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Las catástrofes en la era del móvil

Apps , mensajería sin cobertura telefónica, información oficial al instante, mapas colaborativos... La tecnología puede ayudar a salvar vidas en huracanes y terremotos

La imagen pertenece al barrio de Treme en Nueva Orleans, punto neurálgico del jazz y de la cultura afroamericana devastado tras el paso del huracán Katrina en 2005. Han transcurrido poco más de doce años desde esta catástrofe que se llevó la vida de al menos 1.200 personas (según el Centro Nacional de Huracanes de EE UU). Sin embargo, nuestra forma de movernos, de informarnos y de comunicarnos ha cambiado drásticamente. Los medios de comunicación tradicionales y la mensajería de texto fueron los canales informativos principales para los afectados en este desastre natural. La prensa en internet cobró un protagonismo mayor con este suceso pero muy alejado del actual. Facebook era apenas un proyecto recién nacido y Twitter se fundó un año después.Rick Wilking/Reuters
Esta fotografía pertenece a Arcadia, ciudad de Florida tras el huracán Irma el pasado 12 de septiembre. La semana pasada, México tembló por segunda vez en este mes. El último terremoto, el día 19, se ha cobrado, por el momento, la vida de más de 320 personas. Sin embargo, en ambos lugares la tecnología ha jugado un papel esencial. Muy diferente al Katrina, en donde, cuenta Yolanda Monge, periodista de EL PAÍS que cubrió este desastre, "tenía que ir a un internet café, también lavandería, para poder enviar la crónica" porque era de los pocos sitios con conexión. Las instituciones han informado de lo sucedido a través de redes sociales, así como los propios afectados. Además, se han creado aplicaciones exclusivas que ayudan en estos sucesos.Getty
Plataformas como Facebook, Twitter o Instagram han servido para que instituciones y gobiernos proporcionasen información veraz de lo acaecido de forma instantánea en los últimos desastres. También advertencias, consejos y ubicaciones de albergues disponibles. Los usuarios, en México, utilizaron estos canales bajo el hashtag (etiqueta) #Sismo para canalizar la ayuda humanitaria e informar de las necesidades de cada zona. Aunque también para difundir rumores falsos como previsiones de nuevos temblores. Por ello, es importante verificar los avisos en los perfiles de cuentas oficiales.

Mediante la función Safety Check, Facebook detecta la ubicación de sus usuarios cuando ocurre algún tipo de catástrofe y, a los que se encuentran cerca, se les pregunta si están a salvo. Una vez lo confirman, se notifica a todos sus contactos. Safety Check fue desarrollada tras el terremoto de Japón en el año 2011 y ha sido activada en varias ocasiones. La última en México. También en este terremoto, Google activó su localizador de personas. Esta herramienta permite que cualquiera, incluso el afectado, comparta datos útiles, como su nombre, ubicación o fotografías, que faciliten su localización o de otras personas de las que se tiene información. Hay alrededor de 25.600 registros de este último desastre. "Las familias deben tener un plan de emergencia, el cual especifique cómo se van a comunicar entre ellos en caso de catástrofe. Qué aplicación o red social utilizarían", dice vía telefónica Daniel Llargués, portavoz de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias de EE UU (FEMA).

Facebook

OpenStreetMap, proyecto dedicado a realizar mapas editables y colaborativos, ha trabajado en México para informar sobre las zonas y barrios más afectados por el seísmo. Son los propios ciudadanos los que han incluido estas informaciones, facilitando la logística y el trabajo de los equipos de rescate. En la misma línea, el Sistema Nacional de Protección Civil mexicano creó un mapa en Google Maps para que los ciudadanos añadieran los edificios que habían sufrido un derrumbe. "El big data permite que se conozcan los daños de un terremoto antes de que las imágenes satelitales puedan ser procesadas", asegura por correo electrónico Muralee Thummarukudy, gerente de operaciones y manejo de desastres del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.

La empresa de Elon Musk, Tesla, aumentó gratuitamente la autonomía de las baterías un 20% de sus modelos Model S/X 60/60D para que los usuarios de estos vehículos eléctricos pudieran escapar del huracán Irma. Se realizó mediante un actualización de software, es decir, los conductores se encontraron con este cambio de forma automática. AirBnB activó su programa de respuesta de desastres en México. La compañía permite, desde el pasado día 19, la publicación de inmuebles sin coste para el anfitrión o los huéspedes con el objetivo de que afectados y voluntarios tengan un lugar donde dormir. Además, Uber, Cabify y los taxistas ofrecieron traslados gratis a centros de abastecimiento de víveres, hospitales y albergues.

Tesla

La Cruz Roja Mexicana lanzó hace dos años Primeros Auxilios, una aplicación para saber qué hacer en caso de accidente, enfermedad o desastre natural. En ella se incluyen varias animaciones y contenido audiovisual con explicaciones y consejos para que el usuario disponga de la máxima información ante una de estas adversas situaciones. Más enfocada en terremotos, la Cruz Roja Americana creó otra con especificaciones para saber cómo actuar, durante y después de un temblor sísmico, sin necesidad de tener conexión a internet. Además envía una notificación cuando tiene lugar un terremoto, ubica los refugios abiertos en la zona del afectado y permite al usuario enviar un mensaje con el texto "estoy a salvo" a través de Facebook, Twitter, correo electrónico o mensaje de texto. La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) de Estados Unidos también cuenta con una aplicación muy similar. "Recomiendo realizar fotografías de los documentos importantes, como los pasaportes de los miembros de la familia, y subirlas a la nube. Es esencial disponer siempre de un comprobante que indique quién eres", dice por teléfono su portavoz Daniel Llargués.

Gasbuddy, aplicación que muestra las estaciones con la gasolina más barata, tuvo otra finalidad en los días previos al huracán Irma. Los carteles de "no hay combustible" se repetían en varias gasolineras y eso provocó situaciones de tensión entre los conductores. La compañía habilitó un mapa interactivo que permitía visualizar las estaciones abiertas que continuaban proporcionando gasolina. También la aplicación Waze, una red social para conductores, fue muy útil en este desastre. Los usuarios ofrecieron información actualizada sobre el tráfico y el estado de las carreteras.

Getty

Con cobertura en diez estados mexicanos además de en la capital, la aplicación SkyAlert, que funciona con sensores propios, detecta los movimientos sísmicos y envía notificaciones a los terminales móviles. Estas informan sobre el lugar en donde ha tenido lugar el terremoto y su intensidad. Este tipo de catástrofes son impredecibles, pero según afirma la empresa en su página web "una vez que se inician en el epicentro, con esta aplicación es posible alertar hasta 120 segundos antes de que lleguen a otras poblaciones". Para darse de alta es necesario suscribirse con un pago anual de 3,74 euros (79 pesos).

Zello se trata de una aplicación gratuita que permite intercambiar mensajes voz (similar un walkie-talkie) dentro de un radio limitado y crear salas con varios participantes (parecidas a los grupos de WhatsApp). El audio se envía pulsando la pantalla y los datos se transmiten a través de internet o de wifi. El Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Calidad del Estado de México (C5) ha creado un canal en esta aplicación bajo el nombre de Alerta C5 CDMX con el objetivo de que los ciudadanos tengan un contacto directo para reportar emergencias que puedan surgir tras los daños del terremoto.

Después de un terremoto o un huracán la conexión a internet suele presentar problemas, tal y como sucedió recientemente en Ciudad de México. Además, Protección Civil solicitó, tras el temblor, no saturar la red y utilizarla solo para casos de emergencia. Este es uno de los motivos de la creación de la aplicación Bridgefy, que permite enviar mensajes a personas que están a 100 metros o menos a través de Bluetooth. No es necesario que el usuario los tenga en la lista de contactos, pues con el modo público es posible comunicarse con cualquiera que se encuentre en esa distancia. Asimismo, se puede ampliar el rango creando una cadena. Es decir, utilizar intermediarios para contactar con una persona que se encuentra más alejada. Según la compañía, "en los tres días posteriores al temblor, 90.000 personas descargaron la app, principalmente de México y Estados Unidos".

Bridgefy