La sociedad patrimonial de Sandra Ortega ganó un 17% menos en 2022

Rosp Corunna, el grupo con el que gestiona su patrimonio e inversiones Sandra Ortega —hija de Amancio Ortega y, tras su padre, la segunda persona más rica de España— redujo sus beneficios un 17,5% el año pasado, hasta los 203 millones de euros, a pesar de haber aumentado sus ingresos. El patrimonio neto del grupo se redujo en 359 millones de euros, hasta los 5.557 millones, según reflejan las cuentas depositadas en el Registro Mercantil, a las que ha tenido acceso EL PAÍS.

Los principales activos del grupo son...

Rosp Corunna, el grupo con el que gestiona su patrimonio e inversiones Sandra Ortega —hija de Amancio Ortega y, tras su padre, la segunda persona más rica de España— redujo sus beneficios un 17,5% el año pasado, hasta los 203 millones de euros, a pesar de haber aumentado sus ingresos. El patrimonio neto del grupo se redujo en 359 millones de euros, hasta los 5.557 millones, según reflejan las cuentas depositadas en el Registro Mercantil, a las que ha tenido acceso EL PAÍS.

Los principales activos del grupo son una participación del 5,05% en Inditex y otra del 5% en Pharma Mar, ambas sociedades cotizadas del Ibex 35, además de numerosas inversiones inmobiliarias. Mientras que la sociedad fundada por su padre cayó más de un 10% en Bolsa el año pasado, la farmacéutica se revalorizó en torno al 13%. La variación de valor de las acciones de Inditex, indica el grupo en sus cuentas, supuso un descenso de 579,5 millones de euros en su patrimonio financiero. Por los dividendos del grupo textil, correspondientes al ejercicio anterior, la primogénita del clan Ortega se llevó 146,4 millones, que suponen casi dos tercios de sus ingresos.

Aunque los beneficios bajaron, la cifra de negocios del family office pasó de 197,8 millones en 2021 a 220,4 millones el año pasado, un aumento de más del 11%. El negocio financiero acaparó buena parte de esa facturación, con 180,4 millones, seguido del inmobiliario, con 33,17 millones —aunque los ingresos por arrendamientos se redujeron más de la mitad, de 10,27 millones en 2021 a 4,27 millones en 2022— y de la hostelería. Con una facturación de 6,8 millones, esta última experimentó un repunte importante el año pasado respecto del 2021, cuando reportó unos ingresos de tan solo 1,2 millones.

El grupo engloba a varias empresas a través de las cuales Sandra Ortega organiza sus negocios. Rosp Corunna Participaciones Empresariales es la principal responsable de los beneficios obtenidos por el family office, con unos beneficios de 249 millones de euros. Soandres de Activos, la sociedad de inversión de capital variable en España de Ortega, se anotó, por el contrario, unas pérdidas de 18 millones. En julio del año pasado, la primogénita de Amancio Ortega decidió liquidar la sociedad tras los cambios impositivos realizados por el Ejecutivo, que establecían que solo aquellas sicavs que tengan al menos 100 socios con una inversión mínima de 2.500 euros cada uno pueden tributar al 1% en Sociedades.

Dentro de las empresas en las que invierte Ortega está Room Mate, la cadena hotelera del empresario Kike Sarasola, que pidió el año pasado la declaración del concurso de acreedores. Poco después, en julio, la jueza que llevaba el concurso autorizó la venta del grupo hotelero —del que Ortega poseía un 30%— a un fondo estadounidense. Las desavenencias entre Ortega y Sarasola respecto de las garantías prestadas por esta al grupo hotelero forzaron, según la empresa, la declaración del concurso. En sus cuentas, la sociedad de Ortega defiende que no prestó ninguna de las garantías que, por un importe de 150 millones, le han pedido las entidades financieras prestamistas de Room Mate.

Al 31 de diciembre de 2022, Rosp Corunna poseía una cartera de activos inmobiliarios por un valor neto de 524 millones de euros, lo que corresponde a un 9% del total de sus activos. Así, la sociedad ha prácticamente doblado sus inversiones inmobiliarias, que en 2021 ascendían a los 426 millones de euros. De acuerdo con las cuentas, la sociedad ha reducido sus bienes en el extranjero: vendió un inmueble en California, por el que se anotó un beneficio de 108.000 euros, y en enero vendió por 55 millones un hotel en Miami.

Aunque el año pasado la sociedad aumentó sus deudas a largo plazo en algo más de cinco millones de euros, consiguió reducir sus deudas a corto plazo (de un año o menos) drásticamente: estas pasaron de 164,4 millones en 2021 a 13,8 en 2022.

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