Orange España registró en 2021 un año negro con desplome de ingresos y rentabilidad
El consejero delegado del grupo insiste en que participan activamente para una fusión con MásMóvil o Vodafone
Orange España vivió en 2021 un año negro con un desplome de los ingresos y de la rentabilidad. Ya sin la excusa de la pandemia, que impactó duramente en los resultados en 2020, la filial de la operadora francesa volvió a perder la batalla del low cost frente a sus rivales, especialmente con Vodafone, con el que comparte el mismo segmento del mercado. Pero el operador de origen británico ha podido aminorar el efecto de competidores c...
Orange España vivió en 2021 un año negro con un desplome de los ingresos y de la rentabilidad. Ya sin la excusa de la pandemia, que impactó duramente en los resultados en 2020, la filial de la operadora francesa volvió a perder la batalla del low cost frente a sus rivales, especialmente con Vodafone, con el que comparte el mismo segmento del mercado. Pero el operador de origen británico ha podido aminorar el efecto de competidores como MásMóvil o Digi, gracias a su marca Lowi.
La operadora francesa, en pleno proceso de reordenación de marcas para hacerse un hueco en las bajas tarifas, obtuvo unos ingresos de 4.720 millones de euros en 2021, un 4,7% menos que en el ejercicio anterior, y un EbitdaaL (resultado operativo después de arrendamientos) de 1.251 millones, un 12,7% menos.
La caída de ingresos se vio maquillada por la venta de móviles, que creció un 13,6%, hasta los 621 millones. Pero la facturación por servicios minoristas ―el verdadero negocio de las operadoras― se situó en el conjunto de 2021 en 3.192 millones de euros, un 8% menos. Los ingresos por servicios convergentes (paquetes de fibra y móvil) descendieron un 5,8% en el año, aunque el segmento que peor comportamiento tuvo fue solo móvil, con una caída del 13,1%. Otra mala noticia es que los ingresos mayoristas, los que consigue por alquilar su red a otros competidores, descendieron por primera vez (-1,8%).
La filial española fue la que peor comportamiento tuvo de todo el grupo y de hecho, Orange achacó el descenso de beneficios de un 85% hasta 778 millones de euros en 2021, por el impacto del mercado español. La operadora, de hecho, realizó durante 2021 un saneamiento de los activos en España por un importe de 3.702 millones de euros, anunciado en las cuentas del primer semestre. Además, Orange España acordó un expediente de regulación de empleo (ERE) voluntario, que afectó a cerca de 400 trabajadores.
Inversión y clientes
La justificación de Orange España a los malos resultados es que estos mejoraron a medida que pasaba el año. Así, el EbitdaaL del segundo semestre bajó un 9%, frente al 16,2% del primero. “Nos da confianza para continuar la mejora durante 2022 y volver al crecimiento en la rentabilidad en 2023″, señala el grupo galo.
Respecto a la inversión, el capex subió un 1,1%, hasta 980 millones de euros, durante 2021, como consecuencia de los nuevos despliegues de redes de fibra óptica y móvil 5G. La red de fibra de Orange España ha incorporado 739.000 unidades inmobiliarias en el último año, y alcanza ya los 16,1 millones de hogares y negocios, un 4,8% más que el ejercicio anterior. Con respecto al 5G, la compañía cerró 2021 con una cobertura sobre el 58,6% de la población. Su objetivo es llevar la red 5G a más de 1.500 municipios en España en 2022.
Orange cerró 2021 con cuatro millones de clientes de banda ancha fija, en línea con el año anterior, de los que 3,5 millones son de fibra, un 4,5% más en términos interanuales. La operadora cerró el año con un total de 16,32 millones de clientes de telefonía móvil, un 2,6% más en términos interanuales, mientras que perdió el 4,8% de los clientes de televisión, hasta los 690.000, pese al esfuerzo por tener el fútbol de pago.
A vueltas con la consolidación
La caída de ingresos de Orange España ha espoleado una vez más las declaraciones sobre una deseada fusión en el mercado español con Orange, Vodafone y Másmóvil como protagonistas. El consejero delegado del grupo Orange, Stephane Richard, ha afirmado este jueves a los analistas que está trabajando “activamente” en ese proceso de consolidación. “No estamos esperando a ver qué cosas suceden, estamos envueltos activamente”, ha dicho el directivo sobre la filial española, la segunda en aportación de ingresos, solo por detrás de Francia.
Según Richard, que tendrá que dejar la presidencia de Orange tras su imputación en el caso Tapié, todas las combinaciones entre los tres operadores (Orange, MásMóvil y Vodafone) están abiertas, y la única que vetarian las autoridades de la competencia sería una transacción en la que estuviese envuelta Telefónica. Según el directivo, hay demasiados operadores en España, e insiste en que, aunque Orange no participase en el proceso de consolidación, también sería positivo para la compañía.
En la misma línea se ha manifestado el consejero delegado de Orange España, Jean Francoise Fallacher, que ha recordado que en España hay más operadores que en cualquier otro país, indicando que, por ejemplo, el quinto y sexto operador “no son nada pequeños”.La duda es si Fallacher sobrevivirá al relevo obligado de Richard al frente del grupo, ya que la filial española es estratégica y desde que se hizo cargo de la misma no ha cumplido su promesa de frenar la caída de ingresos.