Alberto Nuñez Feijóo suelta el timón de la Xunta

“No importa dónde, Galicia siempre”, escribe el presidente del PP en su carta de dimisión

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, en el centro,, y sus 'conselleiros' durante el acto.Foto: ÓSCAR CORRAL | Vídeo: XUNTA DE GALICIA
Santiago -

Al fin llegaron el día y la hora. Alberto Núñez Feijóo se ha despedido este viernes de la presidencia de la Xunta, aunque seguirá en fun...

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Al fin llegaron el día y la hora. Alberto Núñez Feijóo se ha despedido este viernes de la presidencia de la Xunta, aunque seguirá en funciones medio mes más. Fiel a su habitual estilo, no ha despejado las dudas sobre la fecha exacta hasta el último momento. El pasado miércoles, en su adiós como portavoz parlamentario, lo más que aclaró fue que dejaría el cargo “esta semana”. Ayer tocaba, como suele ocurrir los jueves, reunión con su equipo de conselleiros, y desde el momento de la llegada a la sede oficial de San Caetano, en Santiago, el ambiente fue de despedida. El paseíllo ante los miembros del Ejecutivo gallego y la foto de toda la tripulación inauguraron la cuenta atrás. Al término del Consello de la Xunta, en su comparecencia ante los medios, Feijóo volvió a dejar a todos en vilo al anunciar que dimitiría “en unas horas”. La agenda oficial despejó las dudas, al señalar para las 10.30 de este viernes una reunión con el jefe del legislativo gallego, Miguel Santalices. El líder del PP ha pedido y presumido de “moderación” con una de sus señas al frente de la Xunta: “Moderación como aliada para que los logros colectivos sean perseguidos por amplias mayorías que no vayan contra nadie ni dentro ni fuera de esta tierra”.

Efectivamente, este viernes, aunque con cierto retraso, a las 11.01, el líder popular ha entregado su carta de renuncia a su compañero de filas. Él, que tantas veces ha usado la metáfora de Galicia como barco, ha dejado el timón, después de 13 años de capitán y casi un mes más tarde de soltar las amarras de la presidencia del PP de Galicia, el pasado 30 de marzo. Dos horas después de entregar la dimisión (que mañana sábado será efectiva al publicarse en el boletín oficial) y tras comunicársela al Rey y al presidente Pedro Sánchez, Feijóo ha leído ante las cámaras una declaración institucional de despedida a los gallegos. A partir de ahora tanto él como sus conselleiros seguirán en funciones —sin poder adoptar decisiones sobre nuevas inversiones económicas— hasta que se complete el proceso de toma de posesión del que será su sucesor al frente de la Xunta, el vicepresidente primero, Alfonso Rueda, que nombrará su propio equipo. Rueda también es el único aspirante a la presidencia del PP de Galicia, y ayer jueves, antes de acudir al último Consello de la Xunta de Núñez Feijóo en el cargo, pasó por la sede regional del partido para presentar sus avales. Al igual que la alegoría marinera, su lema es otro muy recurrente en el PP gallego, que juega con el mito jacobeo y con el continuismo: “O Camiño a seguir”.

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, saluda al actual vicepresidente primero y su sucesor como presidente de la Xunta, Alfonso Rueda.Álvaro Ballesteros (Europa Press)

Núñez Feijóo (Os Peares, Ourense, 1961) alcanzó la presidencia de la Xunta, en sustitución del socialista Emilio Pérez Touriño, en 2009, con 47 años. Marcha a Madrid con 60 años, después de ganar su cuarta mayoría absoluta en las primeras elecciones pandémicas, en julio de 2020. Es el quinto mandatario autonómico de Galicia y el primero que dimite y pasa el testigo a un sucesor. Ayer jueves negó que tras su marcha se vayan a reforzar las “baronías” provinciales. Según él, hace tiempo que “no existen” aunque haya presidentes territoriales. Poco después de asumir la presidencia de la Xunta, previsiblemente el sábado 14 de mayo, Rueda será candidato único en el congreso que se celebrará el 21 y el 22 del mes que viene en Pontevedra, que lo aupará como jefe del PP gallego. Según los propios estatutos del partido, al convertirse en presidente de la formación será también el candidato en las autonómicas de 2024 (en caso de seguir todavía al frente en Galicia).

