Muere un piloto del ejército tras estrellarse durante un entrenamiento con un caza F-18 en Teruel

Un piloto del Ejército del Aire y el Espacio ha fallecido este viernes tras estrellarse con un caza F-18 en las inmediaciones del municipio de Peralejos, en la provincia de Teruel (Aragón). El fallecido, el teniente coronel Pablo Estrada Martín ―madrileño, 49 años, casado y con cuatro hijos― se encontraba realizando un vuelo de entrenamiento, según el Ejército del Aire. Aún se desconocen las causas del siniestro y la Comisión para la Investigación Técnica de Accidentes Aéreos (CITAAM) procederá a abrir una investigación.

“Un F-18 del Ala 12 ha sufrido un accidente en las cercanías de Teruel”, comunicó el Ejército del Aire poco antes de las 13.30 de la tarde. Una hora después, la cuenta de la red social X del mismo ejército anunciaba ya el fallecimiento del teniente coronel que estaba destinado al Ala 12, una unidad de combate que tiene su base en Torrejón de Ardoz (Madrid). “Nos unimos al dolor de sus familiares y amigos. Descansa en paz, compañero”, han dicho en X.

Hasta la zona del siniestro de desplazaron efectivos de los bomberos de la Diputación Provincial de Teruel. También fue requerida la presencia del titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Teruel para el levantamiento del cuerpo ya sin vida del piloto de caza.

El teniente coronel contaba con más de 2.358 horas de vuelo, 970 en F-18. Estrada tenía tres condecoraciones del Mérito Aeronáutico, la Cruz y la Encomienda de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo y la Medalla OTAN.

Es difícil calcular el valor o el precio de los cazas F-18 en la actualidad puesto que sufren múltiples modificaciones a lo largo del tiempo y dependen también de las horas de vuelo que les quede. En 1995 España compró un lote de 24 aviones F-18, con un paquete de repuestos, por 55.000 millones de pesetas (330,5 millones de euros).

El Ejército del Aire y el Espacio cuenta con dos flotas de este tipo de aviones; los F-18 y los Eurofighter. Hace ya tiempo que se abrió el debate de la necesidad de sustituir los F-18 por otros cazas de quinta generación ―y que no fuesen Eurofighter, para diversificar, sostiene una alta fuente de este ejército―, pero aún no ha habido consenso sobre el caza concreto que debería tener España. La decisión, finalmente, ha sido ir poco a poco extendiendo la vida de los F-18.

Estos F-18 son aviones “antiguos que se irán sustituyendo”, sostienen desde el Ejército del Aire. Sin embargo, todavía tienen vida operativa porque, pese a su antigüedad, se les va actualizando con frecuencia el software. “Son aviones totalmente aptos para el vuelo”, aseguran.