Abramóvich instala un escudo 'antipaparazzi' en su nuevo yate
La embarcación del oligarca ruso dispondrá de un dispositivo capaz de detectar cámaras digitales y lanzarles un haz de luz cuando vayan a tomar una imagen
El millonario ruso Román Abramóvich, dueño del club de fútbol londinense Chelsea, ha instalado un láser en su nuevo yate, el más caro y grande del mundo, para impedir que los paparazzi tomen fotos de él y sus invitados a bordo.
Según informó este domingo el diario The Sunday Times, Abramóvich ha dotado al Eclipse, un yate que se está construyendo en unos astilleros de Hamburgo (Alemania), con una nueva tecnología capaz de bloquear cualquier cámara digital próxima al barco.
El escudo antipaparazzi se basa en un láser de infrarrojos que detecta los senso...
El millonario ruso Román Abramóvich, dueño del club de fútbol londinense Chelsea, ha instalado un láser en su nuevo yate, el más caro y grande del mundo, para impedir que los paparazzi tomen fotos de él y sus invitados a bordo.
Según informó este domingo el diario The Sunday Times, Abramóvich ha dotado al Eclipse, un yate que se está construyendo en unos astilleros de Hamburgo (Alemania), con una nueva tecnología capaz de bloquear cualquier cámara digital próxima al barco.
El escudo antipaparazzi se basa en un láser de infrarrojos que detecta los sensores de luz electrónicos de las cámaras digitales, a las que lanza un haz de luz provocando una distorsión en la fotografía.
Con el nuevo dispositivo, el oligarca, de 42 años, quiere evitar que los fotógrafos capten imágenes suyas o de su novia, la diseñadora rusa Daria Zukhova, de 28 años. Aún así, Abramóvich podría tener dificultades para salvaguardar completamente su intimidad, ya que el láser no detecta las cámaras analógicas.
El Eclipse, cuyo coste casi se ha triplicado desde que se encargó hace tres años y se estima en unos 820 millones de euros, se entregará el próximo diciembre. Será el yate más largo del mundo -según han asegurado sus constructores, aunque un contrato de confidencialidad les prohíbe señalar la longitud exacta de la embarcación- y engrosará la flotilla de tres yates que ya tiene el multimillonario. El dueño del Chelsea ya posee el mayor avión privado del planeta, un Boeing 767 bautizado como The bandit (el bandido).