La economía de Japón vuelve a caer por los confinamientos y la ruptura de la cadena de suministros
El Gobierno planea un nuevo paquete de estímulos ante la bajada del PIB del 0,8% en el tercer trimestre
La economía de Japón volvió a arrojar números rojos en el tercer trimestre de 2021, tras un ligero crecimiento en el segundo. Los datos oficiales, hechos públicos este lunes, muestran que el Producto Interior Bruto (PIB) nipón se contrajo entre julio y septiembre mucho más rápido de lo previsto, con una caída del 0,8% con respecto al trimestre anterior. De acuerdo con las estadísticas del Gobierno, el descenso del consumo doméstico durante...
La economía de Japón volvió a arrojar números rojos en el tercer trimestre de 2021, tras un ligero crecimiento en el segundo. Los datos oficiales, hechos públicos este lunes, muestran que el Producto Interior Bruto (PIB) nipón se contrajo entre julio y septiembre mucho más rápido de lo previsto, con una caída del 0,8% con respecto al trimestre anterior. De acuerdo con las estadísticas del Gobierno, el descenso del consumo doméstico durante el estado de emergencia decretado en los meses de verano para hacer frente a la pandemia de covid-19, así como las interrupciones en la cadena mundial de suministros se encuentran entre las principales causas de estas cifras poco halagüeñas.
El pronóstico de los mercados para la tercera economía mundial en el penúltimo trimestre del año anticipaba una contracción del 0,8% anualizada (que ha acabado siendo de un 3%) y un 0,2% intertrimestral, mucho menos pesimista que el bajón que finalmente refleja el informe de la Oficina del Gabinete (del 3% y 0,8%, respectivamente). “La caída ha sido mucho más grande de lo que esperábamos debido a las limitaciones de la cadena de suministros, que han afectado gravemente tanto a la producción como al gasto de capital”, opina Takeshi Minami, economista jefe de Norinchukin Research Institute. “Esperamos que la economía se recupere en el trimestre en curso, aunque lo hará a un ritmo lento, ya que incluso después de que a finales de septiembre se relajaran las restricciones para contener la covid-19, los datos de consumo no son muy positivos”, añade.
Según muestran las estadísticas revisadas, entre los meses de abril y junio, el PIB japonés había avanzado un 0,4% con respecto al trimestre anterior y un 7,6% interanual, impulsado por el aumento del consumo y de la inversión corporativa. El repunte en el número de contagios de covid-19 por la variante delta del virus en el mes de junio, sin embargo, obligó a la administración del entonces primer ministro Yoshihide Suga a decretar el estado de emergencia en 21 de las 47 prefecturas del país. Las medidas restrictivas, que finalizaron el 1 de octubre, acarrearon una caída del 1,1% en el gasto de los consumidores durante el tercer trimestre (tras un ascenso del 0,9% en el trimestre anterior) y un desplome del 3,8% en el gasto de capital (después de crecer un 2,2% en el segundo trimestre).
Las exportaciones, el otro motor de la economía nacional, retrocedieron entre julio y septiembre un 2,1% con respecto al trimestre previo, impactadas por la escasez de chips, la reducción en la producción de coches y los recortes en la cadena de suministros. Algunos economistas opinan que la enorme dependencia de Japón de la industria automovilística ha provocado que su economía sea más vulnerable a las interrupciones comerciales que las de otros países.
Recuperación completa en 2023
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, anunció el viernes que está planeando aprobar un paquete de estímulo económico valorado en “varias decenas de billones de yenes”, medida que algunos expertos del sector han recibido con cierto recelo, escépticos ante el efecto balsámico que pueda tener su impacto a corto plazo en el crecimiento de la economía. Takahide Kiuchi, antiguo miembro de la junta directiva del Banco de Japón y actual economista jefe de Nomura Research Institute, considera que el PIB real no regresará a los niveles prepandémicos hasta la segunda mitad de 2023.
A pesar de un panorama que no invita al optimismo, la tercera economía mundial creció un 1,4% en comparación con el periodo julio-septiembre de 2020, según reflejan los datos preliminares publicados por la Oficina del Gabinete nipón. Según una encuesta de Reuters, analistas esperan que la economía nipona crezca un 5,1% anualizado en el trimestre actual, impulsada por la reactivación del consumo y un alza en la fabricación de coches.