Grecia anuncia límites a los apartamentos turísticos y a los cruceros
Mitsotakis anuncia medidas para limitar los alquileres de corta duración y para gravar la llegada de cruceros a Mykonos y Santorini
El primer ministro Kyriakos Mitsotakis ha anunciado medidas contra la masificación turística de las islas más populares y Atenas. El ejecutivo griego quiere limitar los alquileres de corta duración y gravar la llegada de cruceros. “Estoy muy preocupado por la imagen de algunas de nuestras islas durante algunos meses del año debido a los cruceros”, dijo.
Mitsotakios realizó el anuncio en la 88ª Feria Internacional de Tesalónica, la segunda ciudad del país. La costumbre dice que cada septiembre, en dicho evento, que reúne a la clase empresarial del país y a gran parte de la de los Balcanes, el primer ministro abre la feria con un discurso en el que anuncia el rumbo que quiere imponer a su política económica. Este año, la mirada estaba puesta en el turismo porque Grecia va camino de superar el récord alcanzado en 2023, con más de 36 millones de visitantes en un país que apenas tiene 11 millones de población.
Las medidas anunciadas por Mitsotakis son las siguientes: un plan para incentivar la transformación de alquileres de corta duración por alquileres de tres años mediante incentivos fiscales para los propietarios y restringir por ley la posibilidad de destinar a usos turísticos los apartamentos en alquiler. Además, anunció que a partir de 2025, Grecia gravará con 20 euros a cada pasajero de un crucero que desembarque en Santorini y Mykonos. El pasado julio, el alcalde de Santorini propuso limitar a 8.000 cruceristas al día las visitas a una isla que tiene una población permanente de 11.000 personas.
Mitsotakis aseguró que “gran parte de lo recaudado” se destinará a la lucha contra los efectos del cambio climático, cada vez más evidentes en un país cuyos veranos se están convirtiendo en una sucesión de incendios incesante. “El turismo aporta mucho a la economía con entrada de dinero y puestos de trabajo, pero también debe pagar su parte especial de rentabilidad social”, declaró el primer ministro.
Pero, al mismo tiempo, Mitsotakis se esforzó por aclarar que no se trata, en ningún caso, de medidas contra el turismo sino contra la masificación en los lugares más sobrecargados, es decir, Mykonos, Santorini y Atenas. Queda por ver la redacción concreta de la ley y si las limitaciones afectan solo a los alquileres por días o también a las estancias de meses destinadas a nómadas digitales. Las dificultades de acceso a la vivienda son un fenómeno reciente en Grecia, donde crece el descontento por lo que muchos atribuyen a un efecto de plataformas como Airbnb.
Tampoco aclaró Mitsotakis si su medida para limitar los cruceros en Santorini y Mykonos podría traducirse en el aumento de llegadas en otras islas. Grecia cuenta con 106 territorios insulares habitados, gran parte de ellos destinos turísticos. Aunque, al menos de momento, otras islas no han mostrado gran interés en recibir a los barcos que eventualmente dejen de ir a Santorini. El pasado 25 de abril, un crucero de grandes dimensiones recaló en Lesbos, un destino poco habitual. Debido a lo excepcional de la situación, las autoridades locales pidieron a los comerciantes que abrieran las tiendas para los cruceristas, dado que el miércoles por la tarde en Grecia es día de descanso en el comercio. Los titulares del día siguiente en la prensa local destacaron que no abrió ni una tienda.