080 Barcelona: diversidad y riesgo

Así vivimos las dos jornadas finales de la pasarela catalana

Torras presentó una colección de inspiración militar en son de paz y ofreció un amplio repertorio de colores que dejaron claro el riesgo y las ganas de experimentar que hay en la moda de hombre.

La diversidad marcó la tercera y cuarta jornada de la pasarela 080 de Barcelona. Krizia Robustella, una de las firmas más veteranas y consistentes del calendario, hizo desfilar a las modelos en un cementerio de cómic. Siempre fiel a su estilo, Robustella nunca deja de sorprender. Las colaboraciones le permiten explicar lo mismo una y otra vez pero bajo nuevos puntos de vista. En esta ocasión los estampados, en formato XXL, los firma el ilustrador Marcos Cabrera que llenó con sus zombis camisetas, sudaderas y pantalones de chándal. Robustella hizo ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La diversidad marcó la tercera y cuarta jornada de la pasarela 080 de Barcelona. Krizia Robustella, una de las firmas más veteranas y consistentes del calendario, hizo desfilar a las modelos en un cementerio de cómic. Siempre fiel a su estilo, Robustella nunca deja de sorprender. Las colaboraciones le permiten explicar lo mismo una y otra vez pero bajo nuevos puntos de vista. En esta ocasión los estampados, en formato XXL, los firma el ilustrador Marcos Cabrera que llenó con sus zombis camisetas, sudaderas y pantalones de chándal. Robustella hizo dialogar la contundencia gráfica de los dibujos de Cabrera con tejidos suaves y delicados como el terciopelo, el pelo y el mohair. si algo llamó la atención fueron los abrigos con pelo: “Nunca había hecho abrigos con solapa. A veces me gusta hacer prendas más formales para contrarrestar”, así como las chaquetas de pelo multicolor reversibles. Con su propia aproximación al “lo veo, lo quiero”, la colección se podrá adquirir de forma anticipada a través de una venta especial que durará dos semanas a partir de hoy.

La firma Aubergin mostró prendas de carácter atemporal en las que el punto hecho a mano y los estampados propios se convierten en el símbolo de distinción.

Tras la explosión de color y subcultura de Krizia, llegó la propuesta de Pablo Erroz, un nombre que promete. Erroz, el fichaje encargado de darle nuevos aires a Caramelo, vio como su primera colección para la firma se quedó sin salir a la calle después de que anunciara su cierre en octubre. A pesar de ello no ha dejado de lado su propia marca y en esta nueva entrega ha ratificado el talento que tiene para aterrizar las tendencias internacionales en prendas llevables y apetecibles. Con “Panorama” mira al futuro y celebra a los raros con piezas de corte clásico a las que añade pequeños giros. El trench, el gabán y la americana de toda la vida, impecables en su corte y silueta, se actualizan con nuevos materiales o gráficos termo-impresos y ratifican que su fuerte con las prendas exteriores: “No todo el mundo las hace, así que se ha convertido en el símbolo diferenciador de la marca”. Por primera vez la colección incluía muchos más conjuntos masculinos: “La prensa siempre me dice que es mejor lo de hombre que lo de mujer” explicaba. Parece que Erroz, además de ser un buen creativo, sabe escuchar.

Por la tarde le llegó el turno a Antonio Miró sin Antonio Miró, el fundador, que se ha llevado el premio a la mejor colección de la Generalitat de Catalunya. Ahora es Albert Villagrasa el encargado de mantener en vida a una de las marcas más míticas de la ciudad condal. Con el ambicioso proyecto de poner al día el vestuario de la comunidad menonita - ¿sería eso una especie de indirecta con retranca a su ex director creativo, tan amante de la austeridad y el menos es más? - introdujo tachuelas en los cuellos de camisa y bordados a las cazadoras en un gesto que alejó la propuesta de los códigos de la firma. Bombers con flores bordadas y trajes chaquetas con ribetes dorados hacían pensar que están buscando conectar con públicos más jóvenes dejando atrás las sutilezas a las que Miró nos tenía acostumbrados.

Durante la 080 Krizia Robustella hizo desfilar a los modelos en un cementerio de cómic.

Paradojas de la moda, mientras en Antonio Miró echaron mano de las tendencias del momento, al día siguiente, el debut de Aubergin y Daniel Rosa proclamaban precisamente lo contrario: el retorno a las prendas esenciales. Las dos marcas coincidieron también en su apuesta por la sostenibilidad. Nevean Holmes y Anna Uimonen de Aubergin, una marca fundada en Mallorca en 2014, mostraron prendas de carácter atemporal en las que el punto hecho a mano y los estampados propios se convierten en el símbolo de distinción: “Huimos del fast fashion, queremos hacer prendas que duren en el tiempo”. Producción local y control en el origen de los tejidos es el primer paso para hacer de esta firma un ejemplo de buenas prácticas. Por su parte, Daniel Rosa pasó más que con nota su debut en la pasarela, teniendo en cuenta que prácticamente acaba de salir de la escuela. Eso le ha valido el premio a la mejor colección emergente gracias a su equilibro entre la creatividad y lo comercial. Las chaquetas oversize, los pantalones rematados con orillos y los complementos dieron personalidad a la propuesta de Rosa: “Las prendas exteriores y los complementos son las cosas con las que más disfruto”. El diseñador que también tiene sensibilidad sostenible, apuesta por moda kilómetro 0.

Al mediodía Torras ofrecía una dosis de realidad. Esta firma catalana tiene una gran solidez empresarial: actualmente cuenta con puntos de venta en más de 40 países y exporta el 70% de su producción, presentó una colección de inspiración militar en son de paz. Prendas de excelente factura en las que la marca intentó integrar los tres tipos de cliente con los que cuenta: alto, medio-alto y medio. A pesar de su clara vocación comercial, la marca mostró un amplio repertorio de colores que muestra que el riesgo y las ganas de experimentar que hay en la moda de hombre: “Tiene un gran potencial. Yo creo que ahora el hombre le está robando un poco a la moda de mujer y vamos a por ellos”, explico su responsable de diseño. Y por la noche, llegó la bofetada de Brain&Beast. Con una hipnótica puesta en escena que recreaba un club y sus habituales, Ángel Vilda hizo sonar su Playback para digerir una colección de prendas únicas que pondrá a la venta durante quince días en la Hell Gallery (Calle Cendra 8 bis de Barcelona). Sudaderas con mensajes, americanas de cuadros y tejanos gigantes que integraban muy lejos de los cliches influencias de la indumentaria oriental contenían tanto humor como rabia. Al final del desfile apareció Vilda de negro total: “Así estoy, negro”, explicaba después. Cansado de la dificultad de hacer moda de autor en España, Vilda prueba esta nueva fórmula de las piezas únicas: “Quien quiera tenerlas, que las pague” y no descarta desfilar fuera.

Con el desfile de Brain&Beast llegó el turno de las sudaderas con mensajes, americanas de cuadros y tejanos gigantes.

La ropa interior con etiqueta Made in Spain han cerrado las propuestas para hombre. El primer desfile de la firma ES Collection, ha sido, en palabras de Miquel Rodríguez, director de la 080 y gerente del Consorci de Comerç, Artesania i Moda de Catalunya (CCAM), la gran apuesta para la moda masculina de esta edición. Piezas de ropa interior y baño se han combinado con diseños que explotan el potencial del athleisure. A continuación, Punto Blanco, que ha congregado un nutrido grupo de Instagramers, ha interpretado su moda íntima de toda la vida en clave zen y comfy, distanciándose así de ES Collection.

La variedad de propuestas, tanto por estilo como por planteamientos de negocio y aproximación a la moda, ha terminado convirtiéndose en una seña de identidad para Barcelona 080.

Archivado En