Sumar afronta su segunda asamblea con la incógnita sobre el papel de Yolanda Díaz y el desafío de la unidad a medio plazo

Nada es como se planteó hace seis meses y la izquierda vuelve a enmendarse a sí misma. Han pasado tres convocatorias electorales —vascas, catalanas y europeas— desde que Sumar celebró su asamblea fundacional en Villaverde (Madrid) y afianzaba así el liderazgo de Yolanda Díaz al frente de la formación. La vicepresidenta era encumbrada a finales de marzo coordinadora de un movimiento que había logrado formar parte del Gobierno tras ...

Nada es como se planteó hace seis meses y la izquierda vuelve a enmendarse a sí misma. Han pasado tres convocatorias electorales —vascas, catalanas y europeas— desde que Sumar celebró su asamblea fundacional en Villaverde (Madrid) y afianzaba así el liderazgo de Yolanda Díaz al frente de la formación. La vicepresidenta era encumbrada a finales de marzo coordinadora de un movimiento que había logrado formar parte del Gobierno tras obtener 31 diputados en julio y que pretendía pasar de una mera coalición a incorporar en sus estructuras al resto de fuerzas políticas. En este tiempo, sin embargo, el partido ha renunciado a ser el director de orquesta del proyecto y ahora afronta su segunda convención política, que se celebrará los próximos 14 y 15 de diciembre, con la incógnita fundamental sobre el papel futuro de la vicepresidenta y el desafío, en el horizonte, de la unidad.

Los malos resultados en los últimos comicios y el enfado de las organizaciones con la toma de decisiones de la dirección de Sumar forzaron a Díaz en junio a renunciar al liderazgo, que hoy recae de forma interina en manos de cuatro perfiles muy próximos a ella: la actual responsable de Organización, Lara Hernández; la de Comunicación, Elizabeth Duval; el secretario general del grupo parlamentario, Txema Guijarro; y la secretaria de Estado de Derechos Sociales, Rosa Martínez. De momento, en la formación reconocen que ella sigue siendo el referente político, y que con ella fuera del día a día interno no les va mal, aunque Hernández insiste en que es pronto para definir una propuesta.

“Acabamos de empezar. Nos toca debatir sobre los problemas de la gente y no sobre nosotras mismas. Cuando hablamos de vivienda, de reducción de la jornada laboral o de permisos, nos va mejor y le va mejor al país”, ha reiterada la responsable de Organización en rueda de prensa este lunes. “Ahora funcionamos bien con una parte institucional dirigida por la Vicepresidencia Segunda en los ministerios y otra organizativa en el desarrollo de Sumar y en el diálogo con los partidos del espacio. Tendremos que concretar en la asamblea cuál es la mejor forma de organización. Pero para ese debate debemos esperar a que el documento organizativo esté encima de la mesa y para ello todavía es temprano”, ha concluido.

Es precisamente ese modelo organizativo el que ha quedado obsoleto desde marzo, al descartar integrar a otras formaciones como IU, Más Madrid, Catalunya en Comú o Verdes Equo en sus estructuras. Los documentos originales hablaban de un 30% de la dirección reservada al resto de partidos, pero el esquema ha mudado por completo y por ahora solo se contempla una relación “de igual a igual” en el marco de una coalición.

Fuentes de Sumar reconocen que ese nuevo texto esclarecerá las formas de relación entre fuerzas políticas. Pero a casi nadie le interesa alimentar ya en público el debate sobre la unidad de la izquierda, y mucho menos a Podemos, que lleva meses promocionando a Irene Montero como su gran baza electoral y respiró aliviado al lograr dos eurodiputados en junio frente a los tres de Sumar. Precisamente, el viernes pasado los de Ione Belarra plantaron a última hora al resto de partidos en una charla sobre las alianzas en la izquierda organizada en la fiesta anual del PCE. Con todo, la ruptura de diciembre pasado daña las aspiraciones electorales de un espacio que con varias candidaturas acusaría los efectos del sistema electoral español, que penaliza la división, sobre todo en las circunscripciones pequeñas.

Entre las tareas del partido previas a esa segunda asamblea, Sumar debe abordar también la fórmula de despliegue de la estructura territorial, definir el tipo de dirección, ahora coral, y “actualizar” su propuesta política, adaptándola a la realidad actual.

Según ha anunciado Lara Hernández, será Íñigo Errejón, portavoz parlamentario, el encargado de coordinar el documento político (ya fue el responsable de la ponencia aprobada en marzo), y ella misma dirigirá los trabajos del organizativo. Está previsto que en los próximos meses ambos sean sometidos a debate en los territorios y en los grupos sectoriales.

Incorporaciones

Si en abril pasado Sumar elegía una dirección con asientos vacantes a expensas de la decición del resto de organizaciones sobre su participación futura, en la reunión del grupo coordinador mantenida este sábado la formación ha aprobado la incorporación de tres nuevos perfiles: la eurodiputada Estrella Galán; la parlamentaria autonómica Esperanza Gómez (líder de Más País Andalucía, organización que ha iniciado su integración en Sumar); y Xabel Vegas, diputado autonómico de Convocatoria por Asturias.