Felipe VI releva a Alfonsín y nombra al diplomático Villarino jefe de la Casa del Rey
El nuevo responsable de La Zarzuela era hasta ahora el más directo colaborador de Borrell y ha sido jefe de Gabinete de tres ministros de Exteriores del PP y el PSOE. Tiene un “perfil bipartidista”, destacan en la Casa Real
Felipe VI ha decidido relevar al jefe de la Casa del Rey y su más directo colaborador, Jaime Alfonsín Alfonso, un abogado del Estado de 67 años, y nombrar en su lugar a Camilo Villarino Marzo, un diplomático de 59, actual jefe de Gabinete del alto representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad, Josep Borrell, según ha informado La Zarzuela en un comunicado. El relevo se llevará a cabo a lo largo del mes de febrero, agrega la nota. El responsable de la Casa del Rey tiene el rango de ministro y su nombramiento, según el artículo 65.2 de la Constitución, es discrecional del jefe ...
Felipe VI ha decidido relevar al jefe de la Casa del Rey y su más directo colaborador, Jaime Alfonsín Alfonso, un abogado del Estado de 67 años, y nombrar en su lugar a Camilo Villarino Marzo, un diplomático de 59, actual jefe de Gabinete del alto representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad, Josep Borrell, según ha informado La Zarzuela en un comunicado. El relevo se llevará a cabo a lo largo del mes de febrero, agrega la nota. El responsable de la Casa del Rey tiene el rango de ministro y su nombramiento, según el artículo 65.2 de la Constitución, es discrecional del jefe del Estado.
Hacía tiempo que se esperaba el relevo de Alfonsín, quien había expresado en privado su deseo de dejar el cargo después de casi tres décadas en La Zarzuela, pero muy pocos conocían el nombre de su sustituto, que ha sorprendido a relevantes miembros del Gobierno. Fuentes de la Casa Real reconocen que la sustitución se ha ido demorando durante meses hasta encontrar el momento oportuno, una vez que se ha formado el Gobierno y ha arrancado la nueva legislatura, y que el Rey ha despachado con Alfonsín el nombre de su sustituto.
El relevo se produce a solo cinco meses de que se cumpla una década desde que Felipe VI heredó el trono, en junio de 2014. Atrás han quedado las investigaciones judiciales por los escándalos económicos del rey emérito, que en los últimos años han lastrado la imagen de la Monarquía, y aunque el horizonte no esté totalmente despejado para la institución, ni el panorama político se haya calmado, el Rey ha considerado llegado el momento de abrir una nueva etapa, agregan las fuentes consultadas. Felipe VI, con 55 años, ha buscado a una persona más próxima a su generación y a un servidor del Estado, que ha trabajado tanto para gobiernos del PP como del PSOE y tiene, por tanto, un “perfil bipartidista”, según destacan en La Zarzuela. El nuevo jefe de la Casa del Rey tiene, además, una amplia experiencia internacional que se considera muy útil para su futuro puesto y es un convencido europeísta, como el propio Monarca. Quienes conocen a Camilo Villarino aseguran que se trata de una persona “seria, rigurosa, leal y discreta”, cualidades todas ellas muy valoradas en La Zarzuela, aunque añaden que no cabe esperar de él que introduzca grandes innovaciones ni cambios revolucionarios en la Casa del Rey.
Villarino, natural de Zaragoza, casado y con tres hijas, ingresó en la carrera diplomática en 1989. En junio de 2017, el entonces ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, del PP, lo nombró jefe de su Gabinete, un puesto en el que lo mantuvo su sucesor, el socialista Josep Borrell y la sucesora de este, Arancha González Laya. Como ayudante más directo de esta última, el juez de Zaragoza que investigaba la entrada en España del líder del Polisario, Brahim Gali, en abril de 2021, para ser atendido de una grave afección de la covid, lo citó como imputado, pero el caso se acabó archivando al no apreciarse la existencia de delito. El Gobierno llegó a pedir el plácet de Villarino para designarlo embajador en Moscú, pero el nuevo ministro de Exteriores, José Manuel Albares, retiró la petición y el diplomático se incorporó en marzo de 2022 al Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), donde seis meses después se convirtió en jefe del Gabinete de Borrell. Licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y diplomado por el Colegio de Europa de Brujas (Bélgica), cuenta con un curso de alto nivel en el Colegio Europeo de Seguridad y Defensa. Ha estado destinado en la Embajada española en Zagreb (1994-1997), la Representación Permanente de España ante la UE (1997-2002), la Embajada en Washington (2008-2013), como consejero para las relaciones trasatlánticas y asuntos de seguridad y defensa; y la Embajada en Rabat, donde fue ministro consejero y jefe adjunto de misión (2013-2017).
Además, conoce bien las Fuerzas Armadas —es reservista voluntario y está destinado, como capitán, en el cuartel general de la Unidad Militar de Emergencias (UME)—, lo que le será muy útil para dirigir una institución que cuenta con un Cuarto Militar y una unidad uniformada, la Guardia Real. Trabajó a las órdenes de la ministra de Defensa, Margarita Robles, durante el mes y medio que, entre 2019 y 2020, esta ocupó interinamente la cartera de Exteriores.
En el comunicado oficial, se subraya que Jaime Alfonsín ha estado casi 30 años al servicio de Felipe VI. Fue nombrado jefe de la Casa del Rey tras la proclamación del jefe del Estado, en junio de 2014, por lo que ha estado casi una década al frente del aparato de La Zarzuela y ha sido la única persona que ha ocupado este puesto con el actual Monarca. Sin embargo, su relación viene de atrás, ya que Felipe VI lo designó jefe de su Secretaría en 1995, cuando era Príncipe de Asturias.
“Su Majestad”, agrega el comunicado, “desea seguir contando con su valioso y leal consejo, para lo cual le nombrará consejero privado y, en esta condición, le continuará prestando el asesoramiento que requiera y desempeñará las funciones que le encomiende”. El antecesor de Alfonsín, aún con Juan Carlos I como Rey, había sido el diplomático Rafael Spottorno Díaz-Caro.
Abogado del Estado, Alfonsín llegó al palacio de La Zarzuela tras una larga trayectoria en la Administración pública y la empresa privada. Estuvo destinado en las delegaciones de Hacienda de Teruel y Cuenca y más tarde en el Tribunal Supremo y el servicio jurídico de la Comisión Europea. Volvió a la Administración central como director general de Cooperación en el Ministerio de Administración Territorial, y paralelamente dio clases de Derecho Comercial en el Instituto Católico de Administración de Empresas (ICADE). Como letrado, trabajó en el despacho de Uría y Menéndez.