Viaje de ida y vuelta para los ucranios que acuden al Zendal
La Comunidad de Madrid anunció un registro al margen del estatal para dar acceso a distintos servicios a los refugiados de la guerra, pero, según los trabajadores del hospital, no está activo
Los refugiados ucranios que acudieron este viernes al hospital Isabel Zendal de Madrid se encontraron con que el registro autonómico de la comunidad, al margen del estatal, no estaba operativo, pese a que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, había anunciado el miércoles ...
Los refugiados ucranios que acudieron este viernes al hospital Isabel Zendal de Madrid se encontraron con que el registro autonómico de la comunidad, al margen del estatal, no estaba operativo, pese a que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, había anunciado el miércoles la apertura de este servicio. El personal de la Comunidad de Madrid les ha derivado al centro de acogida habilitado por el Ministerio de Migraciones en Pozuelo de Alarcón, a una hora y cuarto de distancia en transporte público. Una familia que acompañaba al centro hospitalario a una joven ucrania recién llegada se lamentaba ante el guardia de seguridad: “Casi una hora para llegar hasta aquí y no hay nada. Escuchamos en las noticias que había que venir y ahora dicen que vayamos a Pozuelo”.
Entre 14 y 18 personas acudieron este viernes al hospital, según la Comunidad de Madrid. Un portavoz del Ejecutivo regional asegura que no se les atendió porque ninguno de ellos tenía el número de identidad de extranjero (NIE), ya que no habían hecho aún su petición de protección temporal ante la Policía. Pasadas las cinco de la tarde, el mismo portavoz aseguró que a partir de ese momento sí se les dejaría entrar e incluso hacer un registro previo, pero que, probablemente, deberían volver cuando tuviesen sus papeles formalizados. “A los que ya vienen con su NIE sí se les atiende normalmente”, afirmó.
Sin embargo, tanto los tres vigilantes de seguridad consultados como el hospital señalaron que la asistencia a refugiados ucranios “aún no está activa”, y explicaron que se estaba trabajando “para que se habilite la semana que viene”, aunque tampoco lo aseguran. El Zendal se encuentra al noroeste de la capital y en mitad de terrenos sin construir. Levantado durante la pandemia para la atención de enfermos de covid-19, es uno de los emblemas de la gestión de la crisis sanitaria de la presidenta madrileña.
Este viernes hubo incluso quien acudió creyendo que en el recinto podrían tramitar sus permisos de residencia y trabajo, algo que solo los centros habilitados por Migraciones y las comisarías pueden llevar a cabo. “Queremos obtener el permiso de trabajo porque ya tenemos una oferta”, aseguró un hombre de origen latinoamericano que acompañaba a su hija ucrania. Los vigilantes de seguridad repartidos por las inmediaciones del Zendal le mostraron un documento que invitaba a acudir al centro habilitado por Migraciones en Pozuelo.
El anuncio de la presidenta madrileña de crear un registro propio al margen del elaborado por el Ministerio de Migraciones —que tiene las competencias— ha provocado el enfado del titular del departamento, José Luis Escrivá, que reprochó a Ayuso la iniciativa: “Se les está poniendo un trámite adicional, ¿y para qué? ¿Para hacerse una foto en el Zendal? ¿Para qué? ¡No hace falta!”
Una semana después de su inauguración, el centro estatal de Pozuelo no ha dejado de recibir a refugiados que acuden a tramitar sus permisos de residencia y trabajo. Solo ellos y el personal pueden acceder al interior. El principal obstáculo que se han encontrado los ucranios es el requisito de obtener una cita para ser atendidos, que acumula muchas demoras. “Nosotros la pedimos el lunes y nos la dieron para hoy”, aseguraba un matrimonio ucranio-español que esperaba fuera a la madre de ella. Algunos de los que llamaron este viernes obtuvieron cita para el 3 de abril.
Ana tiene 22 años y ha conseguido llegar sola hasta España desde Járkov (Ucrania). Este viernes ha ido al centro, pero le han dado cita para dentro de dos semanas. Por suerte, tiene amigos con los que residir en la Sierra Norte de Madrid hasta entonces. “Conozco a personas que tenían la cita hoy y llevan cuatro horas dentro”, asegura Ana con cansancio, aunque agradece que, a su salida, el Gobierno les concederá la protección oficial en 24 horas como máximo y les permitirá tener toda la documentación en regla para trabajar.
Sobre los servicios que ofrece el Zendal, la joven asegura que ella y sus compatriotas recibirán más información en las próximas semanas: “Nos han dicho que cuando tengamos todos los papeles nos informarán sobre cómo conseguir la tarjeta sanitaria, cómo inscribir a los niños en la escuela y cómo usar el transporte público”, concluye. Una vez ejecutados los trámites, el Estado les da la posibilidad de alojarse en los espacios distribuidos por todo el país. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, acudió este viernes al centro de Pozuelo, donde aseguró que España ha tramitado ya 7.571 peticiones de protección internacional.