Humanoides y aspiradoras

Resulta sugerente la idea de que un robot-aspirador sea el germen que permita a una empresa transitar de la venta de artículos a la venta de servicios de salud o de otra índole

Un empleado limpia una pantalla Roomba de iRobot en una tienda de Amazon en Berkeley, California, en 2019.Cayce Clifford (Bloomberg)

Mucho se ha hablado estas últimas semanas sobre la adquisición por parte de Amazon de iRobot, la compañía propietaria del robot-aspiradora Roomba. Entre los motivos que los analistas enumeran para justificar la operación destacan el descenso en la cotización de iRobot, que ha permitido un precio de compra más atractivo y, por otra parte, la enorme cantidad de información adicional que este tipo de dispositivos podría aportar a Amazon para realizar ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Mucho se ha hablado estas últimas semanas sobre la adquisición por parte de Amazon de iRobot, la compañía propietaria del robot-aspiradora Roomba. Entre los motivos que los analistas enumeran para justificar la operación destacan el descenso en la cotización de iRobot, que ha permitido un precio de compra más atractivo y, por otra parte, la enorme cantidad de información adicional que este tipo de dispositivos podría aportar a Amazon para realizar un mejor perfilado de sus clientes, incluyendo información sobre su estilo de vida, su estructura familiar, nivel patrimonial o cualquier otro dato que le permita maximizar sus ventas. Estos aspiradores se desplazan por la vivienda empleando sensores de presión, infrarrojos, pero también incluyen antenas wifi y, en sus últimas versiones, cámaras que, mirando hacia arriba en un ángulo de 45 grados, complementan al resto de sensores del aparato. Las cámaras, combinadas con tecnología de inteligencia artificial, son capaces de identificar todo tipo de objetos y situaciones. Cuestiones sobre privacidad al margen, es obvio que el potencial de información es mayúsculo.

iRobot reporta unas ventas totales de 40 millones de estos dispositivos en el mundo desde su lanzamiento hace 20 años. Para poner esta cifra en contexto, Amazon tiene más de 200 millones de clientes-suscriptores. Solo en 2021 se vendieron 65 millones de asistentes de voz Amazon Echo.

Pocas semanas antes de esta noticia, Amazon comunicaba la adquisición de One Medical, una empresa estadounidense de salud que combina servicios médicos en persona, digitales y virtuales.

Elon Musk publicaba la semana pasada un artículo en China Cyberspace, una revista mensual de la agencia china de regulación y control de internet. En él volvía sobre la idea de lanzar un robot humanoide de propósito general (Tesla Bot, ahora rebautizado Optimus) que pudiera reemplazar a las personas en la ejecución de tareas repetitivas, aburridas o peligrosas, evolucionando a otras, como cocinar o cortar el césped. El 30 de septiembre podría presentarse un prototipo de este robot en el Tesla AI Day, según publicó Musk en Twitter.

Entre la robotización asequible y útil que iRobot consiguió sustanciar con su Roomba y la industrialización y comercialización de humanoides de propósito general, existe aún un largo trecho. Resulta sugerente la idea de que un robot-aspirador sea el germen en el que confluyan los factores de utilidad, precio asequible, interfaz natural de comunicación (como la que incorpora Amazon Alexa u otros asistentes virtuales) y capacidad de desplazamiento e interacción en el mundo físico que permitan que una compañía como Amazon pueda transitar de la venta de artículos a la venta de servicios de salud o de otra índole. El tiempo dirá.


Más información

Archivado En