La Policía desmantela en Toledo una ‘granja’ de criptomonedas que usaba una conexión eléctrica ilegal
Los agentes han identificado a una mujer en un chalet donde funcionaban 111 procesadores
La Policía Nacional ha anunciado este viernes que ha desmantelado una granja ilegal de criptomonedas que operaba desde un chalet de Yeles (Toledo). El elevado consumo eléctrico de la casa y unas emisiones térmicas superiores a lo normal provocaron las primeras sospechas, que se confirmaron cuando los agentes registraron la vivienda. Allí encontraron 111 procesadores y sofisticados equipos de refrigeración y extracción de humos y de calor, así como una conexión eléctrica irregular que hab...
La Policía Nacional ha anunciado este viernes que ha desmantelado una granja ilegal de criptomonedas que operaba desde un chalet de Yeles (Toledo). El elevado consumo eléctrico de la casa y unas emisiones térmicas superiores a lo normal provocaron las primeras sospechas, que se confirmaron cuando los agentes registraron la vivienda. Allí encontraron 111 procesadores y sofisticados equipos de refrigeración y extracción de humos y de calor, así como una conexión eléctrica irregular que habría permitido consumir energía ilegalmente. Una mujer ha sido identificada como presunta responsable de un delito de defraudación del fluido eléctrico.
Las denominadas granjas de criptomonedas son los centros donde se crean este tipo de divisas, de las que existen en el mercado más de 10.000 tipos, aunque bitcoin y ethereum son las más conocidas. Su fabricación o minado —como se dice en el argot del sector— requiere un uso ingente de electricidad y muchos equipos informáticos trabajando de manera simultánea, por lo que esa tarea suele realizarse en países con una electricidad barata —es el caso de China— e, idealmente, bajas temperaturas, porque los equipos se calientan mucho. “En este tipo de instalaciones, la rentabilidad está supeditada a precios de electricidad reducidos”, explica la Policía Nacional en un comunicado.
España, uno de los países europeos con el precio de la luz más caro, y con altas temperaturas en verano, olas de calor incluidas, no cumple esos requisitos, pero la acusada trató de eludir esas dificultades con una conexión ilegal al sistema eléctrico a través de una acometida, y numerosos dispositivos de refrigeración.
La investigación continúa abierta, y ahora los agentes tratan de esclarecer si han existido otros delitos. Aunque para muchos inversores se trata solo de un vehículo para obtener beneficios a partir de sus ahorros, en otros casos, como detalla la Policía Nacional, las criptomonedas “se emplean como medio de pago habitual en actividades ilícitas vinculadas a delitos tecnológicos y el blanqueo de capitales”.
El minado de criptomonedas en todo el mundo supera incluso la energía consumida en todo un año por determinados países. La práctica tiene detractores también en China, el lugar donde son más activos. Varias regiones del gigante asiático han prohibido este año el minado a instancias del Gobierno debido a su altísimo consumo de electricidad.