agrega: “Nos aseguraron que habían cortado el suministro, y en principio no había ningún tipo de riesgo, pero ahora habrá que trabajar en determinar las causas”. Ha clarificado asimismo que no hay constancia de que alguien tuviera conocimiento del riesgo vital porque, ha aclarado, “por supuesto, si lo hubiera habido, no se hubiera permitido” que accedieran a las viviendas. “El suministro de gas está cortado desde un tramo mucho anterior a la zona donde nos encontramos y es por eso por lo que ahora no hay riesgo”, ha detallado el alcalde. En cualquier caso, y ante el riesgo de que persistan algunas fugas si se reanuda el suministro de gas, no se va a permitir todavía la vuelta de los residentes a sus viviendas.
El grupo de investigación de la Guardia Civil especialista en Incendios y Explosiones no terroristas es quien lidera la investigación y, su portavoz, Jesús Pose, ha detallado que “los especialistas se encargarán de determinar en qué puntos fueron las explosiones y las causas”. También ha señalado que se desconoce cuántas explosiones se produjeron. “Hay muchas viviendas afectadas, incluso viviendas que están relativamente lejos de la explosión. Los vecinos llevarán tiempo en recobrar la normalidad, esperemos que lo antes posible”.