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Dejar la ciudad para guiar rebaños

La Escuela de Pastores de Cataluña ha formado a más de 80 personas. El 64% continúa en la ganadería y el 7% aún busca introducirse en el sector

Barcelona - 04 sept 2015 - 00:07CEST

Flaujat se dedica a la ganadería y al adiestramiento de perros pastores desde hace 24 años pese a haberse graduado como ingeniero en telecomunicaciones. Ganó su primera oveja en un sorteo y su primer cachorro se lo robó a una perra que acababa de parir. Desde entonces, ha llegado a tener 450 ejemplares de ganado ovino. Durante los veranos, pastorea sus ovejas y las de otros cuatro rebaños en la Serra de Tudela.JAVIER MARTÍN

Anna Plana trabajó en un peluquería, un pub y una floristería antes de que su entonces novio la convenciera de asistir a la Escuela de Pastores en 2010. Hizo sus prácticas en Llessui (Lleida), lo que significó la ruptura de la pareja pero el comienzo de un nuevo estilo de vida. Su tutor le ayudó a encontrar tierras en la zona y todavía le asesora cuando tiene problemas con su rebaño de 300 cabras y ovejas.JAVIER MARTÍN

Existen cinco escuelas de pastores en España, algunas son una iniciativa pública y otras, privada, como la de Cataluña. La responsable de esta última, Vanessa Freixa, lamenta que el centro no cuente con ayudas fijas, sino que cada año deba "empezar desde cero" a buscar financiación. El precio de la matrícula asciende a 500 euros, además de una fianza de 300, pero incluye la comida y el alojamiento en un refugio en Montenartró, una pequeña localidad de Lleida.GIANLUCA BATTISTA

Santi Serra está en busca de tierra para tener un corral de cabras propio. Quiere dedicarse junto a un amigo a la elaboración de queso, una actividad que aprendió en la escuela y que refuerza durante sus prácticas en una casa de 'pagés' en el Parque Natural de Montseny, en Barcelona.GIANLUCA BATTISTA

Jordi Olle y Silvia Luis son los tutores de Serra, a quien acogen en su explotación. Él cuida y ordeña a su centenar de cabras mientras ella se encarga de la quesería. "Hoy nadie vive de 100 cabras, hay que orientarse hacia la producción. No somos queseros, somos campesinos, pero esta actividad nos sirve para no tener que abandonar la tierra", asegura Olle.GIANLUCA BATTISTA

Tras un mes de clases teóricas en marzo, los alumnos pueden comenzar sus cuatro meses de prácticas a partir de abril. La mayoría se decanta por explotaciones, como Serra. Pocos se atreven a hacerlas en la montaña. En Cataluña hay alrededor de una decena de pastores de montaña, según datos de la escuela. Los salarios oscilan entre los 2.000 y los 3.000 euros al mes.GIANLUCA BATTISTA

La escuela orienta a los estudiantes hacia qué área dedicarse: el comercio de carne o la elaboración de productos como el queso. La mayoría opta por empezar criando cabras porque resulta más rentable a corto plazo.GIANLUCA BATTISTA