El alcalde de Valladolid llama “mierda” a Toni Cantó y le acusa de cobrar 75.000 euros anuales por no hacer nada
El socialista Óscar Puente carga contra el actor y político, que en su momento tildó de enchufismo un nombramiento de la hermana fiscal del regidor
Las reacciones al nombramiento de Toni Cantó al frente de la Oficina del Español en Madrid han llegado a Valladolid. El alcalde de la ciudad, el socialista Óscar Puente, ha calificado al exdiputado de UPyD y Ciudadanos como “mierda y memo” por su incorporación a una entidad creada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP). El regidor, también portavoz de la Ejecutiva federal del PSOE, ha manifestado que Ca...
Las reacciones al nombramiento de Toni Cantó al frente de la Oficina del Español en Madrid han llegado a Valladolid. El alcalde de la ciudad, el socialista Óscar Puente, ha calificado al exdiputado de UPyD y Ciudadanos como “mierda y memo” por su incorporación a una entidad creada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP). El regidor, también portavoz de la Ejecutiva federal del PSOE, ha manifestado que Cantó va a “cobrar 75.000 euros por rascarse los huevos a dos manos”. La polémica entre el también exactor y el alcalde vallisoletano nació en febrero de 2020, cuando Cantó calificó de “nepotismo puro y duro” y enchufismo que la fiscal Sofía Puente, número dos de las oposiciones cuando se presentó en 1996 y hermana del socialista, fuese nombrada directora general de Seguridad Jurídica y Fe Pública. Entonces el primer edil de Valladolid no le respondió, si bien ha aprovechado la polémica actual para recordar ese episodio.
Óscar Puente ha cargado contra el sueldo público que va a tener Cantó, que finalmente no pudo concurrir en las listas del PP en las pasadas elecciones autonómicas madrileñas por no haberse empadronado a tiempo, y lo ha comparado con el salario que él recibe por su puesto. “Para aquellos a los que les parece mucho que un alcalde cobre 86.000 euros al año, con una ciudad a su cargo, 3.200 trabajadores y 360 millones de presupuesto, y no tener ni domingos ni fiestas de guardar, que piense que Toni Cantó va a cobrar 75.000 euros por rascarse los huevos a dos manos”, ha tuiteado exactamente. Puente ha acusado a Toni Cantó de preferir “seguir comiendo la sopa boba, que es a lo que se ha dedicado en política, además de a emponzoñar” en lugar de irse “a trabajar de lo suyo”, cosa que no hace porque no tiene “un gramito de vergüenza”.
El alcalde de Valladolid, que dirige el Ayuntamiento desde 2015 y fue reelegido en las elecciones de 2019, ha admitido que sus palabras suenan “fuertes” pero ha reivindicado la calidad del castellano que se habla en su ciudad, donde se dice que se utiliza mejor el idioma. “Y esto que suena fuerte es español de Valladolid. Del más puro y duro castellano. Del que se entiende clarito. A ver si lo protege desde el chiringuito que le han creado”, ha desafiado. Cantó, durante varias campañas electorales previas a su aproximación al PP, prometió que suprimiría esta clase de entidades. Asimismo, tuiteó sendos mensajes en los que agradecía la confianza de Ayuso para dirigir la Oficina del Español, aunque en ambas ocasiones cometió faltas de puntuación con el uso de las comas.
Sofía Puente tuiteó en la noche del miércoles, día en el que se conoció la nueva ocupación del exdiputado, que Cantó “se atrevió a opinar guiado por su necesidad constante de enmierdarlo todo” cuando la acusó de haber alcanzado la dirección de Seguridad Jurídica a instancias de su hermano, que tiene una buena relación personal con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. “Ha tuiteado sin piedad”, ha indicado, además de asegurar que “pensar bien antes que pensar mal exige grandeza”. Puente también ha sido fiscal delegada de Violencia contra la Mujer, directora del Centro de Estudios Jurídicos y vocal del Consejo Fiscal, puestos a los que accedió antes de que su hermano llegase al Consistorio.
Otras polémicas de Óscar Puente
El regidor vallisoletano ha protagonizado otros incidentes mediante declaraciones polémicas o mensajes críticos en Twitter. Las disputas más habituales las ha mantenido con el vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea (Ciudadanos), también proclive a esta clase de controversias. Los desencuentros comenzaron cuando Igea pactó con el PP en la comunidad, pese a haber coqueteado con el PSOE, y fue tildado de “Bambi” por parte de Puente, que le reprochó haber abandonado “una versión mesetaria de Braveheart [William Wallace, héroe escocés que vivió en la Edad Media]” cuando decidió firmar con el presidente, Alfonso Fernández Mañueco (PP). Igea directamente lo catalogó como “bufón”. En los meses posteriores han vivido varias tiranteces, como reuniones canceladas por la asistencia del político adversario, o acusaciones varias por la gestión de la pandemia y las restricciones, muy severas en la comunidad y que molestaron particularmente a Puente cuando las limitaciones se acentuaron poco antes de las fiestas patronales de Valladolid.
El alcalde también recibió una reprimenda del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León el año pasado, pues Puente tildó de “no ajustada a la ley” y “arbitraria” una sentencia que obligaba a su Consistorio a retirar una multa a una conductora que se saltó un semáforo en rojo. Entonces el regidor definió al juez como “reincidente” por pronunciamientos similares y señaló a la pareja del magistrado, asegurando que conocía bien el tema porque “le han caído tres multas”. El tribunal emitió un comunicado que indicaba que “la crítica de toda resolución judicial es legítima. La descalificación personal del juez o magistrado que la dicta no lo es bajo ningún concepto”.