El muestrario
Las claves de la industria de la moda de la última semana
La eterna niña Disney y ex de Justin Bieber hace tiempo que dejó claro que ya no era un ídolo para adolescentes. Lo hizo, además, por la puerta grande interpretando uno de los papeles protagonistas en la polémica (y muy adulta) película Spring Breakers. Ahora, acaba de lanzar el videoclip Hands to Myself, en el que se le ve en escenas bastante tórridas junto a un modelo. Para la ocasión, y aprovechando los millones de vistas en YouTube que se auguran para el clip, Armani ha decidido patrocinarlo.
Tras ...
Selena Gomez se hace mayor
La eterna niña Disney y ex de Justin Bieber hace tiempo que dejó claro que ya no era un ídolo para adolescentes. Lo hizo, además, por la puerta grande interpretando uno de los papeles protagonistas en la polémica (y muy adulta) película Spring Breakers. Ahora, acaba de lanzar el videoclip Hands to Myself, en el que se le ve en escenas bastante tórridas junto a un modelo. Para la ocasión, y aprovechando los millones de vistas en YouTube que se auguran para el clip, Armani ha decidido patrocinarlo.
Chanel se rinde a la evidencia
Tras años negándose a vender sus productos vía Internet, y viendo como otros competidores de la talla de Hermés o Dior iban cayendo en ‘las redes’ poco a poco, la maison francesa ha decidido adentrase en el comercio online. Eso sí nada de vender sus famosas chaquetas ni, por supuesto, esos vestidos tan artesanales como extravagantes marca Lagerfeld. Por ahora, los internautas solo podrán comprar su última colección de gafas de sol cuajadas de las icónicas perlas de la casa y que tiene como imagen a Lily Rose Depp.
Tommy Hilfiger, un club privado
“Hace un año, fui a Miami a la feria Art Basel y acabé comprándome un hotel”, Tommy Hilfiger habla del Raleigh, un suntuoso edificio de estilo art decó que adquirió en 2014 por unos 50 millones de euros. Tras varios rumores sobre su puesta a la venta, el diseñador y empresario ha confirmado que no se deshará del edificio; todo lo contrario: aprovechará su arquitectura de principios del siglo XX para reconvertirlo en un club privado, similar a aquellos elitistas salones que frecuentaba la aristocracia parisina en la época de las vanguardias.