Después de reunirse a primera hora con su grupo parlamentario y entregar luego su carta de dimisión a Santalices, Feijóo ha presidido una reunión extraordinaria del Consello de la Xunta y, tras la cita con sus conselleiros, ha pronunciado una declaración institucional de adiós en el Pazo de Raxoi, ante esa plaza del Obradoiro en la que festejó con un baño de masas su primera victoria electoral. En su carta de dimisión, el presidente en funciones explica que, si bien sus nuevos cometidos como líder del PP en España no son “incompatibles” con la titularidad del Gobierno autónomo, esta función “merece una dedicación absoluta”. Al pie de la misiva y antes de la rúbrica, el político ha escrito a mano en gallego: “Gracias, muchas gracias a todos los gallegos por darme la honra de servir a la Tierra Madre. No importa dónde, Galicia siempre”.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo (a la izquierda), presenta este viernes su renuncia al presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Santalices.ÓSCAR CORRAL (EL PAÍS)
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En su declaración institucional, Núñez Feijóo ha asegurado que “nunca” había concebido “pronunciar estas palabras de renuncia” en estas circunstancias. “Pero tampoco llegué a imaginar”, ha seguido hilando, “que la política en España, el servicio público, el interés general, iban a ser rehén durante tanto tiempo de la frivolidad, de la popularización y del populismo que se han instalado”. “No quiero ni puedo compartir la premisa de que en el conjunto de España es imposible lo que sí fue posible en Galicia”, ha abundado en un discurso en el que ha repasado los “desafíos” de estos 13 años y ha hecho balance positivo de su etapa. “La Galicia cordial sigue en pie”, ha proclamado, “alejada de nacionalismos intransigentes y centralismos de otros tiempos”. “Tengo fe en que el conjunto de España también vuelva a hacerlo”, ha avisado el presidente del PP, que ha puesto la tierra que gobernó como el ejemplo de que “las autonomías son Estado”, “sin fisuras y sin complejos”, y “lejos de desvertebrar” España “ayudan a coserla”.

“La estabilidad fue la materia prima esencial” de su Gobierno para afrontar las crisis y la pandemia, ha defendido Feijóo antes de advertir sobre el “retorno a épocas funestas” o las “rupturas traumáticas con la legalidad”, en alusión a las alternativas políticas. “De Galicia aprendí que gobernar consiste en dialogar” ha afirmado también, visiblemente emocionado, “ser distintos no implica ser hostiles a nadie, ni establecer fronteras ni trincheras”. El hasta ahora jefe del Ejecutivo gallego ha terminado recordando que la comunidad sigue siendo “parte fundamental de su camino” y se ha despedido con su último lema electoral, el que lo llevó a su cuarto mandato: “Galicia, Galicia, Galicia”, aunque ha sustituido el tramo final de la frase “...y por cuarta vez Galicia” por el de “...y por siempre Galicia”.

“Empieza la cuenta atrás para un gobierno del BNG”

Sobre el balance positivo que hace Feijóo de su tiempo en la Xunta, planea la mala nota puesta por los otros partidos con representación parlamentaria. Este miércoles, Feijóo acudía a su última sesión de control en el Parlamento gallego, y la oposición aprovechaba su presencia en Galicia para hacerle el examen final. “Su legado, señor Feijóo, es bajarle la calidad de vida a los gallegos y debilitar lo público”, resumió la líder de la oposición, la portavoz del Bloque Nacionalista Galego, Ana Pontón. La representante del BNG le recordó, una vez más, eso que ella define como dimisión “en diferido”, con una marcha lenta, que nunca se daba por materializada, a pesar de la cantidad de actos públicos que lo han mantenido ocupado fuera de la comunidad autónoma desde la crisis del PP en Génova. “No es que llevemos tres meses sin presidente, llevamos 13 años con un gobierno del no, del no a todo lo que significa defensa de los intereses de Galicia”, le reprochó además la parlamentaria: “Deja una Galicia peor de la que encontró. Y, para que nada falte, se va a despedir con la mayor crisis de precios en 40 años”. Hoy viernes, tras el comienzo del traspaso de poder a Alfonso Rueda, Pontón ha avisado de que “empieza la cuenta atrás para que Galicia tenga un gobierno liderado por el BNG”.

Rueda, avalado hasta por sus escollos

El vicepresidente primero de la Xunta y líder del PP provincial de Pontevedra, Alfonso Rueda, batió un récord al presentar este jueves 7.803 avales para formalizar su candidatura a liderar el PP en Galicia tras el salto a la política estatal dado por Alberto Núñez Feijóo, ya jefe de filas del partido en España desde el congreso celebrado en Sevilla al comienzo de abril. El hombre que lleva años a la sombra de Feijóo promete dar “continuidad” al proyecto popular, pero marcado por lo que definió como “estilo Rueda”. Ayer, antes de dirigirse al último Consello de la Xunta que presidía Feijóo antes de entrar en funciones, Rueda paró en la sede autonómica del partido y entregó las firmas que sustentan su candidatura, que será la única, tras superar los últimos escollos entre los líderes provinciales y recibir el respaldo del presidente en A Coruña, Diego Calvo, además de los de la presidenta en Lugo, Elena Candia, y el ourensano José Manuel Baltar.

El número de avales sirve al partido para representar esa imagen de “unidad” que el PP siempre blande frente a sus rivales para ganar las elecciones autonómicas en Galicia. Ni siquiera Núñez Feijóo alcanzó esa cifra cuando en julio del año pasado se presentó como único candidato a la presidencia de los populares gallegos, con 6.119 firmas. En el último cónclave de Sevilla, el actual presidente nacional del PP se quedó a las puertas de las 5.700. “No somos el PSOE o el Bloque”, se ha jactado hoy Rueda después de entregar los avales para una transición desde “la unidad”. Después de loar las “muchas cosas buenas que hay que recoger” de su predecesor, ha advertido de que él también dejará su impronta: “Cada uno tiene su estilo y yo tengo mi propio estilo. El estilo de Feijóo, que era buenísimo, tendrá continuidad, pero también habrá estilo Rueda”.

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