El PSOE crea la Fundación Avanza para su rearme ideológico contra “la cruzada ultra”
“Hay que tener razón y ganar para convertir esa razón en políticas públicas”, defiende Sánchez en la presentación del laboratorio de ideas de los socialistas
La Fundación FAES, el think tank neoliberal vinculado al PP que dirige el expresidente José María Aznar, ya tiene su contrapeso de izquierdas. El PSOE culmina su rearme ideológico con la Fundación Avanza después de convertirse el 23-J en la excepción de Europa y resistir el embate de una ultraderecha en expansión, que gobierna en siete países de la UE, y está a las puertas de conseguirlo en Francia, con una influencia cada vez mayor, según los socialistas, sobre la derecha tradicional qu...
La Fundación FAES, el think tank neoliberal vinculado al PP que dirige el expresidente José María Aznar, ya tiene su contrapeso de izquierdas. El PSOE culmina su rearme ideológico con la Fundación Avanza después de convertirse el 23-J en la excepción de Europa y resistir el embate de una ultraderecha en expansión, que gobierna en siete países de la UE, y está a las puertas de conseguirlo en Francia, con una influencia cada vez mayor, según los socialistas, sobre la derecha tradicional que asimila cada vez más postulados ultras en materia de inmigración, la violencia machista o en cómo afrontar la lucha contra el cambio climático. “Con su caudal de ideas y espíritu progresista, Avanza arrojará luz sobre asuntos complejos y contribuirá a desmontar las recetas neoliberales y los riesgos de la desinformación para la democracia”, ha reivindicado Pedro Sánchez en la presentación de la entidad, a la que ha asistido la plana mayor del partido y de Moncloa.
“Iniciamos una ofensiva ideológica frente a la cruzada del pensamiento de la ultraderecha y la contaminación que está ejerciendo sobre la derecha política. Promovemos una ofensiva intelectual frente a una ideología reaccionaria libertaria, populista y posdemocrática que considera al Estado como el enemigo absoluto a desmantelar”, ha fijado los objetivos de Avanza el presidente de la fundación, Manuel Escudero, uno de los puntales de Sánchez cuando decidió presentarse contra el aparato del PSOE a las primarias a la secretaría general en 2017 y que entre 2018 y el pasado febrero ha sido embajador de España ante la OCDE. El economista y ensayista político recibió en febrero el encargo de Sánchez de organizar un think tank socialdemócrata. “Se está fraguando una metamorfosis de las derechas hacia derroteros iliberales, debilitando las instituciones democráticas, la democracia deliberativa y los derechos humanos. Estamos en una lucha filosófica que hay que dar”, ha apremiado Escudero, que ha definido al proyecto como “intergeneracional, laboralista, socialista, feminista y ecologista” y ha puesto como modelo de “inspiración” y ejemplo a seguir “en el plano teórico y político” a los gobiernos de Sánchez como ”el mejor ejemplo de la construcción de un posicionamiento político socialdemócrata y progresista adaptado a los retos del siglo XXI”.
La Fundación Avanza será la “punta de lanza” y “faro” de la batalla de las ideas de los socialistas en un contexto de repliegue internacional de la socialdemocracia. Sánchez, que además preside desde noviembre de 2022 la Internacional Socialista, amplía así su estrategia para erigir al PSOE en una suerte de rompeolas por haber impedido la llegada de la ultraderecha a La Moncloa. El presidente del Gobierno ha advertido que las ideas por sí solas no son suficientes. Hay que poder aplicarlas y eso supone sí o sí gobernar. “Siempre he tenido claro que no nos bastaba con tener razón. Hay que tener razón y sobre todo ganar para convertir esa razón en políticas públicas. La mejor manera de combatir a la ultraderecha es gobernar. Y eso, algunas veces, nos ha faltado a nosotros. La derecha lo tiene clarísimo. Tenemos que ser conscientes: debemos tener razón pero también tenemos que ganar para poner en marcha esas políticas. La mejor manera de hacer frente al oscurantismo es transformar la realidad desde el Gobierno, desde el poder que dan las urnas”, ha apostillado.
Avanza, que concentrará la misión de confrontar el ideario de izquierdas con el de las derechas mientras la Fundación Pablo Iglesias acota su función al cuidado y divulgación del archivo histórico del PSOE, un partido con 145 años de historia, no pretende ser un espacio monopolizado por el Partido Socialista. Escudero ha hecho hincapié en que pretende cubrir “con una actitud abierta y colaborativa todo el espectro del progresismo, desde las sensibilidades e ideas progresistas a la izquierda de la socialdemocracia española, hasta las ideas progresistas del centro y del liberalismo político”. La función última es la de aportar respuestas para que la izquierda sea el antídoto de la galaxia de partidos de la ultraderecha que han surgido por toda Europa y se ha afianzado en países como Argentina. “El modelo español funciona, la justicia social no está pegada con la economía, frente a lo que dicen los profetas del anarcocapitalismo y algunos de sus seguidores españoles”, ha resaltado Sánchez en una alusión implícita al presidente argentino Javier Milei, aliado de Vox y al que Isabel Díaz Ayuso ha otorgado la medalla de Madrid.
“No es casual que la internacional ultraderechista celebre congresos en España, no es casual que pongan en el punto de mira a este Gobierno porque el éxito de las políticas en España es una gran amenaza. Por eso nos atacan con todas sus armas, con la intoxicación, con los insultos, con los ataques personales, sin ningún argumento porque no tienen nada”, ha incidido Sánchez, en otra referencia que ha recordado a la situación de su esposa, Begoña Gómez, citada el viernes como imputada por tráfico de influencias. “Frente a la ultraderecha no debe haber colores sino demócratas. Espero que el acuerdo entre los partidos políticos y la movilización sobre todo de la Francia progresista y republicana frente a la ultraderecha como hicimos hace un año”, ha añadido sobre las legislativas francesas.
Avanza contará con la participación, entre otros, por la expresidenta del Congreso Meritxell Batet, el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, la politóloga Cristina Monge o el sociólogo Bernardino León. “Hay un tribunal de Inquisición popular muchas veces convertido en redes sociales, así se va generando un sentimiento antisistema que utilizan los que quieren acabar con los valores democráticos”, ha subrayado Montero. “Tenemos que ser capaces de analizar con rigor una realidad extremadamente compleja. Se acabó el miedo, tenemos que meternos en debates complejos. En un mundo que se mueve tan rápido, tan hiperconectada y a toda velocidad, si no mantenemos ese ritmo y avanzamos estaremos retrocediendo”, ha observado Monge. “Hay un malestar que se abre paso entre los jóvenes, tenemos que trazar una alianza intergeneracional, los jóvenes podemos estar mejor sin ir contra los mayores”, ha abundado León.
La presencia de Guillermo Fernández Vara, expresidente extremeño, aquejado de un cáncer, ha sido muy celebrada. “Eres un ejemplo de un político ejemplar, de una pieza, dedicado siempre al bien común. La familia socialista te tiene siempre en un reconocimiento y agradecimiento”, lo ha ensalzado Sánchez. También lo ha hecho con Josep Borrell, alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad: “Te tengo que reconocer la defensa que has hecho siempre del derecho internacional humanitario“, ha destacado refiriéndose a su apoyo constante a Ucrania tras la invasión rusa y por sus críticas a Israel en la guerra de Gaza.