Adif y Renfe retirarán por piezas y durante las noches el tren descarrilado entre Atocha y Chamartín

Las operaciones no precisarán cortes en el tráfico de alta velocidad

Tren Avant de Renfe descarrilado en el túnel que une las estaciones de Atocha y Chamartín.Xuan Vega (Europa Press)

Los problemas de tráfico ferroviario causados por el siniestro del sábado 19 de octubre en Madrid, con el descarrilamiento de un tren de Renfe en el túnel de alta velocidad que enlaza las estaciones de Atocha y Chamartín, va a resolverse despiezando el convoy varado para su extracción. El gestor de la infraestructura, Adif, ha diseñado una operación junto a la propia Renfe por la que el tren será retirado sin...

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Los problemas de tráfico ferroviario causados por el siniestro del sábado 19 de octubre en Madrid, con el descarrilamiento de un tren de Renfe en el túnel de alta velocidad que enlaza las estaciones de Atocha y Chamartín, va a resolverse despiezando el convoy varado para su extracción. El gestor de la infraestructura, Adif, ha diseñado una operación junto a la propia Renfe por la que el tren será retirado sin necesidad de cortar la circulación.

El Avant S114, formado por cuatro coches, será extraído del paso subtearréneo por piezas para liberar la vía afectada por el accidente. Lo que en el argot se denomina canibalización, se ha impuesto a otras dos opciones. El uso de grúas era imposible por las medidas del túnel.

El paso Atocha-Chamartín permaneció cortado durante ese fin de semana y fue abierto al tráfico con una sola vía útil el lunes 21. Desde Adif se ha indicado que se ha optado por un plan en el que se prima el tiempo de recuperación de la infraestructura y la seguridad tanto de los trabajadores como de los viajeros. Está previsto que las piezas que salgan en buen estado sean utilizadas como repuestos.

Las labores para descomponer el tren se realizarán durante varias noches para garantizar la menor afectación posible al tráfico ferroviario. De momento se descarta cortar el túnel durante un fin de semana, tal y como se barajaba inicialmente, para resolver el caso. Desde Adif se ha destacado el “esfuerzo técnico y logístico sin precedentes” para el ferrocarril que exige esta iniciativa.

Pocas horas después de que el tren se desenganchara de la unidad remolcadora y viajara a la deriva túnel abajo, con el consiguiente riesgo de colisión, comenzó una investigación por parte de los técnicos de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF). En un primer relato hecho público por ese organismo independiente la semana pasada, se apuntó que el incidente se produjo a las 16:20 horas del sábado 19 en el punto kilométrico 6,900 (el túnel de 7.300 metros de longitud). Los técnicos involucran de momento a Renfe, como operadora del tren Avant de la serie S114, y a Adif como gestora de la infraestructura. Una de sus primeras conclusiones es que un operario del centro de control de Adif favoreció la salida de vía, con un cambio de agujas, para evitar un posible choque.

“El tren 97015 partió de La Sagra (Toledo) con destino a los talleres de Fuencarral (Madrid). Estaba formado por dos unidades del tren regional de alta velocidad serie 114: la primera unidad iba remolcando a la segunda, que estaba averiada”, comienza el resumen de la CIAF sobre un viaje que acabó colapsando los corredores de alta velocidad entre Madrid y Levante por el taponamiento del túnel. “La tripulación del tren estaba formada por un maquinista y dos técnicos de mantenimiento”, corroboró la CIAF.

El Avant remolcador “sufrió un fallo de tracción que le impidió subir la rampa de entrada a la estación (de unas 30 milésimas)” de Chamartín, continúa el breve informe preliminar. “Para superar la rampa, el maquinista y el puesto de mando [se involucra a Adif] acordaron que el tren retrocediese para tomar impulso desde un tramo más llano. Mientras se preparaba esta maniobra, la unidad de tren averiada (la remolcada) se soltó de su enganche y comenzó a derivar túnel abajo sin frenos, sin batería y con los dos técnicos a bordo”.

De momento están por explicarse la causa del desacople y la razón de que no se activara freno alguno. El descarrilamiento se produjo en el puesto de banalización de Jardín Botánico, donde el Avant sin frenos “llegó a gran velocidad” siendo cambiado de la vía número 1 a la número 2. Los tres primeros coches volcaron, mientras que el cuarto permaneció descarrilado, pero en posición vertical.


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