La Guardia Civil desmantela en Ávila un gran taller clandestino de dobles fondos para ocultar droga en vehículos
En la operación se han detenido 26 personas, a los que se les imputa delitos de narcotráfico y blanqueo de capitales
La Guardia Civil ha desmantelado este jueves en Ávila un gran taller dedicado a la fabricación de dobles fondos para ocultar droga, compuesto por cuatro naves ubicadas en dos localidades de la provincia. La Operación Caletas se ha saldado con la detención de 26 personas, la mayoría de nacionalidad colombiana, a quienes se les imputa los delitos de tráfico de drogas, blanqueo de capitales, pertenencia a organización criminal y delito contra los trabajadores....
La Guardia Civil ha desmantelado este jueves en Ávila un gran taller dedicado a la fabricación de dobles fondos para ocultar droga, compuesto por cuatro naves ubicadas en dos localidades de la provincia. La Operación Caletas se ha saldado con la detención de 26 personas, la mayoría de nacionalidad colombiana, a quienes se les imputa los delitos de tráfico de drogas, blanqueo de capitales, pertenencia a organización criminal y delito contra los trabajadores. En la actuación han colaborado otros cuerpos policiales europeos y se han podido detectar más 90 vehículos en los que el taller desmantelado había construido los dobles fondos para transportar grandes cantidades de droga. Según el Instituto Armado, esta red constituye “el mayor taller clandestino” de estas características en España.
La organización contaba con cuatro locales, detallan fuentes de la Guardia Civil. Tres de ellos se ubicaban en la localidad de Casavieja (Ávila) y constituían un complejo compuesto por tres naves anejas, que los delincuentes habían ido adquiriendo sucesivamente conforme iban necesitando más espacio para sus actividades. La cuarta nave está en la localidad abulense de Piedralaves, a cinco kilómetros de Casavieja. Los dobles fondos, que en el argot policial se conoce como “caletas”, se practicaban en vehículos de España y de otros países europeos, como Francia, Bélgica, Alemania o Italia. De entre los 90 vehículos requisados, algunos habían sido ya intervenidos transportando diversas cantidades de droga.
Los ahora detenidos podían trabajar a la vez en más de 10 vehículos. Habían montado una verdadera infraestructura de cadena de montaje en el taller, con una espectacular inversión en grúas, compresores, cabinas, repuestos y tapicerías. Además, contaban con especialistas de varios oficios —electricistas, forjadores, soldadores, chapistas o tapiceros— que se encargaban de elaborar los dobles fondos para ocultar la droga. Estos trabajadores se encontraban en situación irregular y no estaban dados de alta en la Seguridad Social.
La Guardia Civil ha explicado que cada vehículo, en función de sus características, tenía una clase de caleta específica adaptada a ese modelo. Algunas de ellas de una sofisticación pocas veces vista, señala el Instituto Armado, con aperturas ocultas: unas mecánicas y otras combinadas con eléctricas e hidráulicas.
En la investigación de la Guardia Civil se ha detectado cómo estaban fabricando también todo tipo de muebles con dobles fondos, de características similares a las de los vehículos, con el fin de ocultar cualquier efecto.
Según ha explicado el subdelegado del Gobierno en Ávila, Arturo Barral, la operación “no solo va a tener consecuencias en España, sino en Europa”, tras desmantelar los dos complejos. ”El tráfico de drogas, que es el principal delito contra la salud pública, tiene como principal modo de transporte los vehículos, cuyos dobles fondos son denominados caletas en el argot policial”, ha señalado Barral. Además, ha informado de que todo el material intervenido ha quedado a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Arenas de San Pedro (Ávila) y que la investigación continúa abierta.
Además, el Seprona ha denunciado a los responsables del taller por carecer de autorización para el tratamiento irregular de residuos.