El alcalde de San Fernando se encierra siete horas en Fomento

No han dejado ni que le dieran un bocadillo, pero el alcalde de San Fernando de Henares, Julio Setién (IU), ha prometido que permanecería encerrado en la sede del Ministerio de Fomento hasta entrevistarse con algún responsable, como el secretario de Estado de Infraestructuras o la propia ministra, o hasta recibir un compromiso por escrito de que será recibido en breve. Setién ha logrado lo segundo tras permanecer atrincherado desde mediodía hasta última hora de la tarde en las dependencias de la Dirección General de Carreteras, en la séptima planta de la sede del departamento. Tras siete horas...

No han dejado ni que le dieran un bocadillo, pero el alcalde de San Fernando de Henares, Julio Setién (IU), ha prometido que permanecería encerrado en la sede del Ministerio de Fomento hasta entrevistarse con algún responsable, como el secretario de Estado de Infraestructuras o la propia ministra, o hasta recibir un compromiso por escrito de que será recibido en breve. Setién ha logrado lo segundo tras permanecer atrincherado desde mediodía hasta última hora de la tarde en las dependencias de la Dirección General de Carreteras, en la séptima planta de la sede del departamento. Tras siete horas y media, le han dado cita para la semana que viene con el secretario de Estado de Relaciones Institucionales. Quiere que se construyan de una vez los accesos desde la A-2 al nuevo polígono industrial y comercial previsto por el municipio, en el que prevé instalarse IKEA. Hasta 4.500 puestos de trabajo, según el alcalde de la localidad madrileña, dependen de esa vía.

Setién ha llegado a las once de la mañana a la sede ministerial para reunirse con el director general de carreteras y tratar con él los retrasos que está sufriendo la carretera, que "fue aprobada en el plan general de carreras de 2002". Cuando la firma sueca estuvo buscando emplazamiento para su cuarta tienda en la Comunidad de Madrid, se decantó por estos terrenos precisamente por sus buenas (y futuras) conexiones.

En mayo, Ikea quiere empezar las obras pero como los accesos no llegan amenaza, según Setién, con buscar otro lugar para su establecimiento. Y con ella, todos los comercios y locales de ocio que iban a florecer a su alrededor, una zona que supone la mitad del suelo industrial de San Fernando. El polígono, que ya tiene aprobado el plan parcial, supondría el desarrollo de 800.000 metros cuadrados de suelo terciario, cuya urbanización costará unos 339 millones de euros. El alcalde calcula que son 4.500 puestos de trabajo que su pueblo, a unos 15 kilómetros de la capital y con 40.000 habitantes, puede perder.

Los servicios, también en peligro

También significaría, según Setién, que su Ayuntamiento, "que vive de los ingresos generados por la actividad industrial, dejaría de percibir un importante montante económico y eso pondría en peligro el mantenimiento de los servicios que prestamos a los ciudadanos".

En la cita de esta mañana les han informado de que el dictamen es favorable a los accesos, pero que está supeditado a dos obras que deben realizarse priviamente: uno, la ampliación de la A-2, para la que no hay fecha fijada, y otra, un tramo de vía que debe acometer AENA. Esto significa, según ha explicado el regidor, que antes de construir los accesos al futuro complejo comercial "Fomento tendría que construir una nueva autopista y las previsiones más optimistas apuntan a que eso se produciría en el año 2014 y nosotros no podemos esperar porque Ikea, que es el motor del nuevo desarrollo, lleva un año de retraso y si las cosas se complican optará por irse, como es normal".

El alcalde denuncia que les están mareando porque se aprobó el proyecto y les han ido pidiendo matizaciones hasta hoy. Con Setién, que planeaba hacer noche en Fomento, estaban los concejales de Empleo, Comercio y Transportes. Los cuatro han abandonado Fomento con la cita bajo el brazo, que se producirá la próxima semana.