37 municipios tendrán nuevo alcalde tras la repetición electoral de noviembre

Las elecciones municipales del 28-M dejaron sin alcalde a 8.000 vecinos de 49 pequeños municipios en los que, o bien por falta de candidaturas o bien por errores en el escrutinio, fue necesario repetir los comicios. La nueva votación se produjo el pasado 26 de noviembre, y este miércoles finalizó el plazo de alegaciones, de modo que las Corporaciones ya pueden quedar constituidas. La mayoría de es...

Las elecciones municipales del 28-M dejaron sin alcalde a 8.000 vecinos de 49 pequeños municipios en los que, o bien por falta de candidaturas o bien por errores en el escrutinio, fue necesario repetir los comicios. La nueva votación se produjo el pasado 26 de noviembre, y este miércoles finalizó el plazo de alegaciones, de modo que las Corporaciones ya pueden quedar constituidas. La mayoría de estas localidades (38) se encuentran en Navarra, donde 26 pueblos contarán con un nuevo alcalde para los próximos cuatro años. En cambio, los 12 restantes serán regidos por una gestora, ya sea por no haberse presentado candidaturas o porque no se registraron votos válidos por ninguna lista. Otros 11 municipios, distribuidos entre Segovia, Burgos, Teruel, Salamanca, Ourense y Guadalajara, eligieron también a su nuevo alcalde.

Fuentes de la Federación de Navarra de Municipios y Concejos (FNMC) señalan que la falta de iniciativa vecinal en localidades pequeñas es habitual en la región desde hace décadas. “Casi todos estos pueblos se encuentran en el medio rural y tienen menos de 100 o 200 habitantes. La población está envejecida y la gente cree que ya nadie está para estas cosas. Además, al alcalde a veces le toca discutir con los vecinos y se generan enemistades indeseadas”, apunta el responsable de comunicación, Juan Jesús Echaide. El hecho de que en la mayoría de los casos el cargo de alcalde no sea remunerado, unido al exceso de carga burocrática o la exigencia de poseer conocimientos técnicos son otras razones que acaban dejando el puesto de regidor vacante, según la FNMC.

En Monroyo (Teruel), Miguel Gascón (PP) ha logrado la mayoría absoluta en unos comicios en los que se ha impuesto a Teruel Existe y en los que el PSOE, que gobernaba hasta ahora, no se presentó. En Cabezuela (Segovia), el periodista Florentino Descalzo será el próximo alcalde después de que Agrupación de Electores de Cabezuela haya obtenido el 96% de los votos frente a Óscar Ortiz (Progreso de Ciudades Alianza Alternativa). Por otro lado, en tres de los cuatro municipios burgalenses que han repetido elecciones solo había una candidatura, así que los resultados eran previsibles. Es el caso de Peral de Arlanza (Burgos), donde gobernará Ricardo de la Peña (PP); Trespaderne, que tendrá de alcaldesa a Begoña Lavín (PSOE); y Quintanilla de La Mata, donde Mónica Sanz (PSOE) llevará el bastón de mando. En Zael concurrieron el PP y el PSOE, resultando ganadora la socialista Ana Isabel Angulo.

El caso de Navarra es más complejo. En ocho localidades el plazo de inscripción volvió a cerrarse sin candidaturas. Por tanto, Bargota, Etayo, Villanueva de Aezkoa, Izalzu, Navascués, Lezaun, Orisoiain y Sarriés continuarán en manos de comisiones gestoras designadas por la administración autonómica. En otros 30 municipios navarros sí se presentaron candidatos y la jornada electoral transcurrió con normalidad, salvo en cuatro: Urroz, Areso y Muruzábal, donde no acudió ningún votante, y Atez, donde todos los votos fueron nulos o en blanco. Estos cuatro pueblos se añaden a los ocho sin candidatura de modo que, en total, serán 12 municipios navarros los que quedarán en manos de una comisión gestora.

Por tanto, solo 26 de los 38 consistorios navarros en los que se han repetido las elecciones tendrán alcalde, que será designado por el pleno de los respectivos ayuntamientos el próximo 16 de diciembre. La mayoría de las listas ganadoras pertenecen a asociaciones locales, salvo en el caso de Escároz y Arantza, donde EH Bildu se hizo con la victoria. El presidente saliente de la FNMC (recientemente relegado por Xabier Alcuaz), Juan Carlos Castillo, considera que, aunque la figura del alcalde es siempre importante para el desarrollo de la vida municipal, la labor de las comisiones gestoras puede ser “perfectamente válida”.

Además, y como novedad fruto de la nueva Ley de Administración Local de 2019, los nueve concejos navarros que han acumulado dos convocatorias electorales completas (2019 y 2023) sin candidatos podrían ser disueltos como administración. Los concejos son pequeñas comunidades locales entroncadas dentro de un municipio. Tienen su propio territorio, y aunque su población sea inferior, gozan de la capacidad para gestionar algunos asuntos locales.

La legislación indica que encadenar dos ciclos electorales consecutivos sin candidatura es una causa de posible disolución, pero aún es pronto para determinar la decisión final, en manos del Ejecutivo foral. Los concejos que se hallan en esta situación son Narbarte (en el municipio de Bertizarana), Antxoritz (Esteribar), Azanza (Goñi), Igal (Güesa), Iturgoyen (Guesálaz), Ardanaz de Izagaondoa (Izagaondoa), Navascués (Navascués), Olaiz (Oláibar) y Bearin (Valle de Yerri).

Repetición en mesas donde se registraron irregularidades

La falta de aspirantes a la alcaldía no era el único motivo para repetir elecciones el 26 de noviembre. También fueron llamados a las urnas los vecinos de mesas electorales en las que el pasado mayo se registraron irregularidades y cuyos resultados fueron anulados por sentencia firme o por acuerdo de la Junta Electoral. Es el caso de Castro Caldelas (Ourense); dos mesas en Fiñana (Almería) y Ceutí (Murcia); y una mesa en Ocentejo (Guadalajara) y Puerto Seguro (Salamanca).

En todos estos municipios, salvo en Ceutí, la repetición de elecciones no ha supuesto ningún cambio en los resultados electorales. En la localidad murciana, el nuevo recuento sí resta un concejal al PSOE y suma uno a Vox. Así, la nueva configuración, con 8 escaños para el PSOE, 5 para el PP, 3 para Vox y uno para Ciudadanos, da a la formación naranja la llave para decantarse por un gobierno socialista o una coalición entre conservadores y la ultraderecha.