Masturbación, Internet y 'Stranger Things': el nuevo corto que interpreta Natalia Dyer

Las mujeres también se masturban. Aunque para muchos sea un tema tabú, las mujeres también participan del descubrimiento del propio cuerpo y de la sexualidad más íntima. Esto es lo que quiere decir Karen Maine, la directora del corto Yes, God, Yes. Su protagonista no es otra que Natalia Dyer, conocida ya por su participación en Stranger Things. El marco es el de los años 80, con un Internet recién aterrizado en los hogares y que abre los brazos a una amplitud de posibilidades, hasta convertirs...

Las mujeres también se masturban. Aunque para muchos sea un tema tabú, las mujeres también participan del descubrimiento del propio cuerpo y de la sexualidad más íntima. Esto es lo que quiere decir Karen Maine, la directora del corto Yes, God, Yes. Su protagonista no es otra que Natalia Dyer, conocida ya por su participación en Stranger Things. El marco es el de los años 80, con un Internet recién aterrizado en los hogares y que abre los brazos a una amplitud de posibilidades, hasta convertirse en una herramienta que se borra las fronteras de pecado y conciencia, que escapa de la tradición y remodela la concepción del sexo.

Maine cuenta que nunca le confesó a sus amigas que se masturbaba simplemente por el hecho de que nunca les había oído hablar de ello, que aquello le hacía sentirse avergonzada. Como directora quería expresar la inseguridad que le produjo enfrentarse a la sexualidad habiéndose criado en un ambiente extremadamente católico. Así es como Yes God Yes pretende representar aquellos primeros mensajes a través de un chat, el enfrentamiento con unas imágenes que impactan a quien sólo ha visto otro cuerpo en los libros de biología, la primera sensación de cosquilleo por debajo de la falda. Un corto con el que quiere establecer un nexo de unión, una reconciliación, de una mujer con su sexo. Representar “a una joven mujer que llegara al despertar sexual por cuenta propia a través de su propia exploración de su propio cuerpo”, dice.

Huyendo del romanticismo, una mujer también puede disfrutar de su propia carne. Decía Aleixandre que “la piel siempre será la piel”, y es cierto. Piel, roce, fuego, vuelo. Cierra los ojos. Gemido. Yes, God, yes.