25 años de surf en Galicia

El surf está conociendo una vastísima implantación en las costas españolas, que contrasta con el erial imperante hace cinco lustros, cuando Alejandro Vázquez (propietario) y Fabián Rubio (director técnico) decidieron abrir el primer albergue surfista de España y uno de los pioneros en Europa, el Raz Surf Camp (www.razsurfcamp.com). Además, pusieron en el mapa el playón de Razo (Carballo, A Coruña), actualmente una meca del surf peninsular. Un arenal atlántico infinito...

El surf está conociendo una vastísima implantación en las costas españolas, que contrasta con el erial imperante hace cinco lustros, cuando Alejandro Vázquez (propietario) y Fabián Rubio (director técnico) decidieron abrir el primer albergue surfista de España y uno de los pioneros en Europa, el Raz Surf Camp (www.razsurfcamp.com). Además, pusieron en el mapa el playón de Razo (Carballo, A Coruña), actualmente una meca del surf peninsular. Un arenal atlántico infinito con el oleaje perfecto para el aprendizaje. Y con una amplitud de la que carecen otros arenales del norte en los que encontrar espacio para la tabla roza lo imposible.

En los dos edificios del albergue, dotado con mini-ramp (pista de skate), se vive como en ningún sitio el ambiente de la ola. El más moderno está revestido en madera y su jardín tiene salida directa a la arena, semejante a un resort. Resort, eso sí, equipado con literas. Tampoco decepciona el equipo técnico: muchos de los que pasaron como alumnos hoy trabajan como monitores. Las clases se graban para corregir las malas prácticas y se organizan talleres musicales, con posterior jam session por parte de los alumnos, cuando no de meteorología o de sensibilización medioambiental.

Muchos son los surfcamps que han buscado mirarse en esta empresa pequeña y familiar, que tiene detalles con sus clientes como, por ejemplo, el vídeo que se llevan de recuerdo (incluido en el precio). Los acompañantes ajenos al surf acuden a las cercanas dunas de Baldaio, interesantes para el naturismo, o al mirador de Santa Elena y la laguna de Baldaio y su avifauna. Y una pista: el restaurante A Cunca (www.acunca.com).