Los mejores organizadores de cables: bonitos y prácticos

Puede que en otro momento histórico los objetos que hemos elegido para esta comparativa no fuesen necesarios, pero en tiempo de decenas de aparatos y demás gadgets electrónicos en casa o la oficina, en tiempos de ordenadores, portátiles, móviles, tablets y pare de contar, una opción para organizar cables parece una necesidad obvia, por ejemplo, cajas cerradas y bonitas. Su función es simple: esconder los cables (que bonitos no son, menos cuando son muchos) y protegernos de tropezar o pisar en un descuido o de que nuestras mascotas o niños tengan acceso a enchufes o los propios cables.

¿Qué hemos tomado en cuenta para comparar estas cuatro cajas organizadoras de cables?

Hemos elegido cuatro modelos diferentes de cajas para organizar cables y las hemos probado en casa (donde se utiliza un ordenador, un calefactor, un cargador de móvil, una lámpara y un cargador de auriculares inalámbricos simultáneamente). Para elegir la ganadora hemos tomado en cuenta varias variables:

• Tamaño: ¿tiene la capacidad necesaria para suplir mis necesidades?
• Diseño: ¿es resistente? ¿es bonita?
• Facilidad de uso: ¿es fácil introducir o retirar los cables? ¿es cómoda de utilizar?

Caja organizadora de cables D-Line

Por qué la recomendamos: esta caja, en su versión pequeña, admite una regleta de hasta 280 milímetros (4 o 5 enchufes). Tiene un diseño funcional, discreto y gracias a su tamaño puede incluso ponerse sobre el escritorio sin que sea un problema o quite mucho espacio. Es blanca, de plástico duro pero ligero y cuenta con tres orificios (cada lado y centro) para organizar los cables como más cómodo sea.

Sus puntos débiles: al ser blanca puede ensuciarse con mayor facilidad y por su tamaño limita más la cantidad de cables que se pueden almacenar. El plástico, al ser duro pero fino de grosor, da la impresión de poder romperse o agrietarse si recibe algún golpe.

Caja organizadora de cables de Hama

Por qué la recomendamos: otra versión pequeña (24 x 12,29 x 11,99 centímetros) por lo que es muy cómoda para colocar en una mesa, escritorio de trabajo o para colocar a la vista sin que moleste en el espacio. Está elaborada en plástico duro y blanco, con un diseño sobrio y discreto. Cuenta con dos orificios por los que pasar los cables y abre y cierra con facilidad. Además, tiene refuerzo de goma en las esquinas inferiores para que se mantenga más aferrada al suelo. En relación calidad-precio está bastante bien para lo que ofrece.

Sus puntos débiles: es la más pequeña de todas las que probamos (solo regletas de hasta tres enchufes), por lo que tiene menos capacidad (si tienes que guardar muchos cables no es la opción más adecuada). Y al ser blanca tiene la misma desventaja que la anterior.

Caja organizadora de cables de Nature Supplies

Por qué la recomendamos: este modelo incluye dos cajas, una para escritorio o mesa (23,5 x 12 x 12 centímetros) y otra más grande para el suelo (40 x 16 x 13 centímetros). El diseño es realmente bonito, con una base blanca con aperturas a los lados y en el medio y una tapa rústica de madera de pino. La caja más grande puede almacenar regletas de más de 12 enchufes y la pequeña de cuatro o cinco. Este modelo incluye, además, pinzas para sujetar los cables a la caja (pequeños círculos abultados en los enganchar y pegar a la superficie), tiras de velcro para agrupar cables pequeños y una amplia banda con velcro para agrupar los más grandes.

Sus puntos débiles: puede ser cara y menos práctica si no tienes tantos cables en casa como para necesitar la versión grande, que puede ser muy voluminosa.

Caja gestionadora de cables de NtonPower

Por qué la recomendamos: esta versión es un tamaño medio bastante práctico (28 x 10,5 x 12 centímetros) y cuenta con ventajas como una tapa con un borde cóncavo en el que se puede encajar el móvil o la tablet mientras se cargan, sin peligro de que se caigan que, además, tiene orificios para cables para más comodidad. Tiene dos aperturas laterales y una central. Además, la caja cuenta con ranuras en la parte inferior, lo que asegura que el cableado no haya peligro de recalentamiento de las regletas o cables que estén dentro. Es de plástico, sólido y con apariencia bastante resistente.

Sus puntos débiles: al ser mediana puede ser muy grande para poner en tu mesa y muy pequeña si requieres más almacenamiento. Es también la de diseño menos atractivo de las cuatro que comparamos.

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*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 29 de octubre de 2024.

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