La inflación en la eurozona se modera dos décimas en marzo, hasta el el 2,4%

La inflación en la eurozona continuó en marzo su descenso, hasta situarse en 2,4% interanual, frente al 2,6% registrado en febrero, según las estimaciones preliminares de la oficina estadística de la Unión Europea, Eurostat. La moderación de dos décimas en marzo supone un alivio para el bolsillo de los hogares y consolida la evolución descendente de los precios de los últimos meses. Refuerza también el argumento del Banco Central Europeo (BCE) para empezar...

La inflación en la eurozona continuó en marzo su descenso, hasta situarse en 2,4% interanual, frente al 2,6% registrado en febrero, según las estimaciones preliminares de la oficina estadística de la Unión Europea, Eurostat. La moderación de dos décimas en marzo supone un alivio para el bolsillo de los hogares y consolida la evolución descendente de los precios de los últimos meses. Refuerza también el argumento del Banco Central Europeo (BCE) para empezar a desmontar a partir de este verano la política monetaria más dura y abordar las rebajas de tipos tras un periodo de casi dos años de fuertes subidas hasta niveles no vistos desde principio de siglo.

Los precios en Europa se han moderado desde el máximo de octubre de 2022 cuando la inflación marcaba un 11,5%. Una vez que la crisis energética desatada a raíz de la invasión rusa de Ucrania ha pasado de largo y que la tensión sobre los alimentos se está relajando, el aumento de los precios se ha moderado en la mayoría de los sectores y países. Las dificultades que atraviesan algunos países del corazón de Europa también provoca un parón de la demanda, lo que tira de los precios hacia abajo. Además, de momento, los sueldos están recuperando poco a poco el poder adquisitivo perdido durante los primeros meses de la crisis inflacionaria, pero no se ha producido los temidos efectos de segunda ronda.

Con un 3,2%, España, se sitúa por encima de la media de la zona de la moneda única europea y, también, con un mayor aumento de precios que las otras grandes economías europeas, aunque sigue manteniéndose en el área intermedia de la tabla total de inflación. El aumento de precios en España se debe, sobre todo, al aumento del IVA de la electricidad del 10% al 21%. Una vez que ha amainado la crisis energética y los precios se han relajado, el Gobierno español ha recuperado el tipo ordinario que aplicaba sobre el consumo de energía.

El aumento del precio de los servicios siguen estando en lo más alto de la cesta mensual, con un 4,0%, entorno en el que se mantiene desde finales de 2023. Por el contrario, los alimentos, alcohol y tabaco moderaron su aumento respecto a marzo (2,7%, frente a 3,9% en febrero). Pero la mayor caída la siguieron protagonizando los precios de la energía, aunque de forma más moderada que el mes previo (-1,8% frente a -3,7%), y los alimentos no procesados (-0,4%, frente a 2,1% en febrero).

La inflación subyacente —sin los precios de la energía y los alimentos— también continuó su descenso hasta situarse en 2,9%(frente a 3,1% en febrero). Por eliminar los factores más volátiles de la cesta de la compra, esta es la cifra en la que más se fija el Banco Central Europeo (BCE) a la hora de fijar los tipos de interés.

Entre los países europeos más destacados, los que presentan un mayor crecimiento de los precios son Grecia (3,4%); España (3,2%); Países Bajos (3,1%); Francia (2,4%); Alemania (2,3%); e Italia (1,3%). En marzo, Croacia siguió a la cabeza de los países de la eurozona con mayor inflación, con 4,9%, seguida de Austria y Estonia (4,2% y 4,1%, respectivamente). En la cola están, por el contrario, Lituania (0.3%), Finlandia (0.7%) y Letonia (1,0%).

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