Yolanda Díaz da el primer paso en la construcción del nuevo Sumar con el desafío de resolver el encaje de los partidos
El acuerdo con Más Madrid implica que la plataforma de la vicepresidenta no desarrollará estructura propia en la región y causa malestar en IU. La Primera Asamblea lanza a la cabeza de lista a las europeas
Yolanda Díaz culmina este sábado la primera etapa en la construcción del nuevo Sumar, el espacio político de referencia a la izquierda del PSOE y en el que aspira a integrar a ciudadanos hasta ahora sin adscripción partidista y organizaciones de ámbito regional y estatal. Ocho meses después de la celebración de las elecciones generales, la vicepresidenta segunda del Gobierno llega a esta Primera Asamblea en medio de las tensiones desatadas...
Yolanda Díaz culmina este sábado la primera etapa en la construcción del nuevo Sumar, el espacio político de referencia a la izquierda del PSOE y en el que aspira a integrar a ciudadanos hasta ahora sin adscripción partidista y organizaciones de ámbito regional y estatal. Ocho meses después de la celebración de las elecciones generales, la vicepresidenta segunda del Gobierno llega a esta Primera Asamblea en medio de las tensiones desatadas en las últimas horas en la federación madrileña de Izquierda Unida por el acuerdo alcanzado con Más Madrid. El pacto bilateral implica la renuncia de Sumar a desarrollar una estructura propia en la región, aunque ambas formaciones trabajarán de manera conjunta y en IU se sienten excluidos. Esta reunión, que tendrá una segunda cita en otoño, se celebra además en un contexto complejo para el socio minoritario de la coalición, con un Sumar desdibujado después de meses de debate público copado por la ley de amnistía y un Gobierno sin Presupuestos, lo que complica el despliegue de su agenda social.
El fortalecimiento organizativo de Sumar es clave para el futuro de la nueva fuerza política. En el proceso participan además de IU y Más Madrid, Catalunya en Comú, Verdes Equo, Contigo Navarra e Iniciativa del Pueblo Andaluz. Tras el golpe en Galicia y con tres convocatorias electorales por delante (vascas, catalanas y europeas), el partido de la vicepresidenta busca este sábado exhibir músculo y mostrar un cierto consenso en la asamblea que se celebra en la capital. Habrá un debate plenario para discutir enmiendas a los documentos, conferencias y un mitin de cierre. El exsecretario de Estado Nacho Álvarez o el exvicepresidente balear Juan Pedro Yllanes participarán en los coloquios y contará con saludos de referentes políticos internacionales como Pepe Mujica. Junto a Díaz estarán los ministros del grupo: Ernest Urtasun (Cultura), Pablo Bustinduy (Derechos Sociales), Mónica García (Sanidad) y Sira Rego (Juventud e Infancia). En el acto final intervendrán también el portavoz parlamentario, Íñigo Errejón, y la cabeza de lista a las europeas, la directora de CEAR Estrella Galán, en el que será su primer discurso tras haber sido designada.
De la Asamblea no saldrá elegida ni una Ejecutiva ni una coordinadora. Sin que haya un rival de peso contra Díaz, se proclamará la lista ganadora, que ocupará un 70% del grupo de coordinación —máximo órgano de dirección entre asambleas—, pero habrá que esperar algunas semanas a que los partidos designen a sus representantes para ocupar el 30% restante. Será ese grupo final el que decida a la coordinadora y los demás puestos de responsabilidad. Sí se aprobarán este sábado tanto la tesis política como el documento organizativo. Para sortear los problemas con las formaciones, Sumar ha acordado finalmente cambiar la estructura de los grupos territoriales, que contemplaban también una distribución del 70%-30%. Las modificaciones introducidas ceden el poder a los territorios para decidir la configuración final de cada órgano, lo que permite el control en Andalucía, por ejemplo, a IU, fuerza con mayor implantación en la comunidad. Además, Sumar ya ha explicitado que la referencia en Cataluña será el partido de Ada Colau (Catalunya en Comú) y en Madrid el pacto bilateral con la organización liderada por la ministra de Sanidad otorga a esta un papel predominante.
“Más Madrid queda reconocida como la fuerza progresista de referencia en la Comunidad de Madrid y vamos a seguir trabajando con todo el que tenga ganas de cambio, de futuro verde y de justicia social”, explicó ayer en declaraciones a RNE la portavoz en la Asamblea regional, Manuela Bergerot. Fuentes de este partido celebran haber alcanzado un acuerdo de “reconocimiento mutuo” en el que se trabajará “de manera conjunta”, aunque subrayan que todo lo que atañe a la comunidad les corresponde a ellos. “Tanto el censo, como los órganos, los recursos, la autonomía de iniciativa política y la toma de decisiones están en Madrid”, inciden. El texto del acuerdo, al que ha accedido parcialmente EL PAÍS, recoge el impulso de una “relación bilateral” en el que haya una “coordinación de la iniciativa política conjunta en el ámbito de Madrid”.
Recelos en IU
“Esta situación deja a Izquierda Unida Madrid fuera de la coalición Sumar en la Región, un hecho del todo intolerable y que supone un paso más en el carácter confederal que parece estar adquiriendo Sumar. Sin embargo, IU es una organización nítidamente federal y, por lo tanto, el papel que juguemos en Sumar debe suponer un desarrollo homogéneo en los territorios”, denunció este viernes en un comunicado la federación madrileña de IU. “Cabe preguntarse, ¿se va a permitir que en las regiones en las que IU es más fuerte institucionalmente como en Andalucía o en Asturias la marca autonómica sí sea Sumar pero en otras no?”, añade. Otras voces de la formación, inmersa en su propio proceso de Asamblea, reclaman que se “visualizase” la marca en esas comunidades, además de un acuerdo bilateral específico también con ellos. “Nuestra valiosa militancia merece respeto y no estamos dispuestas a ceder el enorme capital político que representa nuestra organización a un proyecto que en el que no se nos reconoce”, advierte la formación en Madrid. En todo caso, Sumar tiene hasta la Asamblea Constituyente del próximo otoño para definir las relaciones entre partidos y la estructura orgánica final.