El juez manda a prisión a los cinco policías antidroga detenidos en Sevilla
Los agentes están acusados de 10 delitos, entre ellos organización criminal, tras la detención por la unidad de Asuntos Internos
El juez ha mandado a prisión a los cinco policías antidroga detenidos en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) el pasado martes en una operación con 35 detenidos en total. El magistrado Jorge Bodes, que dirige el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 3 de esa ciudad cercana a la capital andaluza ha decretado cárcel provisional, comunicada y sin fianza, para los cinco agentes, un subinspector y cuatro policías rasos, tras escuch...
El juez ha mandado a prisión a los cinco policías antidroga detenidos en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) el pasado martes en una operación con 35 detenidos en total. El magistrado Jorge Bodes, que dirige el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 3 de esa ciudad cercana a la capital andaluza ha decretado cárcel provisional, comunicada y sin fianza, para los cinco agentes, un subinspector y cuatro policías rasos, tras escuchar su declaración judicial como investigados.
Los policías solo han respondido a las preguntas planteadas por sus defensas y han evitado contestar a la Fiscalía y al juez. La causa, cuyas detenciones paralizaron el martes varias zonas de esta ciudad sevillana (76.000 habitantes) está declarada secreta y las pesquisas integran una decena de delitos: pertenencia a organización criminal, contra la salud pública, cohecho, contra la Administración Pública, descubrimiento de secretos, contra el patrimonio, falsedad documental, coacciones, omisión del deber de perseguir delitos, y tenencia ilícita de armas.
El juez Bodes está tomando declaración este jueves a otros 18 detenidos por la misma causa, en este caso supuestos narcotraficantes. El primer detenido que declaró este miércoles ante el magistrado quedó en libertad provisional tras prestar declaración.
Tras meses de seguimientos y escuchas telefónicas, los agentes fueron detenidos por su presunta vinculación con el tráfico de estupefacientes. Asuntos Internos realizó una veintena larga de registros en distintos puntos de Alcalá de Guadaíra, en los que se incautaron droga, material relacionado con el narcotráfico y una escopeta. La operación se centró en la barriada de Rabesa, donde es más intenso el tráfico de estupefacientes a pequeña escala en esta ciudad.
La comisaría de Alcalá de Guadaíra dispone de una plantilla de unos 130 policías y la intervención guarda similitudes con la operación desarrollada por Asuntos Internos hace tres años en Mérida, donde detuvo a todo el grupo antidroga de la ciudad extremeña. El juez procesó al grupo policial por organización criminal y tráfico de drogas hace solo dos semanas.