El ministro de Exteriores marroquí anula una cita con Borrell por el Sáhara
Rabat afea las declaraciones del político sobre una “consulta” al pueblo saharaui
El ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Náser Burita, realizó este viernes un nuevo gesto para mostrar su enfado con el alto representante para Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell, después de que este protagonizara una polémica a principios de esta semana por unas declaraciones a TVE en las que abogaba por ...
El ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Náser Burita, realizó este viernes un nuevo gesto para mostrar su enfado con el alto representante para Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell, después de que este protagonizara una polémica a principios de esta semana por unas declaraciones a TVE en las que abogaba por una “consulta” al pueblo saharaui sobre el futuro el Sáhara Occidental. Según informaron varios medios de comunicación afines al Gobierno de Marruecos, Burita anuló una entrevista con Borrell prevista para el próximo mes de septiembre, cuando estaba previsto que el político español visitara Rabat.
Este jueves, Burita ya había expresado públicamente su enojo con el jefe de la diplomacia europea en el transcurso de una rueda de prensa conjunta con la ministra de Asuntos Exteriores alemana, Annalena Baerbock, que se hallaba de visita en la capital marroquí. “Deploramos estas declaraciones porque no reflejan la posición de España ni de la Unión Europea”, espetó el máximo responsable diplomático marroquí al ser preguntado por el polémico comentario de Borrell en una entrevista concedida a TVE el pasado lunes.
“Esperemos que se trate de un lapsus de Borrell”, añadió antes de señalar que el propio Borrell ya había matizado sus propias palabras en una entrevista posterior a la agencia Efe, en la que abogó por una solución “acordada entre las partes” en el marco de Naciones Unidas.
El origen de la controversia debe buscarse en un discurso del rey de Marruecos, Mohamed VI, el pasado sábado con motivo del 69º aniversario de la Revolución del Pueblo y el Rey. En su alocución dirigida a la nación, el monarca alauí elogió la posición española como “clara y responsable” en la cuestión del Sáhara Occidental, e instó a otros países de la UE a seguir sus pasos. Hace cinco meses, el Gobierno de Pedro Sánchez decidió romper con una política de Estado de casi cinco décadas basada en la neutralidad en este espinoso conflicto, y abrazó la propuesta marroquí de conceder una régimen autonómico al Sáhara Occidental.
En TVE, Borrell quiso desmentir que hubiera discrepancia alguna entre las posturas de Madrid y Bruselas. “La posición que tiene el Gobierno español era y es la de la UE. Es decir, defender la realización de una consulta para que sea el pueblo saharaui quién decida cómo quiere que sea su futuro”, dijo Borrell, lo que se interpretó como un apoyo a la realización de un referéndum de autodeterminación en el Sáhara Occidental. Esta es la posición defendida por el Frente Polisario y su máximo valedor, Argelia, pero resulta inaceptable para la actual administración marroquí. De ahí, la reacción furibunda de Burita.
Sin embargo, el padre del actual monarca, Hassan II, sí aceptó a principios de los años noventa la celebración de un referéndum de autodeterminación del Sáhara como solución al conflicto. Ahora bien, después de que las labores de la comisión de la ONU encargada de realizar el censo se vieran obstruidas por la actitud de Marruecos, se hizo evidente que Rabat no pensaba realmente permitir la realización de la consulta. Así las cosas, entrado ya el siglo XXI, se empezaron a explorar otras opciones de resolución del conflicto, como la concesión de una amplia autonomía para el pueblo saharaui.
Desde hace décadas, la cuestión del Sáhara Occidental es el eje central sobre el que gira la política exterior marroquí. No obstante, no fue hasta que Donald Trump reconoció la soberanía marroquí del Sáhara Occidental a finales del 2020, que la diplomacia de Rabat adoptó una actitud mucho más contundente en la defensa de sus postulados.
Rabat también anunció este viernes la retirada de su embajador en Túnez, según afirmó en un comunicado, por haberse multiplicado “las actitudes y comportamientos negativos hacia el Reino de Marruecos y sus intereses superiores en el marco del proceso TICAD (Foro de Cooperación Japón-África)”.