¡Feliz año nuevo, feliz 2020, o feliz 20 20!

Podría quedarme con este deseo o añadir una petición para que me lo conceda. Opto por esto. Quisiera felicitar el siglo de vida de los años veinte, los felices 20, o hasta los locos años 20. No seamos ingratos, son los de París, del charlestón, del canotier, de las sonrisas, de pensar en construir en futuro, del jazz; todo producto de la necesidad de olvidar la Gran Guerra, la I Guerra Mundial, de reconstruir, de coser heridas. Años del art déco, de la moda y el glamour, del cine sonoro, de los perfumes, del surreali...

Podría quedarme con este deseo o añadir una petición para que me lo conceda. Opto por esto. Quisiera felicitar el siglo de vida de los años veinte, los felices 20, o hasta los locos años 20. No seamos ingratos, son los de París, del charlestón, del canotier, de las sonrisas, de pensar en construir en futuro, del jazz; todo producto de la necesidad de olvidar la Gran Guerra, la I Guerra Mundial, de reconstruir, de coser heridas. Años del art déco, de la moda y el glamour, del cine sonoro, de los perfumes, del surrealismo, del cubismo, de la Bauhaus, de la Metro-Goldwyn-Mayer, de la belle époque, de la penicilina de Fleming, de la generación del 27, de Charlot. Ojalá cuando llegue 2030 hayamos vivido una época de felicidad igual, aunque para ello no puede traernos, como entonces, el fascismo ni el comunismo, ni el populismo me permito añadir. Brindo por ello, recordando aquello con nostalgia.

Dionisio Rodríguez Castro. Villaviciosa de Odón (Madrid)