Las izquierdas vuelven a intentarlo en Andalucía: IU y Podemos fortalecen su coalición

Muy pocos daban un duro por la coalición Por Andalucía, una confluencia de izquierdas integrada por IU, Podemos, Más País, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz que concurrió a las elecciones andaluzas de 2022. Sus orígenes fueron traumáticos —la marca se registró fuera de plazo porque no se ponían de acuerdo en el reparto de puestos— y ...

Muy pocos daban un duro por la coalición Por Andalucía, una confluencia de izquierdas integrada por IU, Podemos, Más País, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz que concurrió a las elecciones andaluzas de 2022. Sus orígenes fueron traumáticos —la marca se registró fuera de plazo porque no se ponían de acuerdo en el reparto de puestos— y sus cinco diputados hacían vidas separadas y guerras por su cuenta.

Pero la situación desde hace meses es otra y “después de tantísimos vaivenes el grupo está trabajando bien”, afirma la portavoz parlamentaria de Por Andalucía, Inma Nieto. La diputada comunicó el miércoles pasado a la Mesa del Parlamento la sustitución como viceportavoz de Esperanza Gómez (presidenta de Más País Andalucía, partido que hace meses decidió iniciar el proceso para disolverse e integrarse en Sumar) por la diputada de Podemos Alejandra Durán, una información que adelantó Diario Red. No solo es un cambio por cuestiones de intendencia y operatividad (Gómez es también miembro de la Mesa), sino una apuesta por “fortalecer” y “preservar” la coalición de cara a las próximas elecciones.

Así lo aseguran el coordinador de IU, Toni Valero, la secretaria de Organización de Podemos, Raquel Martínez, y la líder de Más País a este periódico. “Ahora mismo hay buen entendimiento en el grupo. Lo más importante es que tenemos cinco diputados y la responsabilidad de estar a la altura y hacer oposición. Llevamos más de un año trabajando con normalidad, todo organizado y con un trabajo fluido. La viceportavocía es un reconocimiento político al peso de Podemos Andalucía. Estamos mirando a Andalucía, fortaleciendo lo que tenemos y por preservar el espacio”, asegura Martínez (Podemos), que distingue entre lo que pasa de “Despeñaperros para arriba” a lo que ocurre de “Despeñaperros para abajo”. Arriba, es decir, en Madrid, reinan las disputas de Podemos con los partidos que integran Sumar, del que salió en diciembre pasado; y abajo, en Andalucía, apuestan por cuidar la coalición.

El coordinador de IU Andalucía también alude a la frontera natural de Andalucía con la Meseta. “Con los cambios en el grupo se gana más capacidad de acción y certifica que las fuerzas que están ahí quieren seguir juntas. Esta es la dinámica de Despeñaperros para abajo: en Andalucía hay mimbres de entendimiento de todas las izquierdas. IU apuesta por consolidar Por Andalucía con todo el mundo. En Andalucía hay unidad y ese mensaje andaluz se puede lanzar con naturalidad”. Ni Martínez ni Valero dan por hecho que volverá a ir juntos en las elecciones autonómicas de 2026 —las segundas que tocan por calendario, después de las de Castilla y León, si no hay ningún adelanto más— pero por ahora ninguno de ellos toca la música de enfrentamiento que suena desde los terminales que controla Pablo Iglesias.

Esa unidad en los comicios andaluces, en todo caso, supondría un giro en la estrategia del partido que dirige la exministra Ione Belarra. Desde la ruptura en el Congreso (los cuatro diputados de Podemos están ahora en el Grupo Mixto), Podemos e IU se han enfrentado en las últimas cuatro convocatorias (Galicia, Euskadi, Cataluña y Europa). Los primeros, solos o con el ecologista Alianza Verde. Los segundos, integrados en las candidaturas de Sumar. El acercamiento, además, coincide con la llegada de una nueva dirección a IU, capitaneada por el también andaluz Antonio Maíllo.

En el grupo han pasado página a los enfrentamientos pasados. La ahora viceportavoz, Alejandra Durán, fue la representante de la coalición en la Mesa del Parlamento al inicio de la legislatura, pero fue fulminada “temporalmente por falta de confianza” una vez que se supo que registró un reglamento interno del grupo sin la firma de la portavoz y el visto bueno del resto de miembros de la coalición. Antes de eso, Podemos e IU mantuvieron una sonora pelea por la designación del candidato a la presidencia de la Junta. El partido fundado por Iglesias apostó por Juan Antonio Delgado, pero fue Yolanda Díaz la que escogió a Inma Nieto, de Izquierda Unida, sin primarias de por medio, evidenciando su apoyo durante una visita de caseta en caseta por la Feria de Sevilla.

Nieto no echa la vista atrás. “Ahora no hay ruido, ni escandalera, ni líos, ni tensiones. Eso ya pasó y si continuamos en el espacio colaborativo sin que los partidos que integran Por Andalucía pierdan su identidad sería una pena no seguir viendo el panorama de fuera. No tendría sentido desandar lo andado”, sostiene. La diputada asegura que el cambio de la portavocía adjunta se debe, además de por razones políticas, a cuestiones operativas. Uno de sus cinco parlamentarios, José Manuel Gómez Jurado, cogerá el permiso paternal en los próximos días y hay una nueva comisión en el Parlamento por la crisis de Gobierno que impulsó el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, a final de julio y la hasta el miércoles viceportavoz también hace doblete en la Mesa.

“No tiene sentido que tuviera dos cargos. Es mejor que esté en la Mesa. Estoy contenta y así se equilibra todo”, asegura también la presidenta de Más País, Esperanza Gómez. “El origen de la coalición fue traumático, pero desde hace meses hay normalidad. Somos muy pocos diputados y si no nos apoyamos unos a otros es un infierno. No sé lo que pasará en un futuro, pero hay que remar juntos y tirar para adelante pensando en las próximas elecciones. Esa es nuestra responsabilidad”, defiende.

Una fuente de IU, conocedora de las relaciones entre su formación y Podemos, va más allá. “Hay un convencimiento en todos los aparatos andaluces de que en las próximas elecciones sería una locura no ir de forma conjunta. Queda por construir cómo va a ser, pero no hay malas perspectivas”, asegura optimista. La misma fuente recuerda que la unidad, a Podemos, le puede interesar en términos prácticos. Al no haber llegado al registro formal de la coalición Por Andalucía en 2022, “no tendría cupo de propaganda, ni espacio en debates en la próxima campaña”. Con todo, la organización debe renovar su dirección en noviembre y cualquier cambio en la ejecutiva que actualmente coordina la diputada Martina Velarde podría suponer un giro en la línea del partido.

Con información de Ángel Munárriz.