Los ‘manolos’ se digitalizan

Para los devotos de Manolo Blahnik, visitar alguna de sus tiendas es poco menos que una peregrinación. Por muchos puntos de venta que abra el zapatero, sus boutiques mantienen un aire de rincón secreto accesible a solo unos pocos. Ha sido así desde que el canario inauguró su primer comercio en el barrio londinense de Chelsea hace ya 44 años. Ese también es el caso de la empresa. Blahnik no ha cedido frente a los grandes conglomerados de moda y continúa siendo una marca independiente y relativamente pequeña. A sus 73 años vis...

Para los devotos de Manolo Blahnik, visitar alguna de sus tiendas es poco menos que una peregrinación. Por muchos puntos de venta que abra el zapatero, sus boutiques mantienen un aire de rincón secreto accesible a solo unos pocos. Ha sido así desde que el canario inauguró su primer comercio en el barrio londinense de Chelsea hace ya 44 años. Ese también es el caso de la empresa. Blahnik no ha cedido frente a los grandes conglomerados de moda y continúa siendo una marca independiente y relativamente pequeña. A sus 73 años visita personalmente los talleres y continúa diseñando cada uno de los zapatos. Y, sin embargo, para mantenerse a flote en la industria es necesario adaptarse a los tiempos y crecer.

El zapatero prodigioso acaba de lanzar su primera tienda online, en colaboración con Farfetch. De esta manera, la web de moda multimarca inaugura su nueva división Black & White, que proporciona presencia digital y soluciones de comercio electrónico a firmas de lujo. Por su parte Blahnik, uno de los últimos defensores de lo artesano en la moda, entra de lleno en el siglo XXI y digitaliza su tienda. Ahora clientes podrán acceder a los mismos manolos que se venden en las boutiques físicas de la marca sin necesidad de viajar. “No lo vemos como una operación comercial, si no como una página dedicada a mostrar la profunda creatividad de Manolo en el medio digital”, ha declarado Kristina, la sobrina de Blahnik y CEO de la firma.

Blahnik, nacido en una platanera de Santa Cruz de la Palma, está considerado el mejor diseñador de calzado del mundo. Sus elegantes zapatos eran artículos de culto minoritario hasta que la serie televisiva Sexo en Nueva York hizo que el público masivo supiese lo que eran unos ‘manolos’. En uno de los episodios más famosos se ve como la protagonista Carrie Bradshaw pierde los suyos a manos de un atracador.

Ese pico de popularidad pilló por sorpresa al diseñador, pero la nueva expansión de su marca, no. Este año ha abierto su segunda tienda en Londres, ha lanzado una línea de bolsos y es el objeto de un nuevo documental. El colofón es una colaboración con Rihanna, la artista más rentable para las marcas. Su encuentro ha dado como fruto una colección cápsula de tirada extremadamente limitada, con el denim como material protagonista y bordados en pedrería inspirados en los tatuajes de la cantante de Barbados. Según Rihanna algunos diseños son tan deseables que pueden llegar a ser peligrosos. En concreto las botas altas. “Son problemáticas”, dijo la estrella pop al Vogue británico “Pueden hacer que te secuestren”. La colaboración se pondrá a la venta el 5 de mayo en las tiendas de Blahnik en Londres, Hong Kong y Nueva York.