La empresa de Aznar vuelve a beneficios tras declarar un ingreso financiero de 302.000 euros
Famaztella ganó 139.781 euros durante el año pasado, frente a las pérdidas de 194.404 euros en 2019
La empresa del expresidente del Gobierno José María Aznar y la exalcaldesa de Madrid Ana Botella volvió a beneficios durante el año pasado. Famaztella (acrónimo de Familia Aznar Botella), la sociedad que constituyó el matrimonio en 2004, registró un beneficio de 139.781 euros durante 2020, frente a las pérdidas registradas en año anterior de 194.404 euros, según las cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil. La empresa de Aznar vuelve así a beneficios tras registrar pérdidas en 2019 y 2017. El resto de ejercicios,...
La empresa del expresidente del Gobierno José María Aznar y la exalcaldesa de Madrid Ana Botella volvió a beneficios durante el año pasado. Famaztella (acrónimo de Familia Aznar Botella), la sociedad que constituyó el matrimonio en 2004, registró un beneficio de 139.781 euros durante 2020, frente a las pérdidas registradas en año anterior de 194.404 euros, según las cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil. La empresa de Aznar vuelve así a beneficios tras registrar pérdidas en 2019 y 2017. El resto de ejercicios, incluido 2018, registró ganancias.
Las ganancias del año pasado se deben fundamentalmente a unos ingresos financieros de 302.912 euros, porque la empresa no contabiliza cifra de negocios, ni cuenta con empleados. Las cuentas no muestran muchos detalles sobre su actividad principal, que tradicionalmente ha sido la explotación de los derechos de sus libros, discursos y conferencias. “Su principal actividad es la explotación de los Derechos de Propiedad Intelectual en todas sus manifestaciones”, señala la memoria anual de 2020. Las pérdidas se deben a la devaluación de sus inversiones y posiciones financieras.
Los beneficios se destinan íntegramente a compensar las pérdidas de ejercicios anteriores que ascendían a 194.404 euros, según figura en la memoria de 22 páginas. “Durante el Ejercicio 2020 no se han entregado dividendos a cuenta del resultado, no existiendo limitación alguna para la distribución de dividendos”, reza el documento.
La empresa tiene contabilizada una inversión financiera de 2,47 millones de euros, lo que supone un incremento de 81.097 euros respecto a los registros del año anterior. La empresa explica que en este apartado estaba incluida su participación en una empresa tecnológica de Silicon Valley. “En el ejercicio 2018 en este apartado estaba incluida la suscripción de 352.112 acciones de “Spider Claud Wireles, INC” y que se encontraban depositadas en la entidad Mobile Opportunity Investors, con domicilio en EE UU, Los Ángeles — California, las cuales, en el año 2019 se registró su pérdida definitiva por el valor que reflejaban en los estados contables. En el 2019 se registraron pérdidas de créditos comerciales incobrables por importe de 35.710,71 euros”, expone la memoria. Spider Cloud Wireles es una startup dedicada a la instalación de dispositivos para mejorar la cobertura móvil en edificios de oficinas.
Administrador único
La firma, cuyo administrador único es José María Aznar, se creó el 10 de mayo de 2004, menos de un mes después de dejar La Moncloa, con un capital de 3.000 euros. Al principio, se dedicaba en exclusiva a la gestión de los ingresos que generaban los derechos intelectuales de los libros o conferencias, objeto social declarado de Famaztella. La inversión financiera llegó después.
Las cuentas reflejan que la empresa no ha tenido ninguna actividad más allá de los ingresos percibidos por sus inversiones financieras. Tampoco ha pagado sueldo o dividendos a sus accionistas. “Durante el presente ejercicio, la Sociedad no ha registrado importes por retribuciones devengadas por su Consejo de Administración, ni anticipos o créditos a miembros del Consejo de Administración”, señala la memoria.
Las ganancias de 139.781 euros del año pasado quedan muy lejos de los obtenidos en 2009, el mejor año para la sociedad, cuando obtuvo unos beneficios de 445.000 euros y unos ingresos que superaban los 600.000 euros. Entonces la empresa sí que contaba con empleados.