Estilo borgoñón
Alta Pavina Citius 2009, un tinto vallisoletano de pinot noir que alcanza la excelencia con la añada de 2009
La empresa GWS (Great Wines from Spain) sigue empeñada en demostrar que la gloriosa pinot noir, que en Borgoña da origen a algunos de los mejores y más caros vinos del mundo, puede comportarse en tierras vallisoletanas como en los viñedos franceses. A tal empeño han dedicado lo mejor de sus 12 hectáreas de viñedo, ubicado en pleno páramo castellano, pero a casi 900 metros de altitud sobre la ribera del río Duero, donde el clima continental se refresca y suaviza, propiciando la adecuada y lenta maduración de esta cepa delicada y esquiva como pocas.
Hasta ahora, los resultados eran alenta...
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La empresa GWS (Great Wines from Spain) sigue empeñada en demostrar que la gloriosa pinot noir, que en Borgoña da origen a algunos de los mejores y más caros vinos del mundo, puede comportarse en tierras vallisoletanas como en los viñedos franceses. A tal empeño han dedicado lo mejor de sus 12 hectáreas de viñedo, ubicado en pleno páramo castellano, pero a casi 900 metros de altitud sobre la ribera del río Duero, donde el clima continental se refresca y suaviza, propiciando la adecuada y lenta maduración de esta cepa delicada y esquiva como pocas.
ALTA PAVINA CITIUS 2009
- Bodega: GWS. La Parrilla (Valladolid).
- Teléfono: 983 68 15 21.
- Internet: www.altapavina.es.
- VT: Castilla y León.
- Tipo: tinto crianza, 14,5%.
- Cepas: pinot noir.
- Precio: 26 euros.
- Puntuación: 9,1/10.
Hasta ahora, los resultados eran alentadores, pero el salto se ha producido con la añada 2009, de excelente calidad, y gracias al asesoramiento del experto ingeniero agrónomo y microbiólogo Claude Bourguignon, un genio a la hora de interpretar el terruño.
Su impronta se nota en este Citius, elaborado por la enóloga Patricia Díez. Reafirma su estilo borgoñón sin despojarse del carácter hispano y su contundencia: mayor severidad aromática en detrimento de los encantos florales de la uva. Pese a ello, el registro original de este terruño se expresa en su elegante aroma a pequeños frutos rojos acompañados por notas ahumadas del roble y frescos aires balsámicos. Goloso, estructurado, de especiada acidez, acaricia su textura sedosa que termina en baño frutal.