El PP ve injusto ahora el reparto de fondos especiales con los criterios aprobados por la UE
El Gobierno defiende que la distribución de esas ayudas a las autonomías para la covid-19 se ha efectuado con normas objetivas
La desconfianza es tal que el PP, tanto en su dirección nacional como en las autonomías, cuestiona cualquier iniciativa en la que intervenga el Gobierno central, aun en el caso de que, como sucede con el reparto de las vacunas o de los fondos especiales contra la crisis, el Ejecutivo aplique criterios europeos. El líder del PP, Pablo Casado, reclamó este miércoles “equidad, objetividad y justicia” y alertó del riesgo de “peronizar” —en alusión a las práctic...
La desconfianza es tal que el PP, tanto en su dirección nacional como en las autonomías, cuestiona cualquier iniciativa en la que intervenga el Gobierno central, aun en el caso de que, como sucede con el reparto de las vacunas o de los fondos especiales contra la crisis, el Ejecutivo aplique criterios europeos. El líder del PP, Pablo Casado, reclamó este miércoles “equidad, objetividad y justicia” y alertó del riesgo de “peronizar” —en alusión a las prácticas del peronismo— la distribución de las ayudas europeas. El Ministerio de Hacienda asegura que el reparto es “objetivo”, de acuerdo con un reglamento aprobado por las instituciones europeas.
El argumentario de la dirección nacional del PP se volcó de nuevo para finalizar el año, tras las exposiciones críticas avanzadas en días anteriores por varios de sus barones y dirigentes territoriales, contra el reparto territorial del fondo europeo especial REACT-UE, 10.000 millones de euros destinados a fortalecer el Estado del Bienestar y reactivar la economía.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, explicó el pasado lunes la asignación de esos recursos excepcionales en el Foro Extraordinario de Economía, ante varios cargos de su departamento y los directores de fondos europeos de las autonomías y de Ceuta y Melilla. En esa cita se indicaron las normas y objetivos de esas inversiones para combatir los efectos de esta crisis y diseñar “una recuperación verde, digital y resiliente”.
El martes, presidentes autonómicos del PP (desde Alberto Núñez Feijóo hasta Alfonso Fernández Mañueco o Isabel Díaz Ayuso) e incluso el vicepresidente andaluz, Juan Marín, de Ciudadanos, arremetieron contra lo que consideran un uso político de ese programa por parte de Pedro Sánchez. Estos dirigentes sostuvieron que el reparto beneficia a Cataluña, y Marín incluso acusó al Gobierno de “robar” 1.300 millones a Andalucía, que recibirá 1.881, el 18,8% del fondo total. Todos exigieron al Gobierno que explique los criterios seguidos para distribuir el fondo europeo.
Pablo Casado y la dirección del PP insistieron este miércoles en esa línea. Por un lado, demandaron otra vez “equidad y objetividad” tanto para la llegada de esos fondos y de las vacunas, que también se han proporcionado con criterios aprobados en la UE. Y, por otra parte, denunciaron que el Gobierno está intentando tapar sus errores con la “propaganda” en las vacunas y de los éxitos de las investigaciones en curso, que los dirigentes populares siempre atribuyen a la UE o a los ámbitos “público-privados”, personalizados en dirigentes de su entorno político como Ángela Merkel, Úrsula Von der Leyen o Christine Lagarde.
Madrid pide datos
La ministra Montero replicó ayer a esos reproches e indicó al PP y a sus barones que este nuevo fondo se ha dividido ahora “con criterios objetivos” fijados por la Comisión Europea como el nivel de paro, de riqueza o de caída del PIB. Y le recordó a la Comunidad de Madrid, cuyo consejero de Hacienda, Javier Fernández Lasquetty, le envió este miércoles una carta con las mismas reivindicaciones y exigencias de sus compañeros de partido, que en el anterior fondo covid de la UE que repartió 16.000 millones antes del verano a Madrid le llegó el 21%. “Y entonces no preguntó nada”, subrayó la ministra.
Lo que el consejero madrileño Javier Fernández Lasquetty demandó en su misiva a la ministra fue que enseñe y someta a discusión algunos datos para la ponderación del fondo, como el PIB de cada comunidad autónoma en el primer semestre de 2020. El Instituto Nacional de Estadística calcula esa cifra a año vencido, y en este caso se hace por estimación.
La ministra afeó al PP que ponga el acento y siga instalado en el “agravio, el frentismo y el combate territorial y en supuestos regalos y concesiones”. Montero apuntó que los populares han relegado su postura “clásica y tradicional” como formación articuladora de España junto al PSOE.
Los tres indicadores
El primer indicador para repartir los fondos REACT-UE mide el impacto de la pandemia en la riqueza de cada autonomía y tiene un peso equivalente a las 2/3 partes del total. Ahí se considera el peso de cada comunidad en la caída del PIB español entre el primer semestre de 2019 y el de 2020 con datos actualizados por AIREF y el INE. Esos datos se moderan sobre la prosperidad relativa de cada autonomía, según el PIB per cápita y estadísticas de Eurostat de 2018. El segundo índice toma el impacto de la crisis en el paro con un peso del 2/9 de la asignación. Y el tercero contempla el desempleo juvenil (1/9).