Política migratoria errónea
La sociedad se horroriza al comprobar los resultados que provoca el rechazo de inmigrantes desesperados. Es un drama humano que, a fuerza de repetirse, corre el riesgo de banalización. Lo grave es que tampoco parece que la Unión Europea disponga de mucha mayor materia gris que la que blinda la frontera con cuchillas o devuelve a los supervivientes vulnerando el derecho internacional.
Me pregunto perplejo si a nadie se le ha podido ocurrir que, en lugar de reforzar una muralla inútil ante millones de desesperados africanos con estrategias bélicas, no sería más humano, útil e incluso eco...
La sociedad se horroriza al comprobar los resultados que provoca el rechazo de inmigrantes desesperados. Es un drama humano que, a fuerza de repetirse, corre el riesgo de banalización. Lo grave es que tampoco parece que la Unión Europea disponga de mucha mayor materia gris que la que blinda la frontera con cuchillas o devuelve a los supervivientes vulnerando el derecho internacional.
Me pregunto perplejo si a nadie se le ha podido ocurrir que, en lugar de reforzar una muralla inútil ante millones de desesperados africanos con estrategias bélicas, no sería más humano, útil e incluso económico a corto y largo plazo la estrategia de ayuda in situ.
Bastaría con dotar un fondo europeo suficiente para ayudar a estos pueblos en su desarrollo local, pasando por encima de esas dádivas que solo aprovechan los Gobiernos corruptos sin que nada llegue a sus ciudadanos. Formación profesional e infraestructuras productivas bien localizadas, en régimen de cooperación internacional controlada, proporcionaría una inmensa riqueza no solo para esos ciudadanos, que tendrían una promoción propia y digna, sino que cualificaría futuras emigraciones legalizadas.— Francisco González de Tena